Obsolescencia programada

Algunos ejemplos destacables de obsolescencia programada los podemos encontrar en varios objetos que utilizamos constantemente:

En primer lugar, los móviles:
¿En esta sociedad consumista, sería posible que las marcas líderes en el mercado de la telefonía móvil, las cuáles compiten sobretodo en calidad, estuvieran programadas para estropearse en un momento dado? La respuesta es sí.

Por un lado, encontramos IPhone, marca a la cual, en Estados Unidos, se puso una demanda colectiva a la vida útil de las baterías de estos teléfonos móviles. Debido a que se están viendo numerosos casos en que se estropean las baterías, es prácticamente imposible su reparación y en el caso de conseguirlo, puede hacerlo exclusivamente el servicio técnico de Apple con un coste en tiempo y dinero desorbitados.

Por otro lado, encontramos Samsung, su competencia directa. Uno de los modelos más famosos del año 2012, el Samsung Galaxy SIII, se ha visto afectado en gran medida por su última actualización, la cual, ha dado problemas en todos los terminales. Algunos relacionan estos problemas derivados de la aplicación con la crisis de ventas que está sufriendo la compañía respecto a su nuevo modelo (Samsung Galaxy SIV), el cuál no ha tenido el éxito esperado y ha sido claramente superado por su principal rival IPhone V.

Otro ejemplo que podemos observar actualmente, son los electrodomésticos, en concreto las lavadoras, las cuales, están dando gran cantidad de problemas.

Se pueden encontrar gran número de ejemplos, en foros de debate, sobretodo referentes a la marca Bosch, donde se explica claramente problemas particulares que ha venido teniendo la gente a los 3 o 4 años de tener una lavadora de esta marca; se producía un bloqueo total del electrodoméstico, provocado por el simple desgaste de las escobillas del motor, las cuales deben sustituirse cada cuatro años y para ello es necesario cambiar el motor entero; lo cual no es imposible, pero sí muy caro.

¿Respuesta del servicio técnico al ver el problema?
Es un defecto de fábrica, yo de usted me compraba una nueva.

Me pareció muy interesante el documental que vimos en clase. La obsolescencia programada es una realidad presente en muchos productos que mantiene activa la compra y venta de los mismos, principalmente de aquellos electrónicos, en el mercado. En mi opinión, la obsolescencia programada no es mala, pues a pesar que representa muchas veces un nuevo gasto para algunas personas, gracias a esa compra y venta de los productos se mantiene activa la economía. Es decir, muchas empresas se mantienen vivas, generando empleo y creando ingresos.

Un ejemplo de un producto con obsolescencia programada son las lavadoras. Se dice que las lavadoras podrían durar hasta más de 50 años. Sin embargo, estos productos están programados con un límite de lavados para que llegue a tener una vida útil y así después de un tiempo se necesite comprar un reemplazo. En mi opinión, si las lavadoras no tuvieran una vida útil entonces las empresas que venden estos productos electrodomésticos ya no existirían en el mercado y esto causaría menos ingresos y mas desempleo. Asimismo, los móviles, los ordenadores y otros productos también funcionan de ésta manera. Creo que lo complicado está en decidir cuánta vida útil darle a estos productos para lograr que la empresa se mantenga en el mercado y que los clientes se sientan satisfechos con el producto.

Un ejemplo de obsolescencia programada se encuentra en la industria de la moda textil : marcas como Zara, Pull&Bear, H& lanzan nuevas colecciones casi cada semana. Lo que por supuesto alenta a la gente a comprar mas.
Ademas de lanzar nuevas colecciones, marcas como Primark, por ejemplo, fijan también precios muy baratos (camiseta, zapatos o vestido para 15 euros) para que la gente compren ropas como uso único y vuelvan mas rápidamente en las tiendas.

La obsolescencia programada es un subjeto muy interesante. De echo, nos podemos preguntarnos ¿cómo se puede ser que una cosa así sea legal? La idea principal es de mantener un mercado lo mas abierto posible y que no sea saturado, porque en este caso, si todo el mundo tendría por ejemplo una lavadora y que durarían 30 años, los fabricantes no podrían vender ni producir mas y en una economía de crecimiento, esto seria un desastre.

Pero puse muchos otros problemas: los consumidores deben cambiar sus maquinas mas a menudo que antes, hace más productos tecnológicos en la basura y entonces cree polución, desconfianza de los consumidores, cuasi imposibilidad de hacer una reparación sobre un producto, etc… Entonces podemos decir que este fenómeno tiene unos lados buenos y otros terribles.

Hay muchos ejemplos de productos que tienen una obsolescencia programada cuyo los laptop (6 hasta 8 años), televisiones (8 años), celulares (4 años, pero en medio están cambiado cada 20 meses), refrigeradores (10 años) -según un estudio de la UNEP: United nations environment programme en 2009-.
De hecho, la reparación de algunos productos es tan caro, solamente 44% de los productos electrónicos son reparados después de una avería (ADEME, 2007).

creo que es fácil pensar que este sistema crea trabajo, porque si un producto se estropea, una otra persona deberá hacer uno de nuevo. Sin embargo, aunque la obsolescencia puede incentivar el progreso, pienso que un producto no debe inducir a engaño al consumidor. En efecto la garantía se calcula: están seguros de que el producto no se rompe durante el tiempo de garantía,

los fabricantes de todo tipo de aparatos electrónicos los programan para que duren un tiempo determinado :
por ejemplo, la impresora Epson incluye un contador de páginas impresas, y llegados al límite programado, deja de funcionar.

Un otro ejemplo puede ser los medicamentos.
En efecto, contienen componentes químicos que tienen una fecha de vida limitada, sin embargo, algunos laboratorios reducen la fecha de caducidad de los medicamentos que producen con el fin de vender mas.

La obsolescencia programada es una decisión tomada por las empresas para que los clientes compren los productos de la marca regularmente. Es omnipresente en la sociedad actual de consumo, especialmente en el Occidente.
Hay diferentes tipos de obsolescencia programada :
– La obsolescencia funcional por defecto : una parte falla y la máquina deja de funcionar. Ejemplos : lavadoras, televisores.
– La obsolescencia por incompatibilidad en el sector informático como smartphones o software donde es necesario en algún momento de descargar la nueva versión.
– La obsolescencia indirecta que afecta los accesorios.
– La obsolescencia mediante notificación como impresoras que envían el mensaje de que tenemos que cambiar el cartucho de tinta, mientras que todavía se puede imprimir.

Un ejemplo muy significativo : las medias de nylon (ropa interior de las mujeres)
En 1940, Dupont, un famoso químico, lanza las primeras medias de nylon. Este producto tuvo un gran éxito con las mujeres. En efecto, estas medias son mucho mas fuertes que las medias de seda (anteriormente comercializadas) y permiten a las mujeres a tener mucho más tiempo. Esta fuerza disminuyó la actividad económica del producto ya que las ventas comenzaron a estancarse. El producto será entonces entregado voluntariamente más frágil para reducir su vida y hacerlo más rentable.

La obsolescencia programada es un problema actual y algunas instituciones europeas como el Comité Económico y Social Europeo (CESE) quieren resolverlo proponiendo una interdicción total.

Es cierto que todo tiene un ciclo de vida, y eso no lo convierte a todo en Obsolescencia programada. Lo que convierte a las cosas en Obsolescencia programada es acortar su tiempo de vida de manera planificada.

Un claro ejemplo son los productos electrónicos como los televisores, celulares, impresoras, etc. Uno de estos, que en mi experiencia personal es obsoleto programado es la secadora de cabello. En mi hogar siempre hemos tenido una secadora de cabello, que recuerde, y somos 3 hermanas mujeres. Esta ya estaba antigua hace un poco más de un año se nos malogro, pero era porque ya había llegado su ciclo de vida, pues nos duró muchísimo. Decidimos comprar otra de una marca igual a esta, pero no encontramos, pero entre las «mejores» (marcas reconocidas) compramos una y nos duró 5 meses y se malogro. Compramos otra de otra marca que, supuestamete, era también muy buena y nos duró un poco más de medio año, pero como esta la compramos con garantía pagando un extra para el reemplazo del producto por daños, nos dieron una nueva, que suponemos tampoco durará mucho.

La obsolescencia programada está presente en todos los productos que podamos conocer, los fabricantes lo hacen a propósito para que no dure un producto toda la vida, cosa que con las debidas investigaciones se podrían hacer productos que durasen toda una vida como la bombilla que vimos en el mismo documental.

Bueno por ejemplos de obsolescencia programada tenemos los televisores cada uno de ellos está diseñado para utilizarse unas 20.000 horas, también tenemos las neveras que antiguamente duraban muchísimo más que ahora, las camas que deben de cambiarse cada 10 años.

La obsolescencia programada no es mas que una planificación de la vida del producto que las empresas producen, con la intención de que los clientes compren estos productos de forma periódica.

Un ejemplo de ello como vimos en el documental son las medias de nylon, que podrían durar sin ningún problema. El caso es que si esto fuese así, la demanda de estos productos seria cada vez menor, llegando a la escasez. Como empresarios esto no interesa a nadie, por lo que mediante la obsolescencia programada se quiere evitar esta escasez de demanda haciendo un circulo, donde la oferta y demanda siempre van cogidas de la mano.

En mi caso personal, mis padres se compraron un televisor philips,que actualmente aun funcionaria si no fuese por la introducción del TDT. Se compraron una televisor Samsung para suplir a este con la entrada del TDT y duro 4 años. Cuando se suponía que era mejor televisor, ya que la tecnología en 20 años a dado un salto muy grande.

Personalmente creo que si no hubiera obsolescencia programada, en muchos productos tendrían que cerrar muchas empresas y negocios, ya que el mercado no seria tan grande ni continuo para fabricar tantos productos.

Tras una primera impresión la obsolescencia programada puede parecer necesaria para la creación de empleo y generación de crecimiento en un país. Sin embargo, me hace pensar que pueda ser inviable por el paso de los años. Uno de los motivos mas claros es el medio ambiente, tenemos recursos finitos y no se va a sostener esta producción tan voraz mas pensando el incremento de la población mundial.

Bajo mi punto de vista la obsolescencia programada se debería eliminar. Si se compra un producto debe poderse disfrutar el máximo tiempo posible y no el impuesto por el fabricante. ¿Cómo aumentar el consumo si aumentamos la durabilidad de nuestro producto?. De una manera muy sencilla, haciendo que los consumidores puedan elegir. Es decir, un consumidor compra un producto y puesto que lo ha pagado tiene derecho a poder utilizarlo el máximo tiempo que fuese posible. La manera de que ese consumidor pueda seguir consumiendo es ofrecerle productos mejores y renovados. De este modo el consumidor no está obligado a tener que reemplazar su producto estropeado sino que si lo reemplaza es por iniciativa propia por tener lo «último» o lo mas «bonito». De este modo los fabricantes se verían en la obligación de seguir innovando, y los consumidores no se sentirían «estafados».

Otro aspecto a tener en cuenta es la necesidad de un sistema de reciclado funcional y eficiente. Por que a este ritmo tras unos años la contaminación de algunas zonas del planeta se va a volver inviable. Las empresas deberían colocar puntos de recogida de productos averiados/inutilizados y así poder realizar el proceso de reciclado y aprovechamiento de los mismos.

Bajo mi punto de vista la obsolescencia programada atenta a la ética empresarial y es contraria a los intereses del consumidor, pero la solución creo que puede estar en el mismo mercado. En un mercado competitivo una empresa que fabrique sus bienes sin obsolescencia programada y sea capaz de demostrarlo conseguiría aumentar sus ventas respecto a sus competidores, es cierto que podría ampliar el período de compra hasta que se repita el acto de compra, pero no hay duda que conseguiría captar a muchos de los clientes.
Pero para que ello suceda deben darse al menos dos premisas: que el Estado impida la colaboración empresarial, es decir el cártel y que el consumidor a la hora de elegir un producto tenga la duración de vida del producto entre sus primeras preferencias. Por lo tanto en un mercado en el que la obsolescencia programada es una realidad clara una o las dos premisas no se cumplen.

Desde mi punto de vista, la obsolescencia programada es algo necesario en los productos, ya que si observamos esto detalladamente, la obsolescencia permite el continuo consumo de los productos por parte de los consumidores, lo que supone que de manera indirecta el continuo consumo permita la creación de puestos de trabajo de todo tipo de sectores, desde arquitectos, diseñadores, dependientes, etc. Por tanto, si atendemos al enfoque socio-económico, la obsolescencia programada es imprescindible para la creación de puestos de trabajo. Pero es necesario destacar, que desde el punto de vista moral la obsolescencia programada es poco ética pues obliga a los consumidores a estar continuamente comprando productos pues estos tienen fecha de caducidad concreta y reducida, por tanto, en mi opinión como consumidor las empresas tendrían diseñar productos que tuviesen una gran durabilidad y de esta forma se podría destinar ese gasto que realiza el consumidor a dicho producto y lo pueda destinar a otras cosas. Pero desde el punto de vista empresarial, para la permanencia de la empresa es necesario que los productos tengan una durabilidad muy corta y de esta forma estar continuamente ofreciendo productos.

La función que el marketing debe ejercer sobre la obsolescencia programada en los productos, en mi opinión, es la siguiente:

El marketing debe lograr captar la atención del cliente de tal manera que, aun tratándose de un producto con una vida útil ilimitada, el consumidor siempre tenga un deseo de adquisición de un producto de la misma marca pero de un modelo más avanzado. El marketing debe marcar cuál será la tendencia en un preciso momento y encargarse de que el consumidor quiera estar constantemente «a la moda». Véase el caso de Mercedes Benz con su modelo Mercedes-Benz SL Roadster:

Vemos claramente que, a lo largo de los años, se ha desarrollado un mismo producto que ,a nivel de piezas técnicas, es muy similar pero que, estéticamente, ha ido evolucionando y creando nuevos estereotipos con el fin de que el consumidor siempre quiera estar al día y nunca quede anticuado.

A través del documental que vimos el otro día, descubrimos la cara oculta de la mercadotecnia donde la obsolescencia programada se perfila como «el plan oculto» ideado para beneficiar exclusivamente al fabricante, dado que en algún momento fallara el producto obligando al consumidor a que adquiera o lo reemplace por otro nuevo.
Aunque el problema de la obsolescencia programada pueda parecer en un primer momento económico, de el se derivan otros problemas medioambientales que también se tratan es este documental, como por ejemplo los productos obsoletos que son llevados a países no occidentales como Ghana, donde son presentados como productos de segunda mano cuando en países desarrollados eso mismo se trata de chatarra que nadie quiere. Aunque algunos de esos objetos son aprovechados y los habitantes de Ghana llegan a arreglarlos, muchos otros se acumulan y surgen vertederos que destruyen la vida de esas zonas.
Todas las personas que aparecen, critican el fenómeno de la obsolescencia programada y nadie defiende este modelo, aunque esta claro que se aplica. Si todos están en contra, ¿por que se permite? Creo que el documental debería dar voz a empresas o instituciones que produzcan programando la obsolescencia de sus productos, ya que son las mismas las que tienen que evitar que esto siga adelante.

En mi opinión, el marketing es muy importante, por no decir lo más importante, respecto a la obsolescencia programada.
Puesto que, ya que los consumidores y usuarios no podemos repercutir en el ciclo de vida o en la duración de los productos y, la mayoría de veces, tenemos que resignarnos a la duración que tengan estos productos, porque como ya vimos en el video de clase, sale más económico e incluso cómodo comprar otro nuevo a reparar lo que se haya estropeado en el nuestro.
Es el marketing el que juega un papel fundamental en esta «estrategia» utilizada por la mayoría de las empresas. Ya que la estrategia de marketing que utilicen las diferentes empresas para sus productos es lo que va a decantar a los consumidores a decidirse a comprar el producto o no. Ya sea por moda, por gusto, por sensación de necesidad…
Un claro ejemplo es el del «Iphone», un producto, el cual, a parte de hacer pensar a sus consumidores que está por encima de todos sus competidores creando así una sensación de necesidad por querer tener lo más actual, lo novedoso, lo que está de moda, lo mejor. Renueva sus modelos cada 6 meses aproximadamente, con pequeñas «mejoras» como una cámara mejor, una forma estética diferente…
Hacen que, aunque realmente no haya una gran diferencia entre el modelo nuevo y el anterior, el consumidor considere su Iphone obsoleto, sin necesidad de que el producto haya sufrido la finalización de su vida útil, es decir, esa estrategia de marketing, convence al consumidor de que la vida útil de su Iphone ha finalizado y lo da por «muerto» por la aparición del nuevo modelo.
Otro ejemplo que podemos observar tiene que ver con la charla que tuvimos de la empresa cárnicas Serrano, en la cual nos contaron que a través de una estrategia de marketing elaborada mediante diferentes campañas, enfocaron sus productos hacia unos consumidores específicos, en este caso hacia los deportistas, con lo que consiguieron que este tipo de consumidores se sintiesen identificados con su producto y lo prefiriesen ante la competencia.
Estos son algunos ejemplos de los diferentes que hay del poder que tiene el marketing ante la obsolescencia programada y ante los productos en general.

A través de este documental, descubrimos la cara oculta de la mercadotecnia donde la obsolescencia programada se perfila como «el plan oculto» ideado para beneficiar exclusivamente al fabricante, dado que en algún momento fallara el producto obligando al consumidor a que adquiera o lo reemplace por otro nuevo.
El documental explica que sin esta practica denominada obsolescencia programada el sistema capitalista no podría sostenerse. Así, y pese a los avances tecnológicos, el sistema prefiere productos de consumo que duran cada vez menos: baterías que se mueren tras 12 meses, impresoras que se bloquean al llegar a un numero determinado de impresiones, bombillas que se apagan a las mil horas… De esta manera, el ciudadano vuelve a consumir y las empresas siguen fabricando
Aunque el problema de la obsolescencia programada pueda parecer en un primer momento económico, de él se derivan otros problemas medioambientales que también se tratan en este documental. Muestra como los productos obsoletos son llevados a países no occidentales como Ghana, donde son presentados como productos de segunda mano, sin embargo, se trata de chatarra en los países desarrollados. Aunque algunos de estos objetos son aprovechados y los habitantes de Ghana llegan a arreglaros, muchos otros se acumulan y surgen vertederos que destruyen la vida de esas zonas.
A pesar de toda la gente que habla en el documental, creo que no hay un equilibrio en su tratamiento. Todas las personas que aparecen critican el fenómeno de la obsolescencia programada y nadie defiende este modelo, aunque esta claro que se aplica. Si todos están en contra, ¿por qué se permite? En mi opinión, el documental debería dar voz a empresas o instituciones que produzcan programando la obsolescencia de sus productos, ya que son ellas las que tienen que evitar que esto siga adelante.

Después de la reflexión del documental,sabemos que la obsolescencia programada consiste en la planificación del fin de la vida útil de un producto o servicio.
Pero esto empezó a cambiar en los años 50, la obsolescencia programada dio un giro con el nuevo propósito de seducir al consumidor. Apareció un nuevo concepto de obsolescencia programada: “el deseo del consumidor de poseer algo un poco más nuevo, un poco antes de lo necesario” Brooks Stevens.
Y aquí es donde está la importancia el papel del marketing y la publicidad. Ya que no se trataba de obligar al consumidor a cambiar de tecnologías, sino de seducirlo para que lo hiciera con nuevos diseños o innovaciones.

Para motivar al consumidor el marketing y la publicidad tienen que conocer las características del mismo, por diferentes motivos:

En primer lugar para diseñar los productos, hay una frase que retrata a la perfección este punto “fabrica lo que la gente quiere comprar, no trates simplemente de vender lo que fabricas”, es decir que los productos se crean para satisfacer necesidades específicas previamente estudiadas.

En segundo lugar se refiere a que la publicidad debe comunicar ciertas ventajas que hagan más atractivo el producto o servicio a ojos del consumidor.

El tercer aspecto se refiere a la segmentación, es decir a que parte o sección de la población tiene que ir dirigida la campaña publicitaria.

Concluyendo,dicho lo anterior podemos ver las relaciones del marketing y del programa de obsolescencia.Donde
la obsolescencia programada sostiene la sociedad de consumo, ya que esta obliga al consumidor a comprar objetos con más asiduidad porque estos están creados para romperse en un periodo de tiempo determinado.Y marketing y la publicidad se dedican a provocar deseo a las personas para que estas consuman aunque no las necesiten.

La función que el marketing debe ejercer sobre la obsolescencia programada en los productos, en mi opinión, es la siguiente:

El marketing debe lograr captar la atención del cliente de tal manera que, aun tratándose de un producto con una vida útil ilimitada , el consumidor siempre tenga un deseo de adquisición de un producto de la misma marca pero de un modelo más avanzado. El marketing debe marcar cuál será la tendencia en un preciso momento y encargarse de que el consumidor quiera estar constantemente «a la moda». Véase el caso de Mercedes Benz con su modelo Mercedes Benz SL Roadster:

Vemos claramente que, a lo largo de los años, se ha desarrollado un mismo producto que, a nivel de piezas técnicas, es muy similar pero que, estéticamente, ha ido evolucionando y creando nuevos estereotipos con el fin de que el consumidor siempre quiera estar al día y nunca queda anticuado.

En mi opinión, ya somos capaces de producir bienes que no se degraden hasta el punto de limitar su funcionalidad o con una vida útil definida. Baso este pensamiento en la existencia de objetos creados por el hombre que son capaces de soportar durante largos periodos situaciones mucho más extremas de la que los objetos se encuentran en el uso diario. Incluso con la necesidad de cierto mantenimiento, no es necesaria la existencia de ninguna fecha determinada donde se pueda suponer que el bien dejará de poder ser considerado como útil o efectivo.

Sin embargo, especialmente en elementos electrónicos, somos capaces de apreciar el poco tiempo que éstos permanecen con nosotros antes de ser considerados inservibles. Además de deberse esto último, en la mayoría de las circunstancias, a fallos en elementos clave del mismo, en un periodo de tiempo siempre parecido y con unos costes de reparación elevados.

Si consideráramos el precio de comprar como reemplazo la pantalla, la batería y todos los elementos de un Smartphone de última generación, en una tienda oficial del fabricante, el precio puede incluso superar al de venta.

Esto se puede deber a que el fabricante conoce qué elementos van a degradarse y cuándo, pudiendo ver negocio no sólo en la venta del producto, sino de sus recambios.

Por esto, yo creo que la obsolescencia programada no sólo ha cambiado la visión que teníamos de los bienes, que han pasado de ser algo duradero a lo que tenerle cierto apego emocional a algo que sabemos que tarde o temprano tendremos que olvidar, sino que ha permitido a las empresas acceder a un nuevo nicho de mercado, que hasta ahora no se creía que pudiera ser rentable y que simplemente consistía en un servicio post-venta de calidad.

Por tanto, el Marketing debería tener estos cambios en cuenta y adaptarse a ellos, buscando optimizar su función y su eficacia dentro del mmercado.

El Planeación estratégica es muy importante para cada empresa porque Es un proceso que consiste en determinar cursos alternativos de acción los cuales sirven de base a las organizaciones para el logro de los objetivos a corto, mediano y largo plazo.
Es un proceso organizacional de desarrollo y análisis de la misión y la visión, de las metas y tácticas generales, y de asignación de recursos.
Cuándo se desarrollan planes estratégicos, los administradores deben tomar en cuenta un enfoque que abarque a toda la organización. Su propósito general es enfrentar eficazmente las oportunidades y amenazas del entorno a partir de las fortalezas y debilidades de la organización.
La planeacion estratégica de marketing es un proceso de 5 pasos que consiste en realizar un análisis de situación, trazar los objetivo de marketing, determinar el posicionamiento y ventaja diferencial, seleccionar el mercado meta y medir la demanda de mercado, diseñar una mezcla de marketing estratégico.
En primer aspecto de la planeacion estratégica vemos que lo primero que realizar es un análisis de la situación para determinar que resultado han dado las estrategias pasada y que podemos esperar en el futuro, esto le facilita a los ejecutivo revisar los planes anteriores y diseñar planes nuevo si es necesario para el logro de los objetivos. En el análisis de la situación se toman en cuenta los factores externos y los recursos internos no relacionado con el marketing que rodea el programa, este aspecto del análisis de situación es muy importante porque constituye el fundamento de las decisiones de plantación.
El segundo aspecto es la fijación de los objetivos de marketing:
Estos deben guardar una estrecha relación con las metas y estrategia globales de la compañía.
El tercer aspecto es el posicionamiento y la ventajas diferenciar: estos son dos decisiones complementaria, ya que una empresa necesita crear una imagen para su producto en la mente de los consumidores, esto lo podemos lograr a través del posicionamiento, ya que el posicionamiento designa la imagen de un producto con relación a otro que compite directamente con el. Una vez que el producto este posicionado es necesario buscar una ventaja diferencial, es decir características que el publico considera son conveniente, distintas de la competencia.
El cuarto paso de la planeación estratégica es seleccionar el mercado meta y la medición de la demanda, el mercado se componen por persona con necesidades que satisfacer dinero para gastarlo y además de esto las disposición de gastar. Los mercados se seleccionan tomando en cuenta las oportunidades, estas oportunidades las podemos analizar realizando un pronóstico de venta para determinar el atractivo del mercado y así saber si vale la pena cultivar este mercado o buscar otro.
Por ultimo tenemos la mezcla de marketing, en este aspecto tomamos en cuentas los que llamamos las 4P de marketing, donde se toman en cuenta el producto, el precio, las distribución y por ultimo la promoción. Estos cuatros elemento deberán satisfacer las necesidades de los consumidores y por consiguiente cumplir con los objetivos de marketing.
Y sobre la ciclo de vida del product es un concepto de gran importancia en el proceso de comercialización del producto, por cuanto el comportamiento del mercado, la situación del entorno y la competencia cambian a lo largo del tiempo en el que el producto se comercializa. Estos cambios condicionan el diseño y afectan al desarrollo de la estrategia de marketing.
Todo producto tiene una evolución biológica que se concreta en una serie de etapas secuénciales. El ciclo de vida del producto es el proceso cronológico que transcurre desde el nacimiento o lanzamiento del producto al mercado hasta su muerte o desaparición.
Las etapas de ciclo de vida se clasifican en las 4 siguientes: introducción, crecimiento, madurez y declive. Algunos autores, no obstante, distinguen en esta última etapa una primera fase de saturación, seguida de otra de decadencia, previa a la desaparición del producto.
El concepto del ciclo de vida del producto puede aplicarse a una clase de producto (televisor), a una forma particular del producto (televisor en color) o a una marca en concreto. El ciclo de vida de una clase de producto es el más largo, mientras que el de una marca es el más corto.
Lo que caracteriza al ciclo de vida es la evolución de las ventas y de los beneficios, crecientes al principio, para disminuir posteriormente de forma progresiva.
La duración de las fases del ciclo de vida no es estable. El proceso de adopción, que marca la pauta de las primeras fases del ciclo de vida del producto, puede verse alterado por la aparición de nuevos productos alternativos, los hábitos de los consumidores y las estrategias de marketing seguidas por las empresas que compiten en el mercado. Además, se ha comprobado que el comportamiento de las ventas de las innovaciones más recientes muestra un progresivo acortamiento de la duración del ciclo de vida, especialmente de las fases de introducción y crecimiento del producto.

En esta sociedad del consumo cada vez más competitiva a los productores les interesa que los productos que ofrecen tengan una vida útil corta, para que el consumidor tenga que sustituirlos con más frecuencia. Algunas empresas diseñan sus productos para que duren poco, es lo que se conoce como obsolescencia programada. Esto tiene unas consecuencias éticas ya que al generar productos con poca vida útil también se generan más residuos, lo que aumenta la contaminación del planeta.
Desde mi punto de vista los oferentes deberían diseñar productos con la vida útil normal que deban tener y potenciar el marketing para aumentar el consumo, diferenciándose de sus competidores y haciendo que el consumidor sustituya los productos por unos más innovadores y de calidad. Por otra parte una iniciativa podría ser que fomentasen un marketing enfocado al reciclaje, en los que se puedan aprovechar los productos que ya ha acabado su vida útil para los nuevos. Hoy en día mucha gente busca que el producto que compra también sea bueno para la sociedad y el medio ambiente, así que pienso que en algunos sectores podría funcionar bien

La obsolencencia programada tiene dos esferas, una positiva y otra negativa.

En la esfera positiva podríamos decir que nos encontramos con que es un instrumento quee sirve para activar la economía. La obsolescencia programada lo que hace es que compremos algo que va a durar un determinado periodo de tiempo, más bien corto. En consecuencia, se activa el consumismo en el sentido de que cada vez que se rompe, compramos de nuevo el producto. Por lo tanto, nos encontramos con que la economía fluye rápidamente, compramos un producto, lo tiramos y lo volvemos a comprar.

La esfera negativa sería que los productos que adquirimos no duran tanto como los de antaño. La obsolencencia programada preestablece que el producto que compramos se va a romper en un determinado momento. Aunque también puede que sea porque la tecnología avanza, lo que hace los productos más sofisticados y más sensibles a los daños. Como es el caso de el coche, antes duraban 20 años fácilmente, pero hoy en día, como mucho duran 10 años, también debido a que tienen más accesorios y son cada vez más eléctricos.

En conclusión, la obsolescencia programa, desde el punto de vista del consumidor es un incesante gasto que se podría evitar, pero desde la visión del mercado es una manera de mantenerlo a flote. Lo curioso es que parte de la culpa es nuestra, de los consumidores, ya que somos los primeros que compramos los productos más baratos, pese a saber que probablemente sean los que antes se rompan, en vez de comprar un producto más caro, que normalmente implica una mayor calidad.

La obsolescencia programada fue una herramienta muy útil para los mercados cuando se quería reactivar la economía, ya que permitió que las ventas se mantuvieran altas, porque los productos que se compraban tenían que ser rápidamente sustituidos por otros nuevos. Sin embargo, ¿es esto ético en una época de abundancia? Para mi, la respuesta es no.
Ahora vivimos en un mundo con recursos cada vez más escasos, que además se corrompen a causa de la contaminación del planeta, y la obsolescencia programada sólo genera más residuos a mayor velocidad, con consecuencias como las que vimos en el vertedero en el que se ha transformado Ghana, o en las islas de plástico que flotan en los océanos.
Pero claro, la economía en la que vivimos se basa en que el consumidor compre compulsivamente para que siga creciendo, y el marketing se centra en atraer al consumidor para que compre, como aparece en el vídeo, «algo un poco más nuevo, un poco antes de lo necesario», favoreciendo además a las empresas, que pueden ahorrar en costes produciendo con materiales de peor calidad.
En mi opinión, el marketing se debería centrar, además de en mantener el ciclo económico activo, en promover políticas de reciclaje y reutilización más responsables con el medio ambiente, concienciando a la gente de lo necesario que es cuidar del planeta, para nosotros y para las futuras generaciones.

Es curioso como la obsolescencia programada lleva a mas obsolescencia programada; al fin de al cabo, cual es es sentido de tener una bombilla que te dura 100 años si tu lampara solo dura 4?

obsolescencia o adolescencia? ser o no ser? preguntas trascendentes así como intrigantes, apasionantes, indefinidas ¿que seía el ser humano sin preguntarnos cosas que no podemos resolver? un pez cobarde tiene agallas? si pedimos un préstamo para comprar un vertedero, nos están dando una hipoteca basura? si ahora coge el papa un globo? se nos esta yendo el santo al cielo? un bombero que no nos responde puede dejarnos en ascuas? si te ligas a la lotera significa que te ha tocado el bote? todas estas preguntas que somos incapaces de resolver, misterios de la vida imposibles de descifrar al igual que la obsolescencia programada. Dejará de serlo algún día? no lo sabemos sólo el tiempo y las fuerzas insondables del destino lo harán.

La obsolescencia programada es fundamental para que muchas empresas puedan mantener sus beneficios sin tener que desarrollar nuevos productos.

Supongamos que una empresa crea un producto sin limite de vida, por ejemplo una bombilla que dura toda la vida, la empresa vendería muchas bombillas a un precio elevado, obtendría muchos beneficios en un corto plazo de tiempo, pero poco a poco iría disminuyendo sus beneficios debido a que la mayoría de los consumidores habrían adquirido la bombilla y ninguno necesitaría comprar otra bombilla. Por este simple hecho las empresas investigan y desarrollan productos con vida finita para asegurarse de que los consumidores tengan que volver a comprar el mismo producto o parecido que beneficie a la empresa.

¿la obsolescencia programada a quien beneficia y a quien perjudica?

Los consumidores nos sentimos perjudicados, ya que los productos tienen una fecha limite, y por regla general, cada vez más corta. ¿ y eso a que se debe? A la existencia de otro sujeto, el cual se beneficia de la obsolescencia programada, que son las empresas. Estás realizan en sus propias empresas productos con una vida útil que tendrá un fin, de modo que, las empresas cumplen con la regla » tirar, comprar, tirar», por tanto las empresas seguirán produciendo y los consumidores seguirán consumiendo. ¿Es ético, se aprovechan las empresas…? Estaremos en favor o en contra, según nos encontremos en la posición empresarial o en la posición del consumidor. Pero la verdad, que la obsolescencia programada le dan trabajo a gran cantidad de empresas, lo cual es beneficioso para nuestra economía.

En mi opinión la obsolescencia programada es indignante pero a la vez necesaria.

Casi todos los productos que compramos en la actualidad están hechos para que dejen de funcionar pasado un determinado tiempo. Las empresas, con la tecnología de hoy en día, podrían elaborar productos mucho mas duraderos y perfeccionados. Un claro ejemplo de esta realidad podría ser la bombilla que lleva funcionando más de 100 años.

Si nos ponemos en la piel de los empresarios, vender productos con fecha de caducidad es necesario. Si tienes una empresa de teléfonos móviles vas a vender muchos teléfonos si duran 2 años que si durasen 20. Por lo tanto para mantener un nivel de ventas constantes veo lógica la utilización por las empresas de la obsolescencia.

Los oferentes de productos están incurriendo en actuaciones poco éticas para abaratar costes e intentar mantener un flujo de ventas constante. Si se prohibiese legalmente la obsolescencia programada los mercados de productos sufrirían demasiados cambios en muy poco tiempo y esto no favorece a nadie. Así que habrá que asumir esta realidad y aprender a convivir con ella, como ya lo llevamos haciendo desde hace muchos años.

El termino de obsolescencia programada se usa para poder definir la vida útil de los productos que hoy en día se comercializan. Pero este es un tema polémico a tratar debido a que muchos consumidores se quejan de la poca durabilidad de productos de gran importancia que usamos diariamente. Como todo el mundo sabe, la gran polémica de la actualidad es la poca durabilidad que nos proporcionan los dispositivos móviles y los electrodomésticos.

La obsolescencia programada suele beneficiar al fabricante. Un claro ejemplo, es la empresa americana Apple, cuyos productos son de alta calidad y han conseguido que sus dispositivos entren en el entorno de la moda. En este caso, la gente se quejaba de los antiguos iPod’s y actualmente de los iPhone’s, de que su batería es muy poco duradera a la larga y debido a la fragilidad de sus dispositivos, la vida útil de dichos dispositivos no es que sea muy larga. Pero el problema viene en que si dicho dispositivo se rompe, el mismo usuario podría ir a comprar otro iPod u otro iPhone, debido a su calidad, pero aun así el consumidor sabe que su vida útil no es muy duradera.

Este campo entra en una gran diversidad de productos. Como ya hemos nombrado anteriormente, dispositivos móviles, reproductores de MP3 y MP4, electrodomésticos y también en diversos medicamentos, y muchos mas productos. En primer lugar, en los dispositivos móviles, tabletas y/o ordenadores son los principales afectados en la obsolescencia programada, ya que hoy en día, las grandes marcas y grandes empresas hacen que sus productos tengan una durabilidad menor que antiguamente y sus posibles reparaciones pueden ser costosas.

En segundo lugar, nos encontramos con los electrodomésticos, ya sean lavadoras, lavaplatos y demás. La polémica es similar a la de los dispositivos móviles, cuya durabilidad y vida útil a sido reducida en estos productos durante estos últimos años. El mejor ejemplo es comparar dichos electrodomésticos con los de nuestros abuelos. Gente que ha tenido una lavadora durante 10 años sin problemas, y hoy en día, gente que ha tenido una lavadora durante 5 años con varias reparaciones detrás.

En conclusión, la obsolescencia programada puede ser un grave problema, debido al posible descontento del consumidor, ya que este sabe que el empresario quiere obtener siempre el mayor beneficio neto posible y gracias a la obsolescencia lo podría conseguir, pero éticamente no es correcto y la gente se puede sentir engañada. Por lo tanto, se debería reducir dicha practica, ya que lo que el publico quiere hoy en día son productos duraderos y de calidad, y sobretodo usar menos la tendencia de usar y tirar en productos de alto coste económico.

La obsolescencia programada es la vida útil programada por los fabricantes de los productos para que los clientes compren de una forma periódica.

Bajo mi punto de vista, programar cuando un producto va a dejar de funcionar va en contra de la ética empresarial. Con esto se pretende vender más a largo plazo. Un ejemplo muy claro es el caso de los iPhone, que sacan actualizaciones más potentes para que los dispositivos más antiguos pierdan potencia y funcionen más lentos actualización tras actualización. A continuación, adjunto un video de una parodia de cómo la mayoría de gente nos comportamos:

Aunque por una parte, la obsolescencia programada crea más empleo y valor añadido, en mi opinión, debería ser eliminada ya que impide la satisfacción de los compradores y creo que esto a largo plazo será también perjudicial para las marcas. Creo que se debería innovar más para hacer más atractivo el producto y no hacer que dure menos para que se tenga que reemplazar.

Bajo mi punto de vista la obsolescencia programada es una de las formas que tiene las empresas para no parar de producir sus productos. Si lo analizamos desde el punto de vista del consumidor la obsolescencia programada puede ser un abuso para las personas ya que obligan a consumir un producto que realmente puede hacer aun su función pero que el solo se autodestruye, a mi ver esto no es ético debido a que el consumidor quieren que sus productos sean duraderos y más si son de alto coste. También pienso que la sociedad hace más fuerte esta obsolescencia programada ya que existen modas que hacen que el consumismo se dispare. Por ejemplo, Apple ha creado una necesidad en algunas personas y a través de anuncios nos hacen demandar sus productos. Estos productos son un claro ejemplo de la obsolescencia programada, la que por ejemplo la batería se va degradando a medida que pasa el tiempo o siempre hay una nueva actualización por el cual en ocasiones hace que los productos que tienen más tiempo , funcionen peor. Otro ejemplo claro de la obsolescencia programada, se puede ver en los electrodomésticos ya que hoy en día sus horas de vidas están programas. En conclusión mi opinión sobre este tema es que la obsolescencia programada es una forma de que el consumo no baje. Puede tener un efecto positivo en la sociedad en la creación de empleo, pero en el entorno del consumidor sabiendo sus consecuencias puede producir un malestar en los consumidores cuando adquieren dichos productos.

La obsolescencia programada consiste en la premeditación de la vida de un producto, es decir el cálculo con anterioridad de la fecha de caducidad de un artículo.
Cuando un producto sufre los efectos de la obsolescencia programada entra en acción el papel del marketing.

Gracias a las técnicas del marketing, se impulsa a los consumidores a comprar nuevos productos para satisfacer aquella necesidad que ya no está cubierta por el artículo obsoleto. Creando a los consumidores cierta insatisfacción, ofreciéndoles la posibilidad de adquirir un producto nuevo y así cesar esa insatisfacción. Solo con la compra de un nuevo producto, los humanos vemos cubiertas otra vez nuestras necesidades.

Es por ello, que el marketing junto a la publicidad juegan un papel crucial en la obsolescencia programada creándonos el deseo de volver a tener cubierta dicha insatisfacción.

La obsolescencia programada es un término usado para referirse al fin de la vida útil de un producto,es decir, poner fecha de caducidad a un producto.¿que pasaría si el mundo entero lo tuviera todo? Empezaría una grave tragedia para los negocios y por consiguiente un alto desempleo. La obsolescencia programada fue creada por los propios empresarios ya que sabían que si la gente en un momento dado lo tuviera todo dejarían de consumir sus productos y sería el fin para sus negocios,a raíz del propio miedo de los empresarios surgió la obsolescencia programada y con él el objetivo de dicha obsolescencia;que la economía crezca cada vez más, de ahí surgió el concepto «USAR Y TIRAR»,crearon necesidades obligando casi al consumidor a comprar cualquier producto seduciéndole mediante campañas de marketing y creando necesidades que no existían hasta ese propio momento. pero esto es algo ético? si hablamos de el mundo empresarial puede que si sea ético pero y si habláramos de todos nosotros y del planeta? la obsolescencia programada esta acabando con el propio planeta y por eso debemos encontrar alguna solución valida para estos dos mundos.los empresarios deberían tener incentivos que les conduzcan a querer que sus productos duren para siempre cobrando así al propio consumidor el coste real del producto.

Ejemplo de la obsolescencia programada:
el televisor,esta limitado en 20.000 horas de duración.

En mi opinión, la obsolescencia programada tiene dos puntos de vista, pero primero definamos que es la obsolescencia programada:

Según Wikipedia:

“Se denomina obsolescencia programada u obsolescencia planificada a la determinación o programación del fin de la vida útil de un producto o servicio, de modo que, tras un período de tiempo calculado de antemano, éste se torne obsoleto, no funcional, inútil o inservible.”

Resumiendo la definición, la obsolescencia programada quiere decir, básicamente, que los productos que nosotros compramos tienen un determinado tiempo de uso y rebasado este uso dejan de funcionar.

Desde mi punto de vista, podemos encontrar dos enfoques con respecto a este tema:

El primero enfoque, desde el punto de vista de las empresas, la obsolescencia programada resulta de lo más beneficiosa. Gracias a ella, los consumidores (en los que yo me incluyo) estamos “obligados” a tener un consumo constante de sus productos, lo cual, a las empresas no les importa, de hecho, son ellas las que fabrican sus productos con una vida útil limitada.

Ej. Las empresas de impresoras en las que tienen una vida útil de unas 10.000 copias.

El segundo enfoque, visto a través de los consumidores, es que la obsolescencia programada es un “abuso” para nosotros, ya que, estamos “obligados” a comprar, renovar o reparar (que en muchos casos sale más caro que uno nuevo) los productos que las empresas nos ofrecen. Esto supone un consumo y gasto cuasi constante en el que siempre estaremos “obligados” a realizar.

Para concluir y desde mi punto de vista, la obsolescencia programada tiene puntos positivos y puntos negativos:

Como punto positivo, la obsolescencia programada promueve el consumo, el intercambio de bienes y servicios y, por tanto, la economía.

Como punto negativo y en mi humilde opinión, la obsolescencia programada es una forma muy sutil y, salvando las distancias, de “esclavitud” para con las empresas, cada producto que adquirimos nos fuerza, en un determinado tiempo, a renovarlo o a cambiarlo por otro y eso, nos “condena” en cierto modo a depender de las empresas que nos los suministran.

La obsolescencia programada apareció en nuestra sociedad hay poco tiempo. El principio es que los clientes se ven obligados a comprar productos regulares de una marca. Es decir, comprar, tirar, comprar.
Todos vivimos en esta sociedad de consumo. De hecho personalmente cuando mi portátil murió, sé que me va a costar más que te lo arreglen que comprar uno nuevo.

El vídeo explica que hay diferentes obsolescencia programada:
– La obsolescencia mediante notificación como se ve en el video, con el hombre y su impresora.
– La obsolescencia funcional por defecto que está vinculada a la esperanza de vida de la máquina. Sabemos que un ordenador vive cerca de 5 años, por ejemplo.
– La obsolescencia por incompatibilidad en el sector informático, como teléfonos móviles u ordenadores. El uso de un teléfono y un ordenador de la misma marca, puedo decir que esta obsolescencia está muy presente con dichas actualizaciones.

Así que al principio la obsolescencia programada puede parecer una buena iniciativa. De hecho, crear tendencias del mercado, cuota de mercado, la creación de empleo y de crecimiento económico. Sin embargo pienso que esto crea muchos problemas en el largo plazo, como el calentamiento global, que va a parar este fenómeno debido a que los recursos van a ser cada vez más limitado.

La obsolescencia programada es totalmente insostenible, porque lleva consigo un consumo en masa haciendo que generemos cantidades inmensas de residuos. Si generamos más basura de la que reciclamos estamos dañando en gran medida al medio ambiente. Imaginase que los países subdesarrollados dejasen de serlo y consiguieran un nivel de industrialización del 1º mundo, sería un grave detrimento para el medio ambiente, y la Tierra se acabaría de un soplido. Pero mientras que el 3º mundo no se desarrolle y sea el estercolero del mundo todo perfecto…

Lo que deberían de hacer las empresas es tener conciencia de realizar productos para un desarrollo sostenible, no dañar el medio ambiente al fabricar el producto y que aunque apliquen la obsolescencia programada, realicen el producto con una duración sostenible en el largo plazo.

Todas las empresas deben ser sostenibles para la Tierra, cierto que perderán beneficios, pero ganaremos que nuestras generaciones futuras existan.

Como pudimos ver en el documental de comprar, tirar, comprar. La vida de ciertos productos esta programada para así poder aumentar sus ventas. Se denomina obsolescencia programada. Ponen ejemplos como el periodo de vida de las bombillas y las medias. Se lleva al extremo dichos casos para poder explicar claramente la obsolescencia programada.

Es posible que la obsolescencia programada busque la prosperidad y todo lo que ello conlleva, un aumento de puestos de trabajo, aumento de beneficios de las empresas que la realizan. Pero también tiene sus puntos negativos, como podrían ser el nivel de contaminación que se produce o el poco uso/utilidad que le puedes llegar a hacer a el producto.

En cierta manera nosotros compramos objetos que ya sabemos que su vida no será tan larga como la de sus competidoras, ya que muchas veces compramos barato sin importarnos la calidad de lo que compramos. Podríamos poner el ejemplo de los ordenadores portátiles, un ordenador de gama baja es posible que su durabilidad ronde el año de uso. Mientras que un ordenador de gama alta su vida sea mucho mas prolongada. Y muchas veces aun sabiendolo compramos el producto que sabemos que no tiene tanta fiabilidad o durabilidad como el de su competidora.

Por lo tanto me gustaría acabar el comentario realizando la siguiente pregunta, ¿La obsolescencia programada nos la imponen o la escogemos?.

Claro que todo era mucho más fácil cuando comprabas un televisor y te duraba 20 años, aquellos televisores que cuando perdías la señal la recuperabas milagrosamente con un zapatazo.

Ahora, eso sí, una lista cerrada de canales, la imposibilidad de conectarse a internet y así poder videos de Youtube en la pantalla gigante de tu salón. Esos televisores no tenían la posibilidad de poder ver películas en 3D, ni la posibilidad de ver la televisión en alta definición. Claro que duraban más, pero a todos nos gusta tener una mejor calidad de imagen cuando pasas horas frente al televisor.

Estos avances hacen que las cosas se rompan antes por su uso, al contrario de lo que pasaba hace 30 años. En parte creo que es cierto que las cosas se rompen por la decisión de aquéllos que las inventan y las comercializan, pero ¿sería rentable que un móvil te durara 30 años? A parte del hecho de que nuestra sociedad se destaca por la búsqueda de avances y mejores resultados, por lo que se quedarían las cosas obsoletas, creo que no sólo hay que ver la obsolescencia programada desde el punto de vista de nuestros bolsillos sino que hay que verla también como un factor que ayuda al impulso económico haciendo que familias enteras consigan puestos de trabajo en estas grandes corporaciones. Por lo que no sería rentable que un móvil te durara 30 años.

Por cosas así, no puedo estar del todo en contra de la obsolescencia programada ya que, en mi opinión, hace que la economía mundial progrese.

El documental trata sobre la obsolescencia programada como bien dice el título, que es “la planificación del fin de la vida útil de un producto o servicio de modo que este se torne obsoleto, no funcional, inútil o inservible tras un período de tiempo calculado de antemano, por el fabricante o empresa de servicios, durante la fase de diseño de dicho producto o servicio”. Éste es un término rodeado de polémica y existen dos opiniones. En primer lugar, están los que opinan, ya que es una filosofía que maximiza los beneficios de las empresas al máximo, que es una gran estafa al consumidor. Por otro lado, están los que piensan que es modo más eficaz para que el consumo nunca pare y las empresas nunca dejen de vender, quizá el consumidor compre más veces el producto, pero lo compra a un precio inferior.
En el video se recalcaban dos productos que podrían servir de ejemplos de obsolescencia programada. El documental comienza con un chico que está buscando alguna solución para arreglar su impresora ya que ha tenido un problema y no le funciona, le había avisado de que tras 5000 impresiones no funcionaba más, y en internet le advertían de que era más barato comprarse otra impresora que reparar la suya. Posteriormente se trata el caso de la bombilla , una bombilla que se compró y se encendió en 1901 y no se ha apagado hasta el día de hoy, es un claro caso de que existe tecnología e ingenieros lo suficientemente buenos como para que compremos productos y nos duren muchísimo más tiempo del que en realidad los tenemos.
En conclusión, la obsolescencia programada es una estrategia de marketing que está muy extendida y en mi opinión es beneficiosa para la sociedad, ya que se activa el consumo y por lo tanto las empresas siguen ganando dinero, hay mas trabajo, por tanto las familias pueden consumir, y así continuar con el ciclo de la economía.

La obsolescencia programada es la planificación o programación del fin de la vida útil de un producto o servicio, de modo que tras un período de tiempo calculado por el fabricante o por la empresa éste se torne obsoleto, no funcional, inútil o inservible.

El fin de la obsolescencia programada es que la sociedad compre un producto, y pasado un tiempo, lo tire y compre otro. Esto se hace en pocas palabras, para vender más. Una empresa no obtendría beneficios si vendiese productos que pueden servir al consumidor durante muchos años, por ello la obsolescencia programada beneficia a las empresas.

Sin embargo, los consumidores no estarán de acuerdo con esto. ¿Por qué deben comprar de nuevo un producto, si el anterior podría haberles servido durante mucho más tiempo del que realmente se utiliza?

En mi opinión, la obsolescencia programada, en cierto modo es buena para que las empresas puedan vender sus productos y puedan avanzar, pero tampoco deberían abusar de los consumidores, reduciendo la utilidad de sus productos a una cantidad insignificante.

Por último, las empresas deberían hacer productos más duraderos que los que vemos ahora, y aunque cobren más por ellos, se puedan utilizar durante más tiempo; porque al final, para el consumidor «lo barato sale caro».

La obsolescencia programada determina el fin de vida útil de un producto, dicho fin esta calculado por el propio fabricante. Es una manera de asegurar la producción de las empresas, pero somete a los consumidores a comprar obligatoriamente y a desear los productos para satisfacer sus necesidades, a través de campañas de publicidad y mediante estudios de marketing

Los efectos negativos de la obsolescencia programada son diversos y graves. En primer lugar,contaminan el medio ambiente y utilizan a los países del tercer mundo como lugar para tirar millones de toneladas como ordenadores, televisores, lavadoras y que probablemente la mayoría funcionen,esto conlleva a que los habitantes de esos países se vean afectados por la contaminación. Por otro lado los consumidores se ven obligados a comprar otro producto al cabo de unos años porque ha dejado de funcionar o se ha quedado obsoleto, provocando al consumidor mas ganas de comprar y el deseo de poseer.

Son pocas las ventajas de la obsolescencia programada puesto que solo se beneficia la empresa.

Un ejemplo de obsolescencia programada bajo el lema «compra,tira, compra» como ha podido verse en el vídeo son las impresoras, que se estropean y a demás si se quisiese arreglar tendría unos costes mas elevados que al comprar una nueva.

La obsolescencia programada/ planificada es la planificación o programación del fin de la vida útil de un producto o servicio, de modo tal que tras un período de tiempo calculado de antemano por el fabricante o por la empresa durante la fase de diseño de dicho producto o servicio, éste se torne obsoleto, no funcional, inútil o inservible.

En mi opinión desde el punto de vista del consumidor es una desventaja, ya que tienen que seguir comprando esos productos constantemente porque dejan de funcionar en un momento u otro. Desde el punto de vista del empresario, es positivo porque van a seguir vendiendo esos productos necesarios para los consumidores porque se estropean y tienen que comprar más, pero también es negativo ya que no es algo ético vender productos «trucados» para que no duren lo que deberían durar y conseguir así que los consumidores sigan comprando sus productos y estas empresas obtener más y más beneficios.

Pero desde mi punto de vista, la obsolescencia programada no es algo tan negativo ya que consiguen que la economía esté en continuo movimiento. Es decir, que la gente siga comprando productos y así consiguen poder mantener las empresas, a sus empleados y obtener beneficios.

El marketing debería ayudar a que el consumidor tenga toda la información posible sobre el producto que están vendiendo, y a partir de esa información decidir que producto les interesa mal, pero lo que hay que conseguir es evitar el engaño, que no se venda un producto como algo duradero cuando realmente tiene una vida útil de cinco años.

Los primeros que estamos de acuerdo con la obsolescencia programada somos los consumidores, preferimos gastarnos menos en un producto de poca duración a gastarnos más dinero en un producto de más larga duración porque no podemos saber si en diez años por ejemplo hemos cambiado nuestros gustos o intereses.

La obsolescencia programada la elegimos nosotros.

La obsolescencia programada es la programación del fin de la vida útil de un producto, es decir, las empresas determinan que tras un periodo de tiempo este se vuelva inútil.

En mi opinión, por un lado la obsolescencia programada afecta a los consumidores ya que estos deben de renovar sus productos antes de lo que en muchas ocasiones tenían previsto, pero por otro lado la obsolescencia programada es necesaria para la subsistencia de las empresas ya que si los productos durasen muchos años los consumidores no necesitarían renovarlos y por tanto dejarían de comprar a las empresas, y como consecuencia muchas empresas cerrarían.

La función del marketing es crucial ya que cubre las insatisfacciones que la obsolescencia programada nos provoca.

Desde mi punto de vista, después de ver el vídeo, para mi, el papel del marketing dentro de la obsolescencia programada es muy importante.

El papel del marketing consiste en influir a los consumidores, en orientar a las personas hacia que productos comprar. Y aunque sea poco creíble el marketing logra su objetivo.
Muchos consumidores van a tiendas a comprar productos que recientemente han salido al mercado, nuevos, caros y no se paran a pensar que tienen un producto similar en casa, con la misma función, la misma utilidad, dan el mismo resultado, lo único que les diferencia es que uno es nuevo y otro es viejo y sin embargo la vida útil del producto viejo aun no ha acabado.

Por lo tanto el marketing tiene mucha importancia en la obsolescencia programada convirtiéndola en «un ciclo vicioso» el cual lo enlazamos con el titulo de este vídeo, «Comprar, tirar, comprar».

La obsolescencia programada es lo que se le llama al acortamiento de la vida útil de los productos. Esta obsolescencia programada en los productos ha incrementado a lo largo de los años.

Es normal escuchar de los abuelos o personas mayores, al decirles que se te ha roto algo como por ejemplo una nevera, que su nevera no se ha roto en 20 años , es decir, al hablar con ellos de algún problema que hayamos podido tener con un producto que hemos comprado o un defecto del cual nos hemos dado cuenta después de su compra ellos siempre suelen decirte que a ellos eso no les pasaba que en su época los producto que compraban era de mejor calidad.

Esto es cierto, antes los productos duraban mas, pero en mi opinión esto no toda la culpa es de las empresas , la cuales quieren vender mas y aumentar sus beneficios mediante reducir las vida útil de sus productos y así conseguir que los consumidores los vuelvan a comprar mas rápido, sino somos los consumidores los culpables ya que compramos de forma compulsiva tanto si nos hace falta como si no. Por lo tanto, las empresas han querido aprovechar esta tendencia que tenemos a comprar y dejan de invertir en la calidad de los productos para invertir en mejorar la imagen del producto, hacerlo mas atractivo y también invierten en anunciar ese producto y hacerlo mas atractivo para el consumidor, que es lo que se llama marketing.

El marketing juega un papel principal en el mundo de la obsolescencia programada ya que es la forma que tienen las empresas de hacernos desear estos productos de hacer incluso que soñemos con ellos incluso sabiendo que no nos duraran demasiado, ni siquiera nos duraran lo que por su precio deberían como es el caso de los iphones que con precios de unos 700€ en algunos casos no llegan a durar ni 2 años, y aun así cuando se rompe volvemos a comprar uno nuevo.

Al margen de lo que duren las bombillas, impresoras o cualquier dispositivo electrónico; existe una segunda manera de ponerle fecha de caducidad a los productos: la dosificación calculada del progreso tecnológico.
El actual sistema que supedita todo a la obtención de beneficios favorece la introducción de progresivas pequeñas mejoras en los aparatos para producir una perpetua sensación de insatisfacción en el consumidor, que ve cómo en pocos días su dispositivo ha sido superado por otro nuevo y ligeramente mejor. Un claro ejemplo es la empresa de la manzana en sus smartphones, un año lanzan un nuevo smartphone con distinto diseño a su predecesor y muy superior en prestaciones y al año siguiente ponen a la venta el mismo teléfono con pequeñas mejoras al que añaden una «S» al nombre y crean la necesidad de adquirirlo porque es mejor.

Sobre el papel quedan importantes innovaciones pendientes que no verán la luz en el mercado hasta que les llegue su turno, en vez de ser desarrolladas y lanzadas todas a la vez, a intervalos de tiempo más polongados, pero estableciendo mejoras de más alcance. En el caso de PC’s y móviles es fácilmente visible. El consumidor no es culpable de que esto ocurra puesto que ha habido un importante esfuerzo por parte de la industria en educar así a sus clientes.

La obsolescencia programada podría considerarse como la manipulación del ciclo de vida de un producto en interés del empresario. Esto puede considerarse muy poco ético porque todas las personas deberíamos poder disfrutar de los productos que adquirimos el máximo de tiempo posible, pero esto no se ve muy rentable para las empresas.
En mi opinión el papel que debería jugar el marketing en la obsolescencia programada es el de mantener viva la obsolescencia programada. Ya que el marketing es el encargado de vendernos el producto, de crear y/o satisfacer esa necesidad que tenemos a causa de esos productos los cuales se ven afectados por la obsolescencia programada.
En definitiva, el marketing es lo que le da la vida a la obsolescencia programada, algo que en principio puede resultar muy rentable para los empresarios, pero que no es nada ético.

Muchos de nosotros nos preguntamos como es posible que el aparto que compramos hace unos meses deje de funcionar, será porque no lo cuidamos bien?
La respuesta es no, estamos ante la obsolescencia programada.
Son productos que están diseñados para fallar, es decir tienen una determinada fecha de caducidad, lo que implica que tenemos que comprar un producto nuevo.
Cuando se estropea algún aparato la mayoría de ellos acaban en la basura, porque es demasiado caro repararlos y nos aconsejan que compremos uno nuevo y más novedoso.
Esto conlleva un efecto negativo, provoca mucha contaminación.
Su efecto positivo es que fomenta empleo, sino existiera esto muchos trabajos desaparecerían.

Este es un tema que claramente llama la atención de los consumidores de a pie en general, los cuales tendemos a alarmarnos ante cualquier alteración que pensamos que puede incidir a la hora de elegir lo que adquirimos. A todos nos gusta saber lo que compramos y el por qué de esa compra. La obsolescencia programada suscita a que nos de por pensar que estamos siendo engañados de alguna manera, dirigidos hacia el consumo masivo inconscientemente. Es importante informarse del por qué de todo esto y no tomarlo como un simple intento de control mental por las grandes entidades,hace falta saber hasta qué punto reducen a conciencia las empresas la vida útil del producto. Un precio más caro por un producto más duradero es una de esas explicaciones que se han dado, ya que el consumidor no está dispuesto por lo general a realizar una inversión más cuantiosa pensando a largo plazo, para nada, tiende a pensar en el día a día y en sus necesidades diarias o semanales. A pesar de esto está claro que muchas empresas sacan tajada de ello y consiguen concienciar a las masas de que deben consumir en un periodo reducido de tiempo, eso es algo real que esta ahí fuera y que de momento es difícil de parar. Luchar contra la obsolescencia programada ahora mismo es como ser un anti sistema, por supuesto es una lucha posible a pesar de que los posibles cambios o resultado se verían probablemente en años logrando productos duraderos no tan caros, alargando las garantías etc. Pero como ya se ha dicho este es un tema enrevesado, nunca se sabe la cantidad de intereses que hay detrás de todo este dilema. Sólo espero que quien halle la solución al problema no sea enviado a «la isla».

Para mi la obsolescencia programada es una cosa que se debería eliminar por el futuro de nuestro mundo. No tenemos mucho recursos naturales así que tenemos que pensar como producir mas inteligente sin tirar todas las cosas a la basura.

Es cierto que sin la obsolescencia programada mucho gente no tendría trabajo porque esa practica de las empresas permita de producir sin parar y entonces la gente que trabaja tiene trabajo por mucho tiempo.

La obsolescencia programada u obsolescencia planificada es la determinación o programación del fin de la vida útil de un producto o servicio, de modo que, tras un período de tiempo calculado de antemano por el fabricante, éste se torne obsoleto, no funcional, inútil o inservible.

La obsolencencia programada tiene dos caras, una positiva y otra negativa.

El lado positivo es que la obsolescencia programada nos permite reactivar la economía, permitiendo que las ventas de ciertos productos permanezcan altas y asegurar a las empresas unos ingresos futuros.

La parte negativa sería que los productos que adquirimos no duran tanto como queremos. Esto tiene unas consecuencias éticas ya que al generar productos con poca vida útil también se generan más residuos, aumentando la contaminación. (vertedero Ghana)

¿Por qué no en lugar de incitar a comprar los mismos productos que ya tenemos y que se rompen, no se incita a reciclarlos y a crear nuevos productos? En mi opinión no sirve de nada incitar el consumo si nos quedamos sin recursos.

Por un lado, la obsolescencia programada puede ser explicado como cuando la producción de un producto es apenas mejorado y un poco más caro. Un otra manera para lo describe es cuando un producto no ha sido diseñado para durar.

Es entendible porqué las empresas operan la obsolescencia programada, debido a más ventas de sus producto, que puede llevar a un aumento de los ingresos. Pero existe dudas sobre los éticas sociales a este estrategia.

Aunque la mayoría de las empresas hacen acciones buenas por su ambiente social, hay tantos que ejercen la obsolescencia programada que es un coste monetario y consecuentemente un coste social también, por lo que produce la basura del mundo. Por lo tanto, hay una contradicción entre las palabras y acciones de la empresas.

Sin embargo, vivimos en una sociedad capitalista, y por eso las empresas tienen su derecha propia para maximizar sus ingresos, y si ellos consideran que la obsolescencia programada es una estrategia mas efectiva, no deberíamos oponerse.

La obsolescencia programada es una estrategia para reducir el tiempo de vida de un producto para incrementar su tasa de reemplazo y hacer una nueva compra prematuramente.
«Esta es inculcar en el comprador el deseo de poseer algo un poco más nuevo, un poco mejor y más temprano que es necesario.» (Brooks STEVENS, 1954)

Muchas alternativas están emergiendo para responder y reaccionar a la obsolescencia programada. Los intercambios entre las plataformas de usuario están organizados en torno a la reparación como el sitio Americana iFixit. En paralelo, los nuevos modelos de negocio basados en el diseño ecológico se desarrollan y etiquetas ambientales están empezando a considerar la vida del producto para informar al consumidor. Además, las iniciativas legislativas se promueven, en especial para extender la garantía de los bienes de consumo

Existe una rica literatura sobre la obsolescencia programada, que define dos tipos vinculados a las innovaciones tanto tecnológicas y comerciales:
– La obsolescencia funcional: cuando el producto ya no es utilizable por razones técnicas (no reparables o componentes conectados permanentemente, la incompatibilidad con los avances técnicos o nuevas partes)
– La obsolescencia psicológica / modo: cuando el producto no se corresponde con los deseos del usuario (nueva funcionalidad o estética a través de la colocación frecuente en el mercado de nuevos modelos)
La aceleración de los ciclos de innovación, incluida la tecnología y la masificación de los mercados de bienes de consumo desempeñan un papel fundamental en el concepto de obsolescencia programada.

Por ejemplo la marca Apple se ha distinguido por romper la innovación y una importante renovación de sus productos en los últimos años, no menos de tres versiones del iPad 2 años y seis versiones del iPhone en 5 años. Con las baterías no desmontables, la imposibilidad de actualizar el sistema operativo entre los modelos y los accesorios que cambian con cada generación, Apple ha menudo se distingue por la rápida obsolescencia de sus productos, a la imagen de iPhone 5 lanzado en septiembre de 2012.

Podemos decir que la obsolescencia programada es el fin del ciclo de vida de un producto. Este fin de ciclo esta previamente premeditado por el fabricante, por lo que generalmente la mayoría de los productos tienen asignada una determinada vida útil. En el video visto en clase podemos observar claramente como la impresora de Marcos tiene una determinada vida limitada por el fabricante (EPSON).

Para contrarrestar el problema de la obsolescencia programada el marketing debe impulsar a los consumidores a que adquieran nuevos productos para así satisfacer sus necesidades. Las empresas deberían de ser claros de explicar las características de sus productos mediante un buen marketing para que los clientes no se sientan defraudados o molestos con la marca.

Mi opinión es que la obsolescencia programada va en contra de la moral y ética de las empresas ya que una marca u empresa no puede solo presumir del margen de ventas o ingresos. La imagen que los clientes tengan de ella es lo más importante.

Un claro ejemplo de obsolescencia programada ocurrió en la empresa BlackBerry con sus desastrosos aparatos móviles los cuales no paraban de estropearse, dando a sus clientes una pésima imagen de su marca por lo que así se puede explicar los malos resultados que han tenido estos dos últimos años.

antes de todo lo siento si me exprimo mal es que no soy español

la obsolescencia programada es planificar una duración de vida a un producto para que han hecho los empresarios para incitar o obligar los clientes a comprar de forma periódica
yo creo que todos los productos están diseñados con la obsolescencia de vida como los ejemplos que hemos visto en el vídeo y los empresarios han creado este método para que no baja la demanda ,
la obsolescencia esta bien por los empresarios porque siempre los aseguran vender y no esta bien por las personas porque compran cosas que no van a durar
El marketing consiste en influir a los consumidores que productos comprar,la mayoría de las personas van a comprar cosas nuevas en tiendas y ellos tienen algo similar en casa entonces el marketing juega un grand role en la obsolescencia programada (incitar las personas a comprar nuevas cosas aun que tienen casi el mismo )

Existe una clara obsolescencia programada en el mercado. Como hemos visto en el vídeo, claros ejemplos como las bombillas, que están hechas para que duren un máximo de 1500 horas, o el caso más famoso, el de los ‘iPod’ de Apple. Otro caso que debe ser mencionado, es el de los iPhone. Apple, a partir del iPhone 5, cambió el diseño de los cargadores, consiguiendo que la gente que no tuviese los nuevos iPhone que sacaban, y fuesen incitados a renovar el móvil.

En mi opinión, la obsolescencia programada, puede ser beneficiosa para los vendedores, y muy costosa para el consumidor, ya que gracias a ésta, las empresas siguen teniendo a los clientes ‘atados’ por así decirlo, y es una forma de poder seguir obteniendo beneficios. Pero por otro lado, el de los consumidores, es algo que afecta significativamente. Pudiendo tener un producto que debería durar mucho tiempo, cada ‘x’ tiempo, algo falla, obligando de esa manera a que paguen costosas reparaciones, o en algunos casos, la compra de un nuevo producto.

En resumidas cuentas, la obsolescencia programada es una estrategia de marketing muy dura, que se basa en crear los productos con una vida útil limitada a un cierto tiempo, haciendo que el consumidor no deje de comprarlo o renovarlo, ofreciendo el continuo beneficio para el empresario.

En referencia al documental sobre la Obsolescencia programada, el cual he tenido oportunidad de ver, puedo decir que he aprendido muchas más cosas de las que ya sabía. Entre ellas, una de las que más me ha sorprendido, ha sido el hecho de que las grandes compañías se estén dedicando a aprovecharse de los pocos recursos de países africanos como Ghana, mandando allí todos los desechos generados por este concepto de Obsolescencia programada. Lo que me ha demostrado este vídeo es que la Obsolescencia programada de hoy en día es un generador de desechos e insatisfacción en los consumidores.

Juntando ideas, asocio que la Obsolescencia programada puede ser un medio muy útil para averiguar qué bienes son necesarios para los consumidores y por lo tanto cuales estarían dispuestos a pagar año tras año. Pero eso no quita que sea injusta con ellos, ya que por poner un ejemplo, a mí no me ha hecho nada de gracia que con el paso del tiempo todos los ordenadores que he tenido, hayan ido deteriorándose y me hayan hecho gastar mi tiempo y mi dinero debido a este concepto.

Desde mi perspectiva, pienso que la Obsolescencia programada se podría regular, más o menos como lo intenta Warner Philips con la producción a día de hoy de bombillas con una duración de 25 años, sustituyendo a aquellas que se tienen que cambiar cada año. Esto nos beneficia a nosotros, los consumidores; beneficia al medio ambiente y al mundo en el que vivimos; y quizás no perjudique al vendedor como se pensaba en el siglo pasado. Según Warner, lo que hizo su bisabuelo al mando de la marca Philips en relación con el cártel Phoebus, fue poco ético pero a la vez inteligente, porque logró aplicar las teorías de Obsolescencia programada, que más tarde expandiría Bernard London para tratar de reducir la recesión económica de Estados Unidos de los años 30 con el New Deal, para sacarle más centavos a cada cliente que precisase bombillas de su marca.

Y aquí adjunto un enlace web de una entrevista de «La Vanguardia» a Warner Philips, el cual me ha sido de gran utilidad, además del documental, para entender un poco más de la Obsolescencia programada.

Como hemos podido ver en el video la obsolescencia programada es la vida útil que se la da a un producto. En el documental hemos visto ejemplos como el de la impresora EPSON que tiene un chip que a partir de ciertas hojas imprimidas se bloquea y deja de funcionar o las medias de nylon que han disminuido su resistencia para que se rompan antes y para ello consumir más. U otros ejemplos como los productos de Apple que he llegado a comprar como: el iPod, el cual compré y a los 7 meses y dejo de funcionar, pero que con la garantía me pude hacer con otro que a día de hoy sigue cumpliendo sus funciones; el iPhone 3 que al cabo de año y medio se apagaba el solo cuando quería o se congelaba la pantalla sin la posibilidad de reiniciarlo y tener que esperar a que se agotase la batería; y finalmente el iPhone 4 que me sigue funcionando sin dar problemas pero que sin embargo un familiar cercano lo ha tenido que cambiar porque le daba problemas.
En cuanto a la posición del marketing pienso que se debería de tener en consideración los efectos negativos que producen a la Tierra, ya que se produce masivamente y muchas veces sin tener en cuenta las consecuencias, y como se dice en el video intentar utilizar componentes biodegradables para la producción de estos productos. Un ejemplo de ello son los teléfonos móviles que cada año sacan uno nuevo con la mejora de ciertas características que tampoco es que hagan inservible el modelo anterior.

Obsolescencia programada; ¿Problema o necesidad?

Primero que nada, decir que hoy en día el concepto de obsolescencia programada está bien arraigado en nuestra sociedad, es decir, se sabe claramente de su existencia en la mayoría de los productos. Para muchos esto es un problema y para otros una necesidad de nuestro actual sistema económico.

Por una parte podemos decir que la obsolescencia programada trae consigo algunos beneficios, desde una continua estimulación de la economía hasta grandes innovaciones, pasando por la generación de puestos de trabajo. ¿Cuál seria el motivo para comprar algo nuevo si lo que ya tengo se que durará de por vida? ¿Para que invertir en investigación y desarrollo de mi producto si no puedo asegurar unas ventas mínimas que cubran mis gastos de I+D? ¿Para que contratar más personal en mi empresa si no tengo asegurado el futuro de mis ventas? ¿Dónde quedaría el concepto de competencia? ¿Qué haríamos si no necesitásemos seguir produciendo indefinidamente, a que nos dedicaríamos?

Desde la otra cara de la moneda, la obsolescencia programada trae consigo una amplia variedad de problemas; El más destacable e importante es la generación de cantidades ingentes de restos, desechos o residuos, los cuales no son bien eliminados o destruidos y acaban tirados en algún lugar del planeta, principalmente en África

En mi opinión la obsolescencia programada es tanto necesidad como problema; pero esto podría cambiar, o por lo menos se podría intentar inclinar la balanza hacia el lado de la obsolescencia como necesidad. Una forma de reducir los problemas podría ser un servicio obligatorio, para todas las empresas, de post-venta, el cual se encargue de una correcta eliminación o incluso reutilización de los productos comerciados por la misma. Además, como ya he comentado en el primer párrafo, hoy en día prácticamente todo el mundo sabe de la existencia de la obsolescencia programada, por este motivo no sería nada raro que las empresas estuvieran obligadas a proporcionar información sobre el tiempo aproximado de vida de cada producto con un uso normal; de la misma forma que ocurre con las bombillas ( donde se nos da un número estimado de horas/luz ).

La producción en masa y la sociedad de consumo que surge en los años 50 supone una bajada de precios generalizada que repercute negativamente en los ingresos de las empresas. He aquí el motivo por el cual las empresas aplican la obsolescencia programada a sus productos, se modifica su composición determinando su vida útil, así el consumidor no acudirá una única vez a la compra del bien, sino sucesivas veces, multiplicando los ingresos de la empresa.

Esta técnica genera dos graves conflictos éticos empresariales: respecto de los consumidores y respecto del medio ambiente.
A) Respecto del consumidor, se produce un conflicto de intereses, la empresa tiene el objetivo de maximizar beneficio y puede alcanzarlo fácilmente aplicando la obsolescencia programada, en cambio, el consumidor quiere satisfacer sus deseos al menor coste posible y con un producto de calidad, de larga duración y sin desgaste.

Un ejemplo de ello es el iPod de Apple, estaba planeado que su batería durase 18 meses y fuese imposible su reparación obligando a los consumidores a una nueva adquisición

B) Respecto del medio ambiente, la obsolescencia de las empresas obliga a sus usuarios a tirar los productos que dejan de funcionar, todos estos bienes que ya no “sirven” son enviados a países subdesarrollados que utilizamos como vertederos, produciendo una mayor contaminación innecesaria, dejándoles sin paisajes naturales y destruyendo su tierra.
Un ejemplo de ello es EPSON, las impresoras que ya no funcionan en occidente son enviadas junto con otros productos inútiles a países tercermundistas, perjudicando su hábitat y espacio natural, que a largo plazo tiene perjuicios en el planeta.

El marketing seduce al consumidor y no le obliga, transmitiéndole modernidad e impulso de compra, generando así ingresos frecuentes y repetidos que mantienen un crecimiento económico permanente. Ello hace que la obsolescencia dependa del consumidor y no del vendedor, ya que es el consumidor es el que desea llevar el último modelo. Aun así, ¿Es ético que un consumidor pague por un bien roto adrede?, ¿Es ético que los ingenieros se estén convirtiendo en destructores?, ¿Es ético que se esté destruyendo el ecosistema por un aumento de ventas? Parece que en el mundo empresarial todo vale y no hay ética que valga.

Considero que la obsolescencia programada es un fenómeno que se ha dado desde antiguo tal y como pone de manifiesto el documental “Comprar, tirar, comprar”. Ejemplos de ello van desde la duración de las bombillas, pasando por el número de impresiones de las impresoras o de la duración de las baterías de los primeros iPods.

Todo ello ha fomentado que en nuestra sociedad se haya arraigado un consumo rápido, caracterizado porque lo que adquirimos hoy ya no sirve mañana, así como por un abuso de los recursos naturales. No solo cada vez son necesarios más recursos para poder producir sino que, tal y como pone de manifiesto el documental, también es un problema el depósito de todos los productos que ya no nos sirven.

Todo esto me lleva a cuestionarme, ¿tiene la obsolescencia programada las mismas manifestaciones hoy en día? Desde mi punto de vista considero que no. Es cierto que determinados productos y, sobre todo electrónicos, siguen teniendo esa “vida útil limitada”. Sin embargo ya no es tan notorio como en los casos que trata el documental puesto que esta práctica ha sido denunciada por la Unión Europea.

Teniendo en cuenta todo lo anterior creo que lo que se da ahora es lo que algunos denominan “obsolescencia por moda” o “obsolescencia deseada”. Esto implica que cada vez surgen productos con numerosas mejoras y más potentes pero, al cabo de unos meses éstos quedan atrasados pues aparecen otros más avanzados. Lo que ocurre es que sin que el producto deje de funcionar, se vuelve obsoleto en la medida que ya no satisface las necesidades del consumidor por quedar anticuado. Creo que es aquí donde más incidencia tiene el marketing por cuanto pretende satisfacer estas necesidad de estos consumidores ofreciendo productos novedosos.

La obsolescencia programada: después de ver el video se nos hace difícil imaginarnos que productos de los que disponemos no tienen este carácter. Parece ser que el avance al que podríamos haber llegado a día de hoy se ha visto posicionado en un segundo plano, mientras que exprimir los máximos beneficios a costa de los clientes se ha convertido en la prioridad de cualquier empresa, es lógico que se quiera obtener el mayor beneficio posible, pero ¿es lógico que se lleve a cabo vendiendo productos que atenten contra el fin mismo del producto?, los teléfonos móviles por ejemplo surgieron de la necesidad de comunicarnos con personas fuera de nuestro alcance, o poder llamar en caso de emergencia, por tanto la finalidad del teléfono es la comunicación, un teléfono que tras 1,5 años de uso deja de funcionar para que necesites adquirir uno nuevo atenta no solo contra la finalidad del teléfono, sino también contra el cliente, que se ve forzado a tener que comprar uno nuevo.
Por otro lado, el marketing nos enseña a vender, vender y vender y crear en nuestros clientes necesidades que quieran suplir comprando nuestros productos, pero ese vender no se debería dar engañando al consumidor mediante productos de peor calidad o de peor tecnología de los que se podrían ofrecer. ¿Como es posible que exista tecnología avanzada de la que no podamos disponer porque los directivos de las grandes empresas tecnológicas no quieran poner en venta hasta dentro de 3 modelos de ordenador o teléfono o Tablet?
Sin duda hay una línea entre la finalidad del producto y la finalidad del empresario maximizador de beneficios que corrompe y nos hace dejar de lado nuestros valores para la consecución de finalidades económicas.

La obsolescencia programada no es otra cosa que una practica habitual que consiste en limitar de fabrica la duración de los productos.
Y esto se realiza con un claro objetivo, que dejen de funcionar, para vernos obligados a comprar el mismo producto o uno similar.

Esta no es una practica exclusiva del sector de la iluminación, muchos fabricantes usan esta estrategia para conseguir que sus productos sigan vendiéndose. Los que mas, sin duda, los fabricantes de telefonía móvil. La tecnología esta llegando a un punto en el que los móviles son tan completos que la única manera de que los renovemos es cuando se rompen o estropean. Ejemplo de ello es la nueva practica de las batería no extraíbles, las cada vez mas frágiles pantallas o las actualizaciones de software obligatorias que se acaban cargando el teléfono.

No cabe duda de que la obsolescencia programada es un hecho, ¿ per está justificada?. En un mundo capitalista donde para la evolución se necesita riqueza y la riqueza la produce el consumo empieza ha estar bien visto este tipo de prácticas ya que en principio no encontramos una solución mejor que permita el sostenimiento y el desarrollo de las economías.

Este video resume muy bien el concepto, además también habla sobre la repercusión medioambiental, el verdadero problema de esta práctica.

https://www.youtube.com/watch?v=O0-swJRrBmE

Existen dos posturas en cuanto a la obsolescencia programada.
En primer lugar, el punto de vista del consumidor.
Por ejemplo, compramos un ordenador MacBook Air, al invertir en dicho producto, vamos a exigir una serie de características puesto que hemos decidido comprar concretamente ese modelo.
Una de las características que los consumidores exigen es la durabilidad de dicho ordenador, que como ya sabemos, es limitada. Esto dependerá entre otras de la calidad del producto, ya que no es lo mismo un ordenador de 300€ a uno de 1000€.
Esto no es siempre así, existen consumidores que aún teniendo utilidad, deciden renovar por diferentes causas como pueden ser los cambios tecnológicos o simplemente por deseo.
En segundo lugar el punto de vista del productor.
El productor quiere que sus productos satisfagan las necesidades del consumidor hasta cierto punto. Si los aparatos electrónicos tuviesen un ciclo de vida extenso, el consumo se frenaría y por tanto el productor dejaría de vender lo deseado.
Comprar, tirar, comprar lleva una serie de consecuencias como el impacto medioambiental, debido a que estos productos contienen sustancias y materiales químicos peligrosos que suponen grandes amenazas tanto para las personas como para el medio ambiente, a esto le sumamos que estos residuos acaban en países con poca o nula legislación sobre reciclaje o gestión de residuos, sin ningún tipo de protección.

La obsolescencia programada es un hecho hoy en día, el tiempo de vida de una gran cantidad de bienes ha disminuido al pasar de los años. Considero que, al contrario de lo que se piensa, no es necesario para la existencia de empleo, sino que se puede interpretar como una consecuencia del abaratamiento de costes de los productos. Gracias a esto, ciertos bienes que en épocas anteriores no hubieran podido ser adquiridas por los sectores con menos riqueza, hoy en día se encuentran en prácticamente cada hogar.
Un ejemplo es el televisor. Décadas atrás era impensable que este producto fuese desechado pero a su vez eran pocos los que podían poseerlo. Hoy en día el abaratamiento en su producción, la innovación tecnológica y la competencia generada por la creación de nuevas empresas ha permitido que incluso los hogares de los sectores más pobres puedan optar por tener uno.
Incluso hoy en día las reparaciones de los productos son cada vez menos frecuentes. El economista estadounidense Thomas Sowell explica en su libro «Economía Básica» que «el número de talleres de reparación de televisores en Estados Unidos no ha crecido al mismo ritmo que el número de éstos, dado que la producción masiva ha reducido sus precios hasta resultar más barato reemplazarlos que repararlos cuando tienen desperfectos.»
Otro buen ejemplo es el automóvil. En la actualidad se desechan más comúnmente y se fabrican más cantidad que en décadas anteriores, sin embargo, esto no tiene que significar algo negativo. Los países pobres salen beneficiados de esto en gran medida ya que países como Dubái y Japón les venden sus automóviles usados y desechados a precios insignificantes. El Wall Street Journal informó: «Muchas ciudades africanas están saturadas de vehículos Toyota, a pesar de que allí se vendieron muy pocos coches nuevos». Inclusive, es común encontrarse taxis Toyota en Camerún, siendo estos los coches desechados en otros países.
Los aspectos negativos de la obsolescencia programada están presentes, en especial en el tema medioambiental, sin embargo, no hay que olvidar que es solamente una causa de una acción, el abaratamiento de costes, que nos beneficia a todos.

La obsolescencia tecnológica programada también recibe el nombre de obsolescencia planificada, es la programación del fin de la vida útil de un bien, así pes, transcurrido un tiempo anteriormente premeditado por el fabricante de dicho producto, este se vuelve obsoleto, no funcional, inútil o inservible.
Encontramos su origen en el siglo XX cuando empezó a ponerse en práctica esta idea. La primera víctima de esta técnica fue la bombilla, cuando en 1881 Thomas Edison desarrolla una bombilla con una vida útil de 1.000 horas de uso. Unos años más tarde la investigación de algunos científicos alargaron su vida útil hasta las 2.500 horas de uso. Unos años más tarde se creó » el comité de las 1.000 horas» donde se obligaba a todos los fabricantes a producir con este máximo de vida útil para las bombillas. En caso de no cumplir esta condición serían sancionados.
Hoy en día el sector que recibe más quejas respecto a la obsolescencia tecnológica programada es el sector de la telefonía móvil, que ha crecido un 250% en los últimos 7 años.

La obsolescencia programada podemos decir que es una programación del fin de la vida útil de un producto.Dicho esto lo que quiero decir es que tras un periodo de tiempo que esta calculado por el fabricante o por la empresa, el producto deja de funcionar ya que no es duradero.
Cómo hemos podido ver en el vídeo de clase, la impresora de Carlos cuando llega un determinado periodo de tiempo deja de funcionar y la reparación cuesta más dinero que comprarse una impresora nueva, por lo tanto te incentiva al consumidor a comprar una nueva impresora que vale menos que la reparación.

Desde mi punto de vista considero que la obsolescencia programada es muy beneficiosa para el fabricante, dado que en algún momento el producto fallará y obligará al consumidor a tener que comprar un producto más satisfactorio, debido a que posiblemente tenga que comprar un producto mas nuevo o quizás la pieza que se le había roto para arreglar el antiguo y así podremos satisfacer nuestras necesidades.

Un ejemplo de obsolescencia programada serian: Los medicamentos contienen componentes químicos cuya vida útil es limitada, sin embargo, algunos laboratorios reducen la fecha de caducidad de los fármacos que producen con el fin de obtener mayores ganancias, esto hace que los consumidores desechen los medicamentos caducados y adquieran otros nuevos.

La obsolescencia programada fue una idea revolucionaria bajo mi punto de vista, dado que conllevo a que la economía se reactivase y siguiese funcionando en la sociedad consumista en la que vivimos.

Los principales problemas que a mi pesar tiene la obsolescencia programada son que vivimos en un mundo con recursos escasos y cada vez crecemos, por tanto significa que se crearan mas productos, por ello me pregunto ¿es ético obligar a la sociedad a que consuma? o ¿es ético corromper el mundo en el que vivimos con el simple objetivo de aumentar los beneficios de un porcentaje ínfimo de la sociedad?

En mi opinión hay productos concretos los cuales no tendrían que tener una vida útil determinada, pero el problema principal es que al ser una sociedad en constante desarrollo y a su vez una sociedad consumista que solo «quiere» o «necesita» lo mas nuevo y lo mejor para sentirse superior. Por ello el marketing debería mantener el ciclo económico estable y ser consciente del impacto medio ambiental a su vez de las futuras generaciones y el consumo que eso implicara.

La obsolescencia programada consiste en acortar intencionadamente la vida útil de los productos, de esta manera se pretende incentivar el consumo al hacerse necesario la renovación de los mismos.

La obsolescencia programada es necesaria para mantener el nivel de producción de las empresas y por lo tanto el crecimiento. El problema surge debido a los recursos limitados del planeta y la necesidad de gestionar los residuos que se crean al fabricar productos de usar y tirar, y en muchas ocasiones nadie está dispuesto a asumir el coste de su tratamiento, con lo que los residuos acaban en los países del tercer mundo, convirtiéndose estos países en vertederos sin la capacidad de gestionar adecuadamente los residuos. Este es el mayor problema originado por la obsolescencia programada.

Teniendo esto en cuenta, el consumidor debería ser responsable de lo que pase con sus productos. Además el marketing debe permitir a los consumidores elegir libremente.Para ello estos deben tener toda la información. Por ejemplo, deberían saber que productos tienen un final programado y cuales no, además del coste de eliminar los residuos de los productos. Siendo así la obsolescencia programada seria ética.

Tal y como vimos en el documental presentado en clase, la obsolescencia programada supone la programación por parte de las empresas y fabricantes a la hora de la producción, del momento en el que el producto quedará obsoleto o dejará de funcionar.

Esto promueve que se arraigue en la sociedad la rutina de «usar y tirar», lo que conlleva, como muy bien se puede ver en el documental, un gran impacto medioambiental. Por otro lado, genera una serie de necesidades ficticias en la sociedad de ir actualizandose constantemente y de tener lo nuevo, ya que los productos antiguos pueden no servir.

No obstante, esto también tiene un enfoque positivo, ya que reactiva la economía. Esto es así debido a que si los productos perecen por esta obsolescencia programada, los consumidores reclamarán nuevos productos, lo que generará actividad empresarial y puestos de trabajo.

Con este documental, conseguimos captar y descubrir la cara oculta de la mercadotecnia. Gracias a los datos obtenidos y a la información proporcionada en el video, podemos describrir la obsolescencia programada como una estrategia empresarial en la cual se programa la vida útil de un producto y cuando este dejara de funcionar o cumplir su utilidad. Es una estrategia que beneficia a los fabricantes, y los consumidores son gravemente perjudicados ya que los productos que adquieren o consumen tienen un tiempo de vida determinado en un periodo de tiempo inferior al que realmente se podría adquirir de estos productos. Para un fabricante, cuando un cliente compra un producto, como puede ser un móvil, es interesante conseguir que cuando el producto alcance un determinado tiempo de utilización, deje de funcionar, de esta forma, el consumidor se verá obligado a acudir al servicio técnico o bien, a comprar un nuevo producto.

Como vemos en el video con el caso de las impresoras, un cliente acude al servicio técnico con el fin de reparar su impresora, y allí le informan que el coste de reparar la impresora supera el coste de la compra de una impresora nueva, por lo que generalmente el fabricante consigue una nueva compra.

La obsolescencia programada, perjudica al consumidor en el aspecto económico, ya que tendrá que invertir dinero de nuevo, cuando la vida útil de su producto llegue a su fin. Este es uno de los problemas mas presentes y visibles, pero aunque no nos demos cuenta, en el video podemos descubrir el resto de desventajas y problemas que conllevan que los fabricantes pongan en movimiento esta practica. Primero, el medioambiente, que también se ve perjudicado cuando aparece la obsolescencia programada. ¿Qué ocurre con todos esos residuos y objetos que ya han finalizado su papel? Estos productos generalmente son envidos a países tercermundistas como Ghana, en los que están desbordados de residuos y objetos que llegan al país con el objetivo de ser reutilizados pero que realmente no sirven para ello ya que no funcionan y no es posible repararlos. Todos estos residuos son poco a poco tirados en estos países, que se convierten en verdaderos vertederos mundiales, de tamaños sorprendentes, los cuales no podemos imaginar en países occidentales.

La obsolescencia programada como habíamos dicho antes es una estrategia, una estrategia muy presente dentro de los departamentos de marketing de las empresas ya que es una forma de asegurarse futuras compras y futuros clientes, que en algún momento tendrán otra vez la necesidad de comprar el producto de nuevo. En mi opinión, bajo el punto de vista del empresario, la obsolescencia programada es beneficiosa, pero las empresas deben cumplir con una responsabilidad social corporativa, y el uso de esta estrategia en exceso, provoca graves daños al medioambiente y a la salud de las persona y por esto la imagen de la empresa podría verse perjudicada también.

Esta claro que la obsolescencia programada está muy presente en la sociedad actual y que sin ella las empresas no serian capaces de obtener beneficios.
Al programar la vida útil de un producto las empresas se aseguran que los consumidores tengan que volver a comprar el producto al cabo de un tiempo determinado.

Aunque esta práctica sea necesaria para la supervivencia de las empresas,genera tanto problemas éticos/morales como problemas legales (el caso mostrado de las baterías de los Ipods es un ejemplo)

En mi opinión lo óptimo seria encontrar un equilibrio en el que el producto genera beneficios sin vulnerar los derechos de los consumidores de adquirir bienes con unos estándares de calidad aceptables.

El vídeo que vimos en clase relacionado con la obsolescencia programada muestra como es un concepto real que apareció hace unas décadas cuando los grandes empresarios se dieron cuenta de que si la calidad de su producto era demasiado elevada, los clientes no necesitaban comprar más de una unidad.

Este hecho, perjudicaba a los beneficios de las empresas y a la producción por lo tanto también afectaba a los empleados. Por ello, se pusieron de acuerdo para rebajar la calidad de los productos.

Un ejemplo que llamó mucho la atención como mujer, fue el de las medias de nylon. En el vídeo aparece como un coche remolca a otro y están cogidos solamente por un par de medias. Hoy en día, un par de medias de marca que pueden costar entre 7-15 euros, se pueden romper mientras te las pones fácilmente,

Por este ejemplo y muchos otros, la obsolescencia programada me parece un efecto en muchos casos negativo, ya que las empresas deberían de producir de manera óptima debido a la ética empresarial.

Sin embargo, si esto no existiera, las ventas bajarían muchísimo, los clientes no necesitarían comprar más cosas porque estén estropeadas y tienen esa necesidad, si no que comprarían ante avances tecnológicos. Por tanto, muchas empresas tendrían que cerrar y los empleados se verían afectados.

Por tanto, en mi opinión, la obsolescencia programada es algo necesario en España pero creo que es algo que se puede controlar más y en muchos productos ponen un precio demasiado elevado para la calidad que tiene. Por lo que debería de estar más regulado.

Es importante empezar señalando que se entiende por obsolescencia programada . El termino obsolescencia programa puede ser entendido como el producto fabricado por una compañía cuya duración o vida útil viene predeterminada .

Podemos afirmar que existen numerosos productos que están diseñadas bajo los parámetro de la obsolescencia . El inicio de la obsolescencia lo podemos encontrar en los años 20 cuando se empiezan acortar la vida de los productos , el ejemplo claro de obsolescencia programada se encuentra en las bombillas , ya que tal y como se muestra en el documental , existe una bombilla que tiene una vida de más de 100 años. Los productos que se venden actualmente , no duran tanto como años atrás y según los expertos esto es debido a la obsolescencia programada, lo cual puede producir una reacción adversa por parte de los consumidores . Para las empresas , esta práctica hace que se estimule la demanda y que aumente la producción de bienes . Así mismo , esta práctica fomenta la creación de empleo ya que las empresas necesitan mano de obra para la producción de nuevos productos .
La obsolescencia programada la podemos poner de manifiesto en numerosos productos entre ellos en las baterías de los dispositivos móviles , la durabilidad de las baterías es muy reducida , en una gran mayoría las baterías no alcanzan los 2 años de vida.

La obsolescencia tiene como fin incentivar el consumo , y el marketing juega un papel fundamental ya que a través de él, se busca seducir al consumidor a que compre una nueva versión del producto. Así mismo , podemos señalar que el fin último que busca la obsolescencia y marketing es idéntico , puesto que ambas buscan generar una necesidad en las personas para que estas consuman a pesar de que no lo necesiten .

Llamamos obsolescencia programada a la programación del fin de la vida útil de un producto o servicio , la obsolescencia programada tiene diferentes puntos de vista , desde el consumidor y desde el productor y en ellos a la vez a favor y en contra , desde el punto de vista del consumidor es negativo ya que se le está acortando la vida de un producto sin llegar a su rendimiento final por lo que tendrá que volver a pagar uno sin haber aprovechado en tu totalidad el anterior , desde el punto de vista del productor determinar la vida útil de un producto es asegurarse unos beneficios a largo plazo ya que la gente va a estar dispuesta a seguir renovando los productos , ya que si el producto tiene las características que te hacen estar satisfecho , acabará comprándolo , en cambio como pudimos ver en el vídeo , al principio, antes de programar o planificar la vida útil de un producto , el producto era mucho más duradero y podías aprovecharlo en su totalidad , el efecto negativo para el productor fue darse cuenta de que tenía unos beneficios grandes a corto plazo y una vez la gente tuviese el producto no lo renovaría , al contrario , el efecto positivo de la obsolescencia programada es un ciclo de mercado continuo , sin ello el mercado llegaría a un punto que se estancaría , y ni productores fabricarían y ni los consumidores comprarían . Si que pienso como consumidor que en ved de obsolescencia como determinar vida útil de un producto, quizás se debería de invertir, volver a diseñar e innovar en el producto, para que en ved de comprarlo por que hayan limitado su vida útil, lo compren por sus características innovadoras, por tanto podría reducirse el numero de productos programados para su fin de vida útil y en cambio mantenerse un ciclo de mercado activo y continuo.

He visto el video y veo que en muchos comentarios se habla sobre la ética del empresario frente al consumidor, sin embargo yo quiero llamar vuestra atención hacia algo que veo mucho más importante, la ética del fabricante frente al medio ambiente.
Puesto que vivimos en una época en la que la tecnología ha cobrado el protagonismo frente a otras etapas históricas, los seres humanos de hoy en día somos incapaces de renunciar a los privilegios que nos ofrecen las nuevas tecnologías, por lo tanto es impensable que ninguno de nosotros vayamos a renunciar a ver la TV porque esta se nos haya roto. De hecho es impensable que pase más de un día sin haber repuesto esta televisión estropeada por una plenamente funcional. El empresario y/o fabricante sabe de nuestra necesidad de mantenernos informados o entretenidos, y por ello nos promete televisores de cada vez mayor calidad, pero el hecho… es que cada vez se rompen antes. ¿Pero que genera esto más allá del aumento del consumo tan deseado por el vendedor? Basura.

Millones y millones de desperdicios humanos se acumulan cada año, y en gran medida es porque aquello por lo que tanto pagamos, y en el que tantas esperanzas depositamos, se ha roto. Se ha roto, y nuestra naturaleza nos pide reponerlo por algo nuevo y mejor, aun sabiendo que ese nuevo modelo no tardara tampoco mucho en estropearse. Pero lo asumimos. Inconscientemente estamos apoyando a que esta “estafa” se siga perpetuando, y lo peor de todo, inconscientemente también estamos ayudando a menoscabar progresivamente al medio ambiente. Nuestro medio ambiente.

Si, lo cierto es que es fácil hablar de ética moral cuando el objeto de nuestra reprimenda es otro. Pero ese empresario que juzgamos tan desalmado en realidad no es peor que nosotros mismos, el solo da lo que el público le pide que dé. Y he aquí un ejemplo, hoy en día se conservan juguetes de hace más de 100 años (parece mucho, pero en realidad King Kong, que es una película que todos conocemos, se estrenó hace poco menos de un siglo), estos juguetes han sido utilizados por generaciones de niños, que generalmente solo disponían de ese juguete durante toda su infancia. Hoy en día apenas se conservan juguetes de los años 80. ¿Eso es por la obsolescencia programada? Puede. Pero la realidad es que yo de niña no me conformaba con jugar siempre con el mismo miserable y aburrido juguete, yo quería más, y aun quiero más. Este fenómeno del inconformismo se refleja bien en el ejemplo del video que compara el Ford T con el modelo de Chevrolet.
La gente no quiere necesariamente lo bueno, quiere lo nuevo.

En mi opinión, y como conclusión final, la obsolescencia programada es una actividad que reporta muchos beneficios a los productores a costa de los consumidores, pero que los consumidores permitimos (Como el ejemplo del hombre que se querella contra Apple por sus productos defectuosos, pero que vuelve a comprar productos de la misma marca a pesar de saber que estaban programados para fallar al poco tiempo), y que además supone un enorme daño colateral para el planeta.

La obsolescencia programada es un problema más grande del que creemos, ya que, las empresas se aprovechan de nuestra ignorancia para vendernos productos que se estropearán solos, al estar creados para ese fin.
Según diversos estudios, el porcentaje de electrodomésticos que se deben reemplazar en los primeros 5 años de su vida por problemas técnicos se han duplicado entre 2004 y 2012, lo cual es un dato muy alarmante.
Si la obsolencencia programada no existiera, la población no tendría que destinar tanto dinero en reemplazar sus objetos tecnológicos y el daño medioambiental sería mucho menor que el existente ahora.
Una posible solución podría ser que los consumidores exigieran mayor información a los fabricantes para poder consumir con responsabilidad. Además de demandar unas leyes más estrictas para protegerse de estos abusos.
En mi opinión, todos deberíamos poner de nuestra parte para solucionar este problema ya que, el problema medioambiental no solo es preocupante para nuestra generación sino también para las futuras generaciones.

En el documental de la obsolescencia programada nos abre los ojos de cara al consumismo, en el podemos ver donde van a parar nuestros desechos, porque los aparatos tienen un tiempo de vida limitado y cuál es el fin y los beneficiarios de la obsolescencia programada.
La obsolescencia programada es una estrategia de venta que utilizan las grandes empresas para poner fin a la vida de un producto y que de esta manera el consumidor opte por la compra de un producto nuevo antes que arreglar el suyo ya que los costes de reparación son elevados.
Por una parte la obsolescencia programada asegura el funcionamiento del comercio y da trabajo a mucha gente, especialmente a los ingenieros, diseñadores o arquitectos. Por otra parte presenta más inconvenientes que ventajas porque generan una cantidad excesiva de residuos que soportan de manera indirecta los países tercer mundistas como el caso de Ghana. También afecta a la economía del cliente, porque cada cierto tiempo el cliente debe hacer frente económicamente a una nueva compra de un determinado bien.
Desde mi punto de vista si no existirá la obsolescencia programada el comercio seguiría en funcionamiento, aunque en menor medida que en la actualidad. También se conservarían los puestos de trabajo de aquellos ingenieros o diseñadores ,que se encargan de producir los productos que por el paso del tiempo dejaran de funcionar, ya que estos también se dedicarían a la reparación de los productos.
Por último hay que destacar que la obsolescencia programada existe principalmente para que las grandes empresas consigan cada vez mayores beneficios acosta de los consumidores y esta forma de mercado es muy difícil que cambie .

La obsolescencia programada consiste en programar la vida útil de un producto a determinado tiempo o número de usos, como por ejemplo la impresora, que al hacer X número de impresiones, dejaba de funcionar. Por muy bien que cuidaras la impresora, estaba limitada de serie a X impresiones.

Desde el punto de vista de las empresas, es una manera de poder mantener su existencia, y por ese motivo se empezó a usar esta estrategia durante la crisis económica, ya que si vendiesen un producto que durase ‘toda la vida’, probablemente al principio venderían muchísimo, pero con el tiempo las ventas caerían al no tener clientes que comprasen el producto.

Desde el punto de vista del cliente (si bien es cierto que todo es una cadena y que un empleo crea otros puestos de empleo, y a la vez estos crean otros, etc.) puede resultar injusto, que pudiendo tener un producto de muy buena calidad, las empresas creen el producto de peor calidad adrede.

También depende del producto que sea, porque por ejemplo, como bien comentaste en clase, la ropa, si le vamos a dar un uso de por ejemplo dos años y luego queremos renovar el armario, pues si podemos comprar ropa no tan duradera y nos va a suponer que nos cueste más barata, entonces perfecto, pero productos electrónicos como pueda ser un electrodoméstico o un ordenador, teléfono móvil,etc. ¿por qué tiene que ‘estropearse’ de un día para otro sin motivo aparente? Además suele ser nada más se acaba la garantía.
En el caso de los productos electrónicos ahora además ni siquiera tienen que programar la vida útil del producto en fábrica (que también) sino mediante las actualizaciones de software, simplemente lanzan una actualización que tu producto no la soporta o que hace que el aparato vaya más lento, y de esta forma ya queda obsoleto.

Para finalizar, en mi opinión, creo que debería haber obsolescencia programada solo en caso de que el coste de fabricación vaya a ser menor, dando así opción a que los clientes compren el producto barato y no duradero, o el caro y duradero.
En caso contrario, entiendo los motivos de la obsolescencia programada, pero creo que las empresas deberían fomentar el consumo mediante el marketing y publicidad, sacando nuevos productos que haga que deseemos adquirirlos sustituyendo al que tenemos, y no forzando la compra mediante dicha obsolescencia programada.

Me sorprendió el hecho de que muchas empresas que se anuncian como ecológicas o que reciclan sus productos se deshicieran de todo en Ghana, me he leído muchas entradas y creo que nadie habla de esto, como lo que es basura para nosotros porque las grandes empresas así nos lo hacen creer y en cambio personas que no tienen una gran preparación técnica son capaces de arreglar y dar un nuevo uso, a pesar de que fueran programados para quedar obsoletos.
Respecto a Warner Philips, pienso que se le puede considerar un referente en contra de la obsolescencia programada de la bombilla, ya que diseño una bombilla L.E.D con una duración de 25 años

La obsolescencia programada surge por un motivo muy sencillo y fácil de entender con el que vivimos nuestro día a día: “nadie quiere ver como sus bolsillos se vacían”. Debido a este pensamiento, los grandes productores de estos productos, se adaptaron a una situación frágil, en la que la rentabilidad de sus negocios estaba cayendo en picado debido a que la demanda se desplomó. Estos productos eran capaces de aguantar lo suficiente para que la oferta abordase a la demanda. Por lo tanto, se decide disminuir la vida útil de estos productos con el fin de aumentar la demanda y de esta manera evitar cualquier posible disminución de su actividad económica.
Éste concepto aborda dos aspectos contrarios: En primer lugar, tiene un aspecto positivo, y es que fomenta la actividad de mercado, mientras que el aspecto negativo tiene que ver con el hecho de que no es una práctica de buena fe vender un producto que podría ser mejor y por lo tanto, está creando unas necesidades no necesarias.

Se podría decir que la obsolescencia programada es algo «necesaria» para nuestra economía hoy en día, ya que aunque en algunos ámbitos como el textil da igual que no se estropeen demasiado los productos que mucha gente seguirá comprando; los electrodomésticos o los coches en cambio, son tipos de productos que si nunca se estropearan solo se comprarían una vez en la vida, por lo que si fueran eternos se pararían las fábricas y con ello muchos trabajadores se irían a la calle.
Dicho esto también quiero añadir que habría que encontrar un punto medio en la duración de los productos hoy en día, ya que una cosa es que no tengan que durar para siempre y otra que sean prácticamente de «usar y tirar»

La obolescencia programada es un claro ejemplo del punto de consumismo que ha llegado nuestra sociedad, ya que ciertos objetos como podrían ser bombillas, impresoras, teléfonos móviles, electrodomésticos… están fabricadas para que tengan un número limitado de usos, y no por ello tiene porque ser más barato el coste de fabricación de dichos productos sino que pueden ser incluso más caro ya que se le añaden «chips» para que estos objetos tengan un numero limitado de usos o un limite temporal, ya que por ejemplo la bombilla antigua podía durar casi eternamente con los medios que se tenían por entonces y hoy en día solo duran un periodo corto de tiempo.
Esto es debido a la sociedad tan capitalista que hemos construido basada en el consumismo extremos para el único fin de la riqueza material que estamos educados por la sociedad, por lo que los gobiernos o autoridades deberían tomar medidas sobre las empresas que fabrican estos productos, bien para que se fabriquen sin limitaciones de usos o temporales, o bien para que se informe adecuadamente al consumidor de el numero de usos que tendrá dicho objeto para así el consumidor pueda elegir según el precio que le saldría cada uso.

La obsolescencia programada vendría a ser el periodo de tiempo de vida útil que entienden las empresas que tienen sus productos.

En mi opinión, la obsolescencia programa es un elemento o característica del producto totalmente integrado en el mercado. De forma que, efectivamente existen productos en el mercado que están diseñados bajo los parámetros de la obsolescencia programada.

Desde el punto de vista del fabricante, considero totalmente normal que las empresas alteren el tiempo de utilidad de sus productos con el fin de no fracasar en sus inversiones. Eso sí, existen ciertos límites que no se deben traspasar, no se puede romper un dispositivo móvil en dos años por una cuestión del fabricante. En numerosas ocasiones, se produce un abuso desproporcionado que realizan ciertas marcas importantes del concepto obsolescencia programada, ya que únicamente pretenden aprovecharse del consumidor a través de su nombre.

Evidentemente, todo esto afecta al marketing, los consumidores no son ingenuos, en el momento que ven que su inversión en la compra de un productor se esfuma en un periodo corto de tiempo, no van a volver a comprar el mismo producto ni productos de la misma marca, ya que pierden la confianza y se sienten engañados. A pesar de esto, el marketing consigue frenar lo dicho anteriormente, volviendo a crear ilusión en la gente. Por eso, es tan importante.

Un claro ejemplo, serían las consolas y los videojuegos. Muchas compañías sacan consolas nuevas en periodos de tiempo cortos, lo que supone que en esas consolas nuevas no se puedan utilizar los juegos de la consola anterior. De forma que, tienes que volver a comprar otra vez todos los juegos que te gustan y no puedes seguir utilizando la consola antigua ya que dejan de sacar juegos nuevos de las consolas anteriores.

Consideramos obsolescencia programada a «la determinación, la planificación o programación del fin de la vida útil de un producto o servicio de modo que tras un período de tiempo calculado de antemano por el fabricante o por la empresa durante la fase de diseño del mismo».

La obsolescencia programada es un método lógico utilizado por las empresas cuyo uso da lugar al aumento de ventas en sus productos o servicios. Como contrapartida puede conllevar ciertos aspectos negativos dado que el hecho de que el producto quede inutilizado tras el transcurso de un periodo corto de tiempo desde su compra o fabricación dará lugar a que los clientes queden insatisfechos y por ello no vuelvan a adquirir productos de dichas marcas. En este caso entra el juego el marketing cuya función principal será evitar esto e incitar a los compradores o clientes a volver a adquirir productos, aprovechándose así por tanto del “nombre” que tiene la empresa productora.

Desde el punto de vista de la empresa es un método como hemos dicho lógico y necesario ya que con el conseguirán que la venta de productos no disminuya y se mantenga en su máximo, de no ser asi, los dispositivos tendrían una duración mucho mas larga y por tanto no invertiríamos tan frecuentemente en ellos. Por otro lado, desde el punto de vista del consumidor, es todo lo contrario ya que al invertir una cantidad de dinero en un producto, esperamos una respuesta en función de la calidad que sea correspondiente a su precio. Por ejemplo en el caso de Apple , como clientes no esperamos que al desembolsar cientos de euros en un teléfono, debido a la obsolescencia programada este quede inútil en un periodo inferior al debido para poder amortizar su precio pero lo cierto es que esto es así, y por ello las marcas se aprovechan de su nombre y sus técnicas de marketing para conseguir que el cliente vuelva a comprar otro de sus producto en un futuro.

A mi me parece bien que exista la obsolescencia programada, porque sin ella el consumo se pararía, lo que provocaría que desaparecieran varios puestos de trabajo.
Pero tendrían que hacer que los productos duraran más, sobretodo los más caros como la electrónica, los electrodomésticos, etc.

La obsolescencia programada es un tema que se puede abordar desde dos grandes perspectivas, la económica y la medio ambiental:
-Desde la perspectiva económica: Según defienden algunos autores es la base que sustenta nuestro sistema económico, ya sea por obsolescencia funcional, tecnológica o simplemente por obsolescencia psicológica es uno de los pilares fundamentales de nuestra economía, por lo tanto como consumidores nos están vendiendo algo que tiene una vida útil determinada pese a que seguramente podría durar mucho más, es decir, somos engañados.
El problema es que formamos parte de este consumo pero también formamos parte de su producción y probablemente una parte importante de los empleos existentes son debidos a este fenómeno.
-Desde la perspectiva medioambiental: El problema más serio viene debido a las consecuencias de la obsolescencia programada, los residuos ( en su gran mayoría muy contaminantes), la contaminación y la sobre-explotación del planeta tierra son problemas muy serios como para replantearse un modelo económico en el que se defiende la obsolescencia programada porque tierra solo hay una y es algo de lo que no estamos concienciados.
Hay miles de ejemplo de esta práctica, especialmente desarrollada en el ámbito tecnológico.
Ej: Los cables de los cargadores se demostró que podrían hacerse mucho más resistentes, pero no se hacen y se siguen rompiendo.

Desde mi punto de vista, la obsolescencia programada es la clave en un entorno capitalista y una sociedad de consumo.
La obsolescencia programada viene a ser una estrategia que utilizan las empresas productoras para limitar la vida útil de los productos con los que comercializan.
En mi opinión, estas estrategias que llevan a cabo las empresas productoras son un motor económico. El objetivo es en definitiva obligar a los consumidores a tener que comprar un bien nuevo ya que el antiguo ha dejado de funcionar. Esto va a reactivar la economía cada vez que alguien compra productos nuevos, va a generar empleo ya que los productos nuevos han de producirse, va a progresar la tecnología ya que los productos nuevos han de ser mejores y va a asegurar a las expresas ingresos en el futuro.
Estoy totalmente a favor de esta estrategia dadas las circunstancias y el tipo de sociedad en la que vivimos. Pienso que si la vida útil de los productos fuese infinita se perderían muchos empleos y muchas empresas no fabricarían los productos por que no seria rentable.
Pienso que la gente tendría una mentalidad muy diferente; si ya lo tienes todo y en perfectas condiciones, ¿que mas necesitas?, ¿para que te vas a esforzar si no vas a tener un recompensa? La gente quiere mas cosas y mejores y eso es gracias a la obsolescencia programada, crea la necesidad de tener que comprarte el ultimo y el mejor móvil, coche, televisor… y para ello vas a tener que trabajar y vas a tener que esforzarte para conseguir la cantidad de dinero suficiente para poder intercambiarlo por ese nuevo bien. Lo que quiero decir es que esta estrategia mueve la economía.
Las consecuencias de la obsolescencia son por ejemplo la contaminación, como he visto en el documentar «Comprar, tirar, comprar».

La obsolescencia programada consiste en hacer descartable lo que por su esencia no lo es. Se trata de una estafa de ciertos sectores deshonestos de la industria, sobre todo de los aparatos eléctricos, que hacen deliberadamente perecederos a los productos que podrían ser duraderos, con el objetivo de que el usuario los descarte y compre otros nuevos que también durarán un tiempo limitado, y así se pase la vida; comprando, usando y descartando.
Cada vez se renuevan con más frecuencia aparatos eléctricos o electrónicos que todavía funcionan. A menudo se cambian por avances en la tecnología y por el deseo insaciable de los consumidores de disfrutar de esa tecnología punta en cuanto aparece en el mercado. Sin embargo, los investigadores ponen de relieve que una porción cada vez más importante de grandes electrodomésticos como frigoríficos, lavadoras o secadoras, se reemplazan en los cinco años siguientes a su compra a causa de fallos técnicos.
Para evitar que esto se produzca, lo que se podría hacer es por una parte, garantizar una duración de vida mínima de los productos con el fin de volverlos más duraderos. Por ejemplo, prolongar la garantía más allá de dos años sería una medida de disuasión muy eficaz contra la obsolescencia programada y contribuiría a alargar la vida de los productos. Por otra parte, favorecer su reparación y facilitar así su reutilización, contribuyendo a llevar a cabo una economía circular respetuosa con el medio ambiente.

Se denomina obsolescencia programada a la determinación, planificación o programación del fin de la vida útil de un producto o servicio. Sin ella, el sistema capitalista no podría sostenerse.
Desde un punto de vista positivo, podemos ver la obsolescencia como un instrumento que activa la economía. Cada vez que se se nos estropea un producto, volvemos a comprarlo, volvemos a consumir. Las empresas no obtendrían tantos beneficios si vendiesen productos que puedan servir al consumidor durante muchos años. Por lo que, gracias a la obsolescencia programada nos encontramos ante una economía que va fluyendo rápidamente: comprar-tirar-comprar.

Desde un punto de vista negativo, es lógico que los consumidores critiquen este fenómeno, ya que antes los productos tenían una vida útil mucho más larga. Pero realmente, los consumidores aceptamos la obsolescencia, ya que muchas veces preferimos gastarnos menos dinero en un producto de poca duración a gastarnos más en un producto de más duración porque no podemos saber si dentro de un determinado periodo de tiempo habrán cambiado nuestros gustos.

Aunque parezca un problema simplemente económico, la obsolescencia afecta a muchos países, como Ghana, donde son llevados los objetos obsoletos. Algunos de estos objetos son aprovechados y reparados, pero muchos otros se acumulan y surgen vertederos que destruyen esas zonas y generan problemas medioambientales, como muestra el vídeo. En mi opinión, las empresas deberían producir teniendo en cuenta el desarrollo sostenible.

El marketing tiene un papel principal en la obsolescencia programada, ya que es la forma que tienen las empresas de hacernos “necesitar”, desear el producto. El marketing debe reflejar toda la información sin engañar a los consumidores ofreciendo un producto como duradero, cuando realmente tiene una vida útil limitada.

El vídeo visto en clase me ha parecido bastante interesante, aun que ya había oído hablar sobre este termino. En mi opinión la obsolescencia programada es necesaria para que la economía funcione, ya que de esta manera aumentamos el consumo. Bien es cierto que igual una bombilla, por ejemplo, no la cambiaríamos por otra así como así si sigue funcionando pero en el ámbito de la electrónica, por ejemplo, si es verdad que cambias de teléfono, o de ordenador solo porque ha salido un nuevo modelo que prácticamente es igual pero a la vista del consumidor es NUEVO, sin embargo nuestro ordenador o teléfono siguen funcionando correctamente.
Por lo tanto, pienso que aun que no existiese la obsolescencia programada continuaríamos comprando nuevos productos por el simple hecho de ser nuevos y atractivos para el consumidor.

El ejemplo de Ford muestra el éxito de la obsolescencia programada: durante 19 años vendieron autos durables y similares ; sin embargo, no pudo competir con General Motors y su nuevo modelo de venta con nuevos modelos cada años.

Yo creo que la obsolescencia programada funciona por una razón simple:

Hay mucha gente que quiere distinguirse, no ser como los otros, y creo que las empresas lo entendieron.
Tal vez por orgullo, por querer mostrar que tienen mas que los otros van a comprar el nuevo modelo y distinguirse. Hay muchos ejemplos que ilustran esa idea : por ejemplo los que conducen 4×4 en ciudades sabiendo que no tiene ninguna utilidad.

Podemos ver que los modelos se renuevan bien rápido y que coincida con el tiempo bien corto de vida de los productos. La gente se acostumbro poco a poco a ese modelo y permitió bajar los precios.
Por eso es un éxito
Sin embargo me parece una manipulación del pueblo, y vimos en el documental como destruye la planeta, con producción en exceso.
(Disculpa por las faltas)

La obsolescencia programada surge al mismo tiempo que la producción en masas y la sociedad de consumo. El problema de los productos hechos para durar menos es un patrón que empezó con la revolución industrial. Esta idea de “comprar tirar comprar” se ve reflejada en algunos productos de nuestro mercado actual, como por ejemplo, bombillas, batería de Apple, videojuegos, software.

Un producto que no se desgasta es una tragedia de la economía, como por ejemplo, el modele Ford T. Este tuvo que cambiar su estrategia y crear modelos anuales, puesto que los consumidores preferían los modelos de sus competidores por su extravagante diseño .

Otro ejemplo para reflejar la obsolescencia programada se puede percibir en la industria textil ,produciendo unas medias menos resistentes. El problema de las anteriores era que los fabricantes no iban a vender muchas de ellas por ser demasiado resistentes. Por ello bajaron su vida útil, aumentando la frecuencia de renovación de su productos.

La obsolescencia programada no pretende obligar al consumidor , sino incentivar al consumidor un deseo que le impulse a comprar el producto. Una de las funciones del Marketing y del diseño es seducir al consumidor para que desee siempre el último modelo. Algunos economistas piensas que sin la obsolescencia programada no existirían los productos, las industrias, los diseñadores etc., produciendo desempleo en nuestra sociedad.

Críticos dicen que no es compatible un crecimiento ilimitado con un planeta con recursos limitado, criticando la avaricia de los consumidores a siempre querer tener el mejor modelo. Muchos se preguntan sí es posible una economía de obsolescencia programada sin un impacto en el medio ambiente? La respuesta es no, puesto que la ética ya no cuenta en un mundo empresarial que tiene como objetivo las compras frecuentas y repetidas. Uno de los principales afectados por estas inmensas compras son los países del Tercer mundo(ej. Ghana).

Yo veo bien que todos los productos tengan un ciclo de vida, y que se tienen que estropear alguna vez, pero lo que no es normal es que te compres un móvil, supongamos que de la marca Samsung, y que en un año lo tengas que cambiar porque ya empieza a fallar la batería,etc.
Ésto lo hacen para aumentar la ventas año a año.

Desde mi punto de vista pienso que la obsolescencia programada es necesario aunque para un consumidor eso no lo sea.
La obsolescencia programa como bien dice es la vida útil de un producto, tras pasado un tiempo dicho producto se estropea y eso provoca que el consumidor vuelva a demandar uno mismo o de otro modelo distinto generando así mercado, generando así ingresos, que se convierten en unos beneficios. Desde el punto de vista de un consumidor seria bueno y maravilloso que no existiera la obsolescencia programada, pero, y la consecuencia que trae eso? Quien se ha parado a pensar?

Cuando un producto dura mucho y nunca se muere, entonces la gente no tendrá el pensamiento de ir a comprar, de demandar, de consumir, toda la renta obtenida pasara a ser ahorros y eso a unos ahorros excesivos provocando una inflación.
Sabemos que las personas tienen sus deseos y necesidades, la gente desea tener un móvil nuevo, una televisión nueva, o cualquier otro producto nuevo que ha salido al mercado. Sin darse cuenta nosotros mismos compramos los móviles nuevos aun cuando el viejo no se ha estropeado, la gente intenta seguir la moda del momento para así poder ser distintos a los otros. Con todo esto vengo a decir que parece que a la gente no le importe tanto la obsolescencia programada pero aun así cada producto viene con su garantía, la gente puede hacer uso de el perfectamente si ellos quieren.

Por último, me gustaría marcar un punto negativo:la obsolescencia trajo una consecuncia muy importante, la producción en masa. Es negativa principalmente para el medio ambiente y la contaminación. Recuerdo que en una conferencia organizada por el CEU escuché una frase similar a esta: «Para un empresario, lo mas importante son sus beneficios». Se que es un pensamiento muy egoísta pero creo que son los años de experiencia que tiene una persona en el mercado que le lleva a decir esa frase. Si hubiera solución seria lo mejor, pero es seguro que las empresas no dejaran paradas sus cadenas de producción debido a eso.

Saludos.

Por lo visto en el documental, podemos definir la obsolescencia programada como el intento por parte del fabricante de reducir el ciclo de vida de un producto para que el consumidor se vea obligado a comprar otro.

A mí como primer ejemplo de la obsolescencia programada me vienen a la cabeza los teléfonos móviles, ya que cada vez duran menos y además quedan enseguida “atrasados” debido a la rapidez con la que sacan nuevos modelos. Y da la casualidad de que estando en una compañía te “regalan” un móvil, con la condición de estar un mínimo de años de permanencia con ésta y pagando a muy pequeños plazos el móvil y casualmente siempre que esta a punto de finalizar la permanencia, el teléfono móvil empieza a tener fallos técnicos; lo mismo podemos decir de las garantías.

Puedo entender que para la supervivencia de las empresas deba haber este ciclo de vida de los productos, aunque también se podrían buscar otras alternativas y veo muy lamentable que llegando a tal avance de crear un producto duradero, que no se rompa ,tengamos que retroceder para que el producto sea menos avanzado y así el consumidor tenga que comprar otro producto de las mismas características para la empresa invierta más y obtenga mayor beneficio.

No es la primera vez que he visto este documental y sigue impresionando me. Cada vez que lo veo, es como si me quitasen una venda de los ojos.
Todos los días somos víctimas de este sistema que tiene como único fin llevarnos a desarrollar una economía basada en el consumismo y no en satisfacer las necesidades del la población.
Cualquier persona recuerda algún producto que tenemos o hemos tenido que se haya averiado y no tenga justificación razonables, por lo tanto podríamos justificar dicha avería como algo programado. A mí me viene a la cabeza la nevera que de mi abuela que ha sido la misma desde que tengo uso de razón y no a causado ningún problema; sin embargo, la nevera de mi casa (que hace tres años era la última que había en el salido al mercado) en tres años ya se le ha averiado el motor dos veces.
Pero además de hacerme pensar lo ciegos que estamos los consumidores frente a esta prácticas empresariales, también se crea en mi una sensación de empatía con los trabajadores donde se comenzaba a implantar este sistema. Entiendo que esos trabajadores estuvieran orgullosos de los avances que estaba logrando las empresas pero lo que ellos querían era simplemente conservar sus empleos.
En conclusión: existiendo las pertinentes leyes que protejan al consumidor frente a las prácticas abusivas de obsolescencia programada, veo normal que los productores fabriques sus productos con una relativa espereza de vida corta, es decir, que fabriquen las cosas para que duren pero no toda la vida.

¿ Y que tal si se les OBLIGA a las empresas a dar una fecha aproximada pero no muy lejana en fecha real a lo que duran sus productos auto-destruccionables? Ya que nos timan con sus mierdas, como mínimo SABER LA VERDAD NO ???

ej: ps3-modelo fat: En cuanto se acabe la garantía, que sepa que se jode, es decir, sepa usted que 2 años le durara pese a costar 600€.

Al menos eso lo consideraría algo justo.

Increíble lo que hacen las empresas de tecnología, que decepción. Muy buen artículo, saludos