Hoy es el centenario del armisticio. Hoy es un día muy, pero que muy histórico.
Se cumple justamente hoy, 11 de noviembre de 2018, un siglo del final de la Primera Guerra Mundial.
Fue una terrible contienda, la primera de esa índole, por eso la llamaron entonces la Gran Guerra.

Mi padre no estuvo en ella, lógicamente, pero me contaba que cuando nació aún sonaban las campanas de Huelva celebrando el armisticio…
…Porque mi padre, que hoy estaría a punto de cumplir cien años, nació ¡tres días después de firmarse esa paz!
Sentimentalismos aparte, todos debemos conmemorar tamaña gesta: el final de la Gran Guerra.

Esa rúbrica en un vagón de tren en Compiegne (Francia) removió los cimientos del mundo contemporáneo…
… Pero clausuraba un periodo que lamentablemente, como todas las guerras, al menos hizo avanzar la Medicina y Fisioterapia:
¿Cómo?, te preguntarás… Pues por la terrible cifra de heridos y mutilados que el conflicto ocasionó.
Tanto los soldados como la población civil que sufrió innumerables lesiones requería la asistencia creciente de tratamiento fisioterápico.

Terribles lesiones físicas como amputaciones, parálisis, pérdida de masa muscular… ¡Por no hablar de las secuelas psíquicas!
Además, en aquella época comenzaba a prosperar tanto la práctica clínica como el asociacionismo de los escasos pero diversos fisioterapeutas mundiales.
Para no hacer muy extenso este post, os invito a conocer detalladamente tan interesante momento histórico con varias lecturas:
- El apasionante relato de Juan Eslava Galán titulado «La Primera Guerra Mundial contada para escépticos».
- La magistral historia de la fisioterapia narrada por Jean Barclay con el precioso título «In good Hands».
- El magnífico manual del valenciano José Lendoiro «Historia de la Fisioterapia hasta la 1ª Guerra Mundial».
Asimismo, entre la extensa filmografía para la ocasión, os recomiendo la maravillosa película francesa «Joyeux Nöel» dirigida por Christian Carion en 2005 y titulada en España «Feliz Navidad».

Una foto tan emocionante como la que despide este artículo, acompañada de la música de la citada película, lo dice todo:
¡Feliz Paz a todo el mundo!
Así es José Ángel, el final de la Gran Guerra es un evento que debe ser celebrado por todos los ciudadanos, amantes de la historia o no. Que suerte tuve de haber conocido a tu padre en Gloria esté, que momento tan entrañable que no olvidaremos nunca ni tú ni yo.
Cierto es que la Fisioterapia jugó un papel importante en la recuperación de los heridos en su retorno a la sociedad. Tras esas manos que curan, ayer y hoy, siempre encontraremos la entrega y compasión del corazón del fisioterapeuta.
Gracias por recordarnos este día amigo mío
Muchas gracias, José. Sé que te encanta la historia, y si además hablamos de Fisioterapia…
Estupendo artículo!!! Me ha encantado el guiño al abuelo Lorenzo. Recuerdo perfectamente escuchar esa anécdota contada por él mismo.
Don Lorenzo además de enfermero tenía una memoria prodigiosa y una gran capacidad para la narración y escritura, cosa que hizo durante los últimos años de su vida a través de su blog «memorias onubenses».
Como ciudadanos del mundo tampoco debemos olvidar fechas como la de hoy, la imagen de
Angela Merkel y Emmanuel Macron me ha emocionado.
Enhorabuena José Ángel
¡Gracias, Mariajo! Sabía que a muchos amigos y «fisios» os iba a gustar…
Muy chulo este artículo. Enhorabuena