Aprovechando la gran experiencia de Rafa en el sector de alimentación y su conocimiento del modelo de Mercadona el pasado jueves 12 lo tuvimos de invitado en una clase de Políticas de Distribución. Los alumnos debatieron sobre el modelo de éxito que supone lo que ha hecho Mercadona y sus interproveedores.
Rafael Alonso es aficionado a la escritura, el golf y a observar el ser Humano. Dispone de una amplia experiencia en el mundo empresarial y desde hace unos meses es profesor asociado en Dirección de Empresas de nuestra universidad , con un currículo donde destaca haber sido Adjunto a la Presidencia de Martínez Loriente S.A. durante mas de 8 años.
ML es el interproveedor de Mercadona para los productos cárnicos con unas cifras superiores a los 500 millones de € de facturación y mas de 1.000 empleados.
La obligación para el interproveedor también pasa por disponer de un sistema de mejora continua de todos los procesos para reducir sus costes, desarrollar de manera permanente productos y mejoras en los existentes, atención y apoyo a otros interproveedores, una política de personal avanzada, una política medio ambiental y una implicación en la sociedad.
En definitiva el modelo de éxito de mercadona no se basa en la eliminación de marcas, en exprimir al proveedor o en maltratar al empleado. Todo lo contrario en satisfacer las necesidades del consumidor, su jefe, en acuerdos a largo plazo con proveedores muy próximos a un modelo de Keiretsu y en un formato de supermercado de barrio muy próximo al consumidor.
Y aunque podemos encontrar detractores del modelo, las cifras son tremendas:
- 19.077 millones de facturación en 2012 con un crecimiento del 7% respecto al año 2011
- 508 millones de beneficio neto.
- 9.647 millones de kilitros (unidad que utilizan para referirse bien sean litros o kilos)
- 650 millones de inversión en 2012. 1760 millones en los últimos 3 años
- 3.570 millones de aportación al PIB nacional.
- Acuerdos estables con el sector primario: 4.200 agricultores, 3.000 ganadores y 41 cofradías de pescadores.
