Soy Rafa Salvador y escribo desde Londres. Comencé a estudiar Derecho y Periodismo en el CEU en el año 2006, con mucha ilusión porque la universidad ofrecía un plan de estudios que me permitía compaginar ambas licenciaturas a la vez. No obstante, lo que encendió mi interés fueron los recursos de los que disponía la facultad para desarrollarme. Siempre he pensado que la universidad está para conocerte a ti mismo, disfrutar y ponerte a prueba y esto es lo que encontré estudiando periodismo en el CEU.
la universidad está para conocerte a ti mismo, disfrutar y ponerte a prueba
me ayudaron a descubrir mi vocación y gustos como profesional
El CEU dispone de platós, Radio CEU y El Rotativo, el periódico de la universidad, que me permitieron tener experiencias como periodista desde el primer día y me ayudaron a descubrir mi vocación y gustos como profesional. De El Rotativo guardo los mejores recuerdos de mi paso por la universidad como estudiante de periodismo. Debido a mi doble licenciatura, no disponía de mucho tiempo, pero los profesionales al cargo del periódico siempre me estimularon a mejorar mis aptitudes como periodista. En El Rotativo, aprendí a reinventarme y a conquistar la incertidumbre. Ningún aula o libro te prepara para resolver situaciones, como cuando alguien te cita dos horas antes de lo previsto, se te acaban las pilas de la grabadora o un periodista de otro medio se esconde en una esquina para escuchar y copiar las preguntas de tu entrevista mientras la estás realizando.
En El Rotativo, aprendí a reinventarme y a conquistar la incertidumbre.
decidí buscar oportunidades en el extranjero.
Acabé de estudiar en plena crisis y decidí buscar oportunidades en el extranjero. Con mis ahorros después de trabajar en diversos sitios, me fui a la Universidad de Utrecht a cursar un Máster en Criminología. Aunque en Holanda el idioma predominante es el neerlandés, en este país todo el mundo maneja con fluidez el inglés. Gracias a ello -y después de que me dieran varios portazos en la cara, porque sin neerlandés encontrar trabajo no es sencillo- pude independizarme y salir adelante. De esta forma pude costearme mi habitación en Utrecht y pagarme la universidad -y otros gastos, como mi afición al paracaidismo-. Gracias al dinero de mi trabajo, me pagué los viajes para asistir a diversas conferencias de medio ambiente en Inglaterra, Hungría y Holanda, y participé en ellas dando a conocer mi tema de investigación en el Máster de Criminología: los incendios forestales en España. Gracias a ello, voy a empezar a trabajar como doctorando en criminología en la universidad de Middlesex, en Londres, este octubre.
me ha funcionado pensar en grande y sobre todo, a no limitarme, etiquetando quién o qué quiero ser.
Para concluir, he de decir que no me atrevo a dar consejos a nadie sobre cómo tener éxito, pues soy joven y todavía tengo mucho camino que recorrer. Me ha servido mucho ser optimista -puestos a hacer algo, ¿de qué sirve dudar de uno mismo? También me ha funcionado pensar en grande y sobre todo, a no limitarme, etiquetando quién o qué quiero ser. En el contexto de crisis económica que sufrimos, pretender encontrar trabajo en un sitio cerca de tu casa con el sueldo de tus sueños y con tus amigos de toda la vida sólo conduce a desengaños. Después de dos años en el extranjero, las personas que me quieren siguen estando a mi lado: lo único que ha cambiado es que he sido yo el que ha tenido que dar un paso adelante y salir a buscar trabajo.
Atravesar las fronteras de un país implica dejarlas atrás igualmente en tu propia mente, abriéndola al máximo a todo descubrimiento que amplíe tu mapa del mundo. Si hay algo de lo que me arrepiento es de no haberme atrevido a irme al extranjero antes, porque me he dado cuenta de que lo mejor de esta vida viene de un salto al vacío. Yo se lo recomiendo a todo el mundo, pues es la mejor oportunidad para descubrir de qué estás hecho.
Puedes saber más sobre él en su perfil de LinkedIn. ¡Gracias Rafa!