Las alumnas Alicia Maldonado Bayo y Paula Cuesta Iturralde han escrito el siguiente el post:
PRIMERA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL
En principio la Revolución Industrial produjo un cambio radical en todos los ámbitos de la sociedad inglesa y, más tarde, del resto de las sociedades europeas, creando un nuevo modelo de vida. El desarrollo industrial y minero, el aumento de la productividad, el crecimiento de las ciudades y la mejora del comercio nacional e internacional contribuirán a un gran crecimiento demográfico debido al aumento de la natalidad y de la esperanza de vida.
LA CUARTA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL YA ESTÁ AQUÍ
Y con ella, un nuevo paisaje económico y laboral más mecanizado en el que los robots y, en general, la inteligencia artificial, están llamados a ocupar un papel cada vez más determinante en el sistema productivo. Hasta el extremo de que tres de cada cuatro empleos estarán relacionados en un futuro no muy lejano con los sistemas informáticos, la gestión de datos y la seguridad informática.
Esto muestra que la inteligencia artificial (IA) no es una tecnología más. Es un nuevo factor de producción, una mezcla de capital y trabajo, con la capacidad de elevar la tasa de crecimiento del PIB regional en un 25% en la próxima década. Las economías desarrolladas se beneficiarán más aún. Para no quedar rezagados de la competencia global tendremos que realizar inversiones estratégicas.
La inteligencia artificial requiere fuertes inversiones y, lo que a veces es más difícil que la financiación. Contar con el talento apropiado para desarrollar esos sistemas. Por eso, aún son muchas las empresas que no pueden seguir la recomendación del gestor de Schroders y tienen que recurrir a soluciones externas.
Una investigación de Accenture estima que la inteligencia artificial podría duplicar las tasas anuales de crecimiento económico en muchos países desarrollados para 2035. Estados Unidos sería el más favorecido, pasando de un crecimiento potencial del PIB del 2,6% al 4,6%. Otra conclusión del informe es que las tecnologías relacionadas con los sistemas cognitivos aumentarán la productividad laboral en hasta un 40%.
Sin embargo, el advenimiento de la inteligencia artificial va a tener un impacto negativo sobre el mercado laboral. Uno de los estudios más completos en este sentido es el realizado por dos profesores de Oxford, Benedikt Frey y Michael Osborne. Según el cual el 47% de los puestos de trabajo en EE. UU. corren el riesgo de ser sustituidos por máquinas.