La Hipertensión arterial es actualmente la primera causa de morbimortalidad modificable. Esta enfermedad, que afecta a entre un 30-45% de la población mundial, se caracteriza por la presencia de cifras tensionales superiores a 140 y 90 mmHg de presión arterial sistólica y/o diastólica respectivamente.
El aumento de las cifras tensionales se considera un factor de riesgo cardiovascular que, como tal, aumenta el riesgo de presentar un evento cardiovascular (enfermedad cerebrovascular, cardiopatía isquémica…).
¿Cuáles son los principales riesgos?
El Doctor José Antonio Costa, profesor de Medicina y miembro de la Cátedra DeCo para el estudio del Deterioro Cognitivo MICOF – CEU, nos recuerda que “La hipertensión arterial favorece la aparición de la arteriosclerosis, generando daño en la pared de los vasos arteriales de grande y mediano calibre, y favoreciendo la aparición de placas de ateroma en la luz de estas arterias que, bien cuando crecen hasta ocluir de forma considerable la luz arterial, bien cuando se daña su superficie precipitando la aparición de un trombo, son responsables de la aparición de acontecimientos como el ictus isquémico, la angina de pecho o el infarto agudo de miocardio entre otros”.
En otras ocasiones, según ha explicado el experto, el daño perjudica a arterias de pequeño calibre lo que afecta a la perfusión íntima de órganos como el riñón o el cerebro, “pudiendo ocasionar insuficiencia renal crónica o accidentes isquémicos transitorios, siendo también un factor de riesgo para la aparición de demencia”.
Precisamente, en este vídeo, el profesor Costa aborda la relación entre Hipertensión arterial y Deterioro cognitivo, e indica cómo esta enfermedad en la edad media de la vida potencia el riesgo de presentar demencia en etapas más avanzadas.
Junto a los riesgos anteriores, el experto ha destacado que las cifras tensionales elevadas pueden producir además hipertrofia del corazón, “lo que puede terminar ocasionando insuficiencia cardíaca, si fallan los mecanismos de compensación necesarios para vencer dicho aumento de las cifras tensionales”.
«Apostar por un estilo de vida saludable, es fundamental para prevenir la hipertensión arterial»
Reducir el exceso de sal en la dieta, realizar ejercicio de intensidad moderada-alta durante 30 minutos al día y 5 días por semana, mantener un peso adecuado y seguir la Dieta Mediterránea, son algunos de los consejos del experto para mantener la Hipertensión a raya.
Una vez la enfermedad ha debutado “una parte muy importante del tratamiento, además de la puesta en práctica de las medidas de estilo de vida saludable comentadas, es el uso de fármacos antihipertensivos”.
Según ha explicado el profesor Costa, en un 5% de los casos en los que la hipertensión tiene una única causa (feocromocitoma, adenoma suprarrenal, estenosis de arteria renal…) “el tratamiento médico y/o quirúrgico de la causa que lo origina puede curar la enfermedad de forma definitiva”.
Sin embargo, “en la gran mayoría de los casos, el tratamiento con fármacos y medidas de estilo de vida saludable tendrá que mantenerse de forma indefinida, para lo que es muy importante el adecuado cumplimiento terapéutico por parte del paciente”.
“El control óptimo de la Hipertensión es fundamental no solo para disminuir la incidencia de enfermedad vascular, sino también para disminuir el riesgo de demencia”
¡Juntos detendremos el avance de la demencia!
¡Nunca es demasiado pronto!!
+ Información: De la A a la Z, factores de riesgo modificables en la enfermedad de Alzheimer.