La jubilación desempeña un importante papel en la relación que se ha podido observar entre las personas que se encuentran en esta etapa y la aparición de deterioro cognitivo a edades más avanzadas.
Diversos estudios analizan las características de la ocupación laboral de las personas como indicador de posterior deterioro cognitivo, ya que se ha apreciado que las personas con ocupaciones manuales tienen mayor riesgo de desarrollar deterioro cognitivo frente a los que tienen ocupaciones con predominio intelectual.
¿Por qué al entrar en la etapa de la jubilación este riesgo se ve potenciado?
En este nuevo periodo las personas reducen sus actividades sociales y/o intelectuales, lo cual de forma directa conlleva a un riesgo para la salud mental, que a su vez repercute en un empeoramiento de las habilidades cognitivas.
Diferentes investigadores, nos hablan de la “jubilación activa” la cual se podría resumir en mantenernos activos, esto lo podemos hacer mediante la práctica de diferentes actividades, ya que la jubilación nos brinda de un mayor tiempo libre.
¿Por qué mantenerse ocupado es un elemento protector de la salud?
Mantenerse ocupado, es un elemento protector de salud en personas mayores, ya que sentirse útil y estar entretenidos realizando diversas tareas, permite a las personas con deterioro cognitivo leve, mantener las capacidades que se han podido ver afectadas.
¿Qué actividades podríamos realizar para evitar la progresión del deterioro cognitivo?
Lo más importante es mantener una estimulación diaria, a través de rutinas cotidianas como asearse, cocinar, pasear, fomentar las relaciones sociales y evitar el aislamiento.
Además, la jubilación, es un momento lleno de oportunidades, donde podemos realizar otras como viajar, leer libros, buscar nuevos oficios, nuevas responsabilidades que nos inciten a seguir aprendiendo, puesto que esto es vital para mantener una mente saludable.
¿Pueden las relaciones sociales ser un factor de prevención frente al deterioro Cognitivo?
Distintos estudios, han demostrado que las relaciones sociales que mantenemos están muy relacionadas con sentimientos de bienestar, autonomía, seguridad y pertenencia a un grupo, mientras que la soledad, suele ir relacionada con hostilidad, sentimientos negativos, sedentarismo y malnutrición.
Por lo que mantener una adecuada calidad y cantidad de relaciones sociales, nos va a servir para prevenir el desarrollo de patologías crónicas, como pueden ser la hipertensión, ansiedad o depresión, las cuales se encuentran íntimamente relacionadas con el deterioro cognitivo. Por lo tanto, para cuidar nuestra salud física y mental, es fundamental cuidar nuestras relaciones sociales y que mejor momento que en la época de la jubilación, ya que disponemos de más tiempo libre.
En conclusión, la jubilación, ha de verse como una vía, para mantenerse ocupados, dedicar tiempo a la gente de nuestro entorno, buscar nuevas aficiones y seguir aprendiendo, ya que el finalizar la etapa laboral, nos brinda de mucho más tiempo libre para hacer todo aquello que no hemos podido hacer antes.
Artículo realizado por Mª Angélica Andrés Vidal, alumna interna de la Cátedra DeCo.
