Comenzamos la recta final del curso y con ello los talleres de Farmacología y Farmacia Clínica correspondientes al segundo semestre, y lo hacemos con el film «Sin límites».
Un fantástico largometraje de Neil Burger que muestra a un genial Bradley Cooper como un consumidor «accidental» de un supuesto nuevo fármaco aprobado por la FDA, con el que acaba desarrollando dependencia física y psicológica. Bajo las siglas NZT su ex-cuñado Vernon Grant, (anterior traficante de drogas y teóricamente reconvertido en comercial de una importante industria farmacéutica), le inicia en el consumo de esta droga con la que “accederá al 100% de utilización de su cerebro”.
Bajo los efectos de la misma, nuestro protagonista se siente con un potencial «sin límites». A partir de entonces, todo lo que alguna vez haya visto u oído, formará parte de sus capacidades y habilidades , como por arte de magia.
Así, Eddie (Neil Burger) logra recuperar su perdida inspiración como escritor y llega a convertirse en un resolutivo, afamado y brillante empresario bajo los efectos de la droga. Los «límites», de este falso medicamento aparecen a las 24 horas de cesar su consumo, lo que envuelve al protagonista en una compleja y peligrosa trama de traficantes y violencia, poniendo en riesgo su vida y la de su pareja.
Un fantástico film que invita a reflexionar sobre las consecuencias del comercio ilegal de fármacos y nuestra responsabilidad como farmacéuticos en la detección de los mismos a través de la Farmacovigilancia.