Esta semana los alumnos del Grado de Óptica y Optometría (Roberto Gimeno, Angel Fernández, Manuel Ansuátegui, Ignacio Renau y María Martínez) nos explican las consecuencias de no usar unas lentes de protección solar adecuadas:
Todavía hay muchas personas que optan por comprar sus lentes de protección solar en establecimientos no homologados o sin estar respaldados por profesionales sanitarios. No obstante, el uso de unas lentes de protección solar inadecuadas puede tener consecuencias negativas a corto y largo plazo que se incrementan por el uso prolongado.
Nuestros ojos responden a estímulos electromagnéticos de una longitud de onda desde 380 hasta 780 nm (lo que denominamos espectro de luz visible). Tanto la luz IR como la luz UV que están fuera del espectro de luz visible pueden causar efectos dañinos en nuestros ojos tras una exposición prolongada. Las patologías que se pueden producir como consecuencia de la exposición a dichas radiaciones son a corto plazo: pingécula y pterigium (lesiones de color blanco amarillento en la conjuntiva, que en el segundo caso puede llegar a afectar a la córnea). También son frecuentes los casos de queratopatía superficial que permite la entrada de mayor cantidad de radiaciones en nuestros ojos y que podría provocar lesiones internas de peores consecuencias.
A largo plazo, las consecuencias del uso de lentes que no cumplan la normativa son numerosas como las cataratas (opacidades del cristalino), cuya aparición puede verse acelerada. La más grave de las consecuencias es la maculopatia actínica.
Para finalizar compartimos este vídeo sobre el tema con la Dra. María Miranda, coordinadora del Grado en Óptica y Optometría del CEU, que nos ofrece una serie de consejos y recomendaciones para proteger nuestros ojos en verano. ¡Esperamos que os guste! 🙂
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