Ramón Pérez es estudiante del doble grado Periodismo y Ciencias Polítias en la UCHCEU. En esta entrada, Ramón cuenta cómo vive su confinamiento. ¡Gracias, Ramón!
Ahora, lo dicho: pasen y lean.
Cuando la Universidad nos avisó de que no retomaríamos las clases presenciales durante un tiempo, muchos pensamos que el segundo cuatrimestre se nos había echado a perder. ¿Cómo íbamos a seguir dando clase sin tener al profesor/a físicamente delante? ¿Cómo trabajaríamos en grupo si cada uno de nosotros/as está en su casa?
Después de tres semanas desde aquel aviso todo ha cambiado. Aquellos que temíamos que el cuatrimestre se nos escapaba de las manos sentimos ahora que la Universidad está más cerca que nunca.
«la Universidad está más cerca que nunca»
Gracias a las diferentes plataformas digitales de la UCH-CEU, alumnos y profesores estamos más conectados que nunca.
A pesar de estar confinados en casa, podemos ver a nuestros profesores a diario y plantearles dudas en riguroso directo. Además, podemos comentar virtualmente con ellos después de cada clase cómo estamos viviendo esta insólita situación. ¡Incluso, hemos llegado a realizar exposiciones en grupo desde nuestras casas!
«Los medios de comunicación están haciendo un gran esfuerzo»
La principal ventaja de trabajar en tu propia habitación es que te permite hacer infinidad de cosas sin moverte prácticamente del sitio. Como apasionado de la radio, siempre tengo el transistor cerca del ordenador.
Pese a estar viviendo momentos muy difíciles, los medios de comunicación están dando una lección magistral de esfuerzo y de perseverancia. Y los estudiantes de Periodismo deberíamos aprender de ello.
De ahí que me pase el día enganchado a la radio, algo que recomiendo enérgicamente, sea tu pasión la radio, la televisión o la prensa escrita o digital.
Debemos aprovechar esta «clase magistral» para ampliar conocimientos y aprender de aquellos comunicadores que se encuentran trabajando rigurosamente sobre el terreno.
Sin embargo y como no todo ha de ser información, el entretenimiento ocupa igualmente un papel fundamental en este momento de confinamiento.
Disponer de tantísimo tiempo libre me ha permitido recuperar muchas lecturas que había aparcado a un lado.
Ahora estoy metido de lleno en las historias que relata la escritora y periodista Mara Torres en sus novelas La Vida Imaginaria y Los Días Felices. Y ya tengo una amplia lista de libros que quiero leer durante las próximas semanas.
Ramón Pérez: «El entretenimiento nunca falta en una familia numerosa».
Y como apasionado de la política también, estoy revisando algunas de las obras actuales que más me gustan en esta materia. Os recomiendo El Príncipe Moderno, del politólogo Pablo Simón y Las Campañas Conectadas, del consultor político Xavier Peytibi.
Y, por si esto no fuera suficiente para pasar el rato, he de decir que el entretenimiento nunca, nunca falta en mi casa con mis hermanos y hermanas, como familia numerosa que somos.
En cualquier caso y a modo de resumen, el confinamiento está siendo una oportunidad para aprender más de aquello que me gusta.
Desde el punto de vista académico, porque las clases de la Universidad siguen de manera virtual y con absoluta normalidad y porque el cuatrimestre no se detiene.
Y desde un punto de vista más informal, porque, a pesar de encontrarme recluido en casa, estoy disfrutando muchísimo día tras día a través de la radio y de la buena lectura.
¡Espero que también sea así para vosotros/as! Puede que estemos separados. Pero, precisamente por esto, estamos más unidos que nunca.