5 Claves para entender las tendencias comunicativas en el sector de la moda

El mundo de la comunicación está evolucionando a una velocidad vertiginosa y en el sector de la moda, también se notan los efectos de los nuevos tiempos comunicativos. Cabeceras emblemáticas como Vogue, que llegan impresas al público de forma mensual, ya no son capaces de seguir el ritmo demandado por un usuario que mira su smartphone 150 veces al día.

Pasamos alrededor de tres horas diarias mirando el móvil y durante todo ese tiempo, queramos o no, estamos receptivos a los mensajes de las marcas. ¿Qué marca quiere dejar pasar esta oportunidad de contacto? ¿Qué están haciendo las marcas de moda para sacar partido a las oportunidades que ofrecen las Redes Sociales, el Big Data, etc.? Las Jornadas “Fashion time. La Publicidad de Moda” celebradas en nuestra Facultad hace unos días, nos han permitido extraer algunas respuestas que queremos compartir con vosotros.

1. La era de la Fast Fashion

La necesidad de alimentar con contenidos los nuevos soportes de comunicación cambia también la forma de presentar el producto. De esta necesidad surgieron, por ejemplo, las “colecciones cápsula”. Zara, el gran gigante de la moda, actualiza su web cada semana. Las marcas buscan siempre hacer algo innovador, diferente y en la mayor parte de los casos, en clave digital. Es la era de la Fast Fashion.

2. La moda se democratiza

Los influencers están cambiando el modelo de comunicación de moda y se han convertido en un “medio” publicitario más para las marcas. Instagram es la Red Social por excelencia para ellos y sus campañas pueden resultar hasta once veces más rentables para la marca. El éxito de los influencers supone que la moda se está democratizando

3. No todo vale

¡Ojo! No todo vale a la hora de trabajar el Marketing de Influencia. Partiendo siempre de la premisa de cuidar a la audiencia, las marcas deben elegir colaboraciones con influencers que resulten creíbles para el público y que sepan transmitir los valores de la marca. Para ello pueden recurrir a micro influencers o influencers locales, quizá tengan menos seguidores que los grandes conocidos, pero posiblemente impacten mejor y de forma más significativa con el público y el objetivo comunicativo de la marca en cuestión.

4. Redes Sociales y Big Data, aliados de las marcas de moda

Las marcas ya están aprovechando las nuevas oportunidades que ofrecen las Redes Sociales. Una de ellas consiste en preguntar directamente al público (a través de las encuestas de Instagram, por ejemplo) cómo prefieren el producto. Para las marcas se trata de preguntar y sobre todo, de saber escuchar.

En los puntos anteriores hemos hablado del Marketing de Influencia. Es vital, antes de elegir al influencer con el que trabajará la marca, analizar los objetivos de la campaña, el público al que se dirige… En toda esta labor, el Big Data va a resultar clave puesto que permite entender a los usuarios como humanos (cómo son, desde dónde publican, qué les interesa, en qué momento están más receptivos a los mensajes de las marcas, con quién se relacionan, etc.)

La técnica del web scraping permite analizar si un influencer se adapta a los objetivos de comunicación de la marca. ¿Cómo? “Escarbando”, a través de algoritmos de búsqueda, información de su perfil: qué tipo de seguidores tiene, qué comportamientos suscita en ellos, etc. Esta técnica también permite realizar acciones post-campañas que pueden incrementar hasta un 45% la rentabilidad de las mismas

 5. El reto del futuro: medir la efectividad de las acciones

El futuro de la comunicación en el mundo de la moda pasa por innovar, puesto que todo cambia muy deprisa. Los vídeos cortos, las stories, las incipientes colaboraciones de las marcas con Snapchat… son las tácticas que parece que ya se están imponiendo.

Y más allá de todo eso, para las marcas es vital analizar la rentabilidad de sus acciones comunicativas. Sabemos que el grado de sugestión de Instagram es muy alto, pero, ¿qué rentabilidad tiene el canal para las marcas? El futuro tiene que avanzar hacia la medición del impacto de las campañas.

En este camino hacia la medición de la rentabilidad nos encontraremos, tarde o temprano, con el análisis semántico. Este tipo de análisis permitirá obtener ya no sólo resultados cuantitativos (número de seguidores, número de likes, alcance…) sino también cualitativos. De esta forma, las marcas sabrán cuántos comentarios positivos y/o negativos generan sus contenidos.

Fuente de las imágenes: Pexels

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí