Los días 7 a 11 de junio, Susana Sanz, catedrática de Derecho Internacional Público de la CEU-UCH, visitó Brasil con el fin de presentar al Ministerio de Derechos Humanos y contra la Discriminación Racial de dicho Estado el informe que se le había encargado sobre Buenas prácticas europeas en materia de derechos humanos en la formación de funcionarios de la justicia y de la seguridad.
La redacción de este informe le había sido solicitada a Susana Sanz a través de un doble encargo de la Unión Europea y del gobierno de Brasil quienes, a finales de 2015, lanzaron una convocatoria pública para reclutar a un experto europeo que asesorara al gobierno de Brasil en temas de formación de jueces, fiscales y policía. La razón de este asesoramiento no es otra que el deseo de Brasil de lanzar en 2017 su primer curso de formación continua en derechos humanos tanto para sus funcionarios del sector de la justicia como para sus agentes de la seguridad pública.
Brasil deseaba conocer la experiencia europea, y más en concreto, la española y la italiana, en sus cursos de formación de jueces, fiscales y policía con el fin de utilizar en Brasil las buenas prácticas detectadas así como de evitar aquellos aspectos que España e Italia consideraran menos exitosos de sus cursos de formación.
Para realizar su trabajo, Susana Sanz mantuvo entrevistas en ambos países. En España, con el Consejo General del Poder Judicial, el Centro de Estudios Jurídicos –encargado de la formación de los fiscales-, la Escuela Nacional de Policía, la Dirección General de la Guardia Civil y con policía local. En Italia, las entrevistas fueron con la Scuola Superiore de la Magistratura, la Scuola Ufficiale dei Carabinieri y la Scuola Interregionale de Polizia Locale. Asimismo, se entrevistó con jueces, fiscales, policías, guardias civiles y carabinieri usuarios de estos cursos y con algunos de sus profesores, a fin de tener información de todos los puntos de vista.
Los resultados demuestran que tanto en España como en Italia existe una amplia oferta de cursos de formación continua en temas que indirecta o tangencialmente afectan a derechos humanos aunque a menudo no estén centrados expresamente en esta temática. Así mismo, el estudio demuestra que, junto a la oferta oficial de cursos que organizan los órganos que tienen el encargo constitucional de formar a estos colectivos, existe un gran abanico de cursos organizados por otras entidades, como universidades pero también academias privadas, asociaciones y sindicatos policiales.
Los cursos se adaptan a las circunstancias y sensibilidades de cada Estado y, en este sentido, en España son numerosos los cursos organizados sobre violencia contra la mujer mientras que en Italia hay más sobre criminalidad organizada y lucha contra las mafias y protección de testigos.
Susana Sanz presentó su informe con gran éxito ante el equipo de la Coordinadora nacional de derechos humanos del gobierno de Brasil, un país que en estos momentos está sumido en una crisis institucional tras el impeachment a la Presidenta Dilma Roussef, que ha alejado a esta y de sus responsabilidades en el ejecutivo federal.