Francisco Javier Molina es investigador en ramas tan innovadoras como la ecografía o la termografía en fisioterapia. Además, imparte clases a nuestros estudiantes en varias materias a lo largo de la carrera. Pero sobre todo, es un profesional de recorrido internacional y punto de referencia para los estudiantes francófonos de nuestro centro de Elche: ¡y una persona capaz de transmitirles toda la pasión que siente por su profesión!
Javier, has desarrollado tu carrera como fisioterapeuta clínico siempre ligado al deporte, tanto en España como en el extranjero: ¿cuál ha sido tu recorrido profesional?
Antes de empezar a estudiar Fisioterapia, el mundo del deporte me apasionaba. Nada más terminar la carrera de Fisioterapia empecé a trabajar con niños de unas escuelas deportivas de fútbol. Al poco tiempo, monté una clínica de fisioterapia en la que la mayoría de los pacientes eran deportistas. Doce años después recibí una oferta de trabajo en Francia que no podía rechazar, concretamente en el Hospital de Hauteville-Lompnes, todo un referente en rehabilitación deportiva de rodilla. Allí pude trabajar con deportistas de nivel de disciplinas con las que nunca había trabajado antes como el rugby, el biatlón, o diferentes modalidades de esquí de las que ni había oído hablar anteriormente. Pronto congenié con algunos deportistas con los que continué trabajando a título personal. Esto me permitió trabajar de forma individualizada a caballo entre Francia y Suiza.
Desde hace algunos años, he cambiado la dirección de mi trabajo y ahora estoy más centrado en temas relacionados con la investigación en técnicas de imagen como la ecografía o la termografía aplicada a la fisioterapia.
Impartes, tanto en Fisioterapia como en Kinésithérapie, materias como Valoración o Fundamentos, ¿qué va a aprender un estudiante con estas materias?
En primer curso imparto clases en Kinesithérapie, concretamente la asignatura de Valoración. Esta asignatura es, probablemente, el primer contacto de los alumnos con la fisioterapia como tal. En ella, el alumno adquiere la capacidad para valorar el estado funcional del paciente a través de, por ejemplo, la exploración física, la valoración o el diagnóstico fisioterápico empleando métodos y procedimientos manuales e instrumentales. A nivel clínico también es el primer contacto con el paciente.
En segundo curso imparto tres asignaturas: Fundamentos, Especialidades Clínicas I y Pruebas Complementarias. La asignatura de Fundamentos da a conocer en qué consiste la profesión del fisioterapeuta a través de un repaso histórico de la fisioterapia para, de esta forma, poder entender mejor la evolución de esta disciplina. Además, se dan a conocer los aspectos básicos del método científico, que son de vital importancia para trabajar desde una fisioterapia basada en la evidencia científica.
Apostamos por formar a los estudiantes en técnicas de imagen como la ecografía o la termografía, en las que España es referente
En la asignatura de Especialidades Clínicas I (FEC 1), el alumno aprende a realizar intervenciones fisioterapéuticas centradas en la traumatología, la ortopedia y la reumatología; es una asignatura con una carga práctica importante.
Finalmente, en la asignatura de Pruebas Complementarias, yo suelo impartir la parte de ecografía musculoesquelética. Es una técnica de imagen que ha supuesto un antes y un después en la fisioterapia. Además, resulta muy llamativa para los alumnos y disfrutan mucho de las prácticas con los ecógrafos, donde se ponen a prueba los conocimientos de anatomía adquiridos previamente.
No sólo en las asignaturas que imparto, sino también en el resto, las prácticas forman un grueso importante de la formación. En Fisioterapia no se entiende una docencia sin unas prácticas de calidad en las que el alumno no sólo aplique las técnicas aprendidas, sino en las que también experimente en primera persona lo que siente el paciente. En el CEU de Elche la mayoría de profesores tienen una larga trayectoria clínica. Esto, unido a unos grupos reducidos y al gran número de horas dedicadas, reflejan la importancia que da el departamento de fisioterapia a la parte práctica.
Además de todas las asignaturas que impartes, eres uno de los primeros puntos de contacto de los estudiantes franceses que vienen al CEU de Elche.
Los alumnos franceses llegan a Elche llenos de ilusión al igual que los alumnos españoles, pero es cierto que el estudiar en otro país y no dominar bien la lengua puede suscitarles cierto temor, que a los pocos días se desvanece.
Para la universidad es fundamental la adaptación del alumno francés, conoce perfectamente sus temores al llegar y actúa eficazmente para una integración rápida. Los actos de bienvenida o los tutores personales son algunas de las medidas que hacen que esta adaptación sea lo más rápida y agradable posible. Otro factor que ayuda a la integración de los alumnos internacionales son los grupos reducidos de prácticas. En muchas ocasiones se crean vínculos no sólo a nivel académico, sino que también trascienden al nivel personal.
Adaptarse a la vida en Elche es sencillo, es una ciudad que abraza al estudiante, con buen clima, ambiente universitario, playa, una buena oferta de ocio y, además, no es una ciudad cara, ¡poco más se puede pedir!
Un campus internacional que no pierde la esencia local
¿Qué les espera a los estudiantes franceses en estos cuatro años de carrera: muchas prácticas, muchas horas de estudio, una experiencia de vida apasionante?
Evidentemente hay que dedicar muchas horas de estudio y prácticas con los compañeros, pero no debemos olvidar que la fisioterapia engancha, apasiona. Eso, sumado a la gran cantidad de prácticas y un último año de estancias clínicas, hacen que los cuatro años de carrera pasen demasiado rápido. Sólo hay que preguntar a cualquier alumno de 4º curso y seguro que nos lo confirmará.
¡Pero no todo es estudiar! El ocio, las tertulias y risas en la cafetería o las actividades deportivas también son importantes y forman parte de la vida estudiantil.
¿Existe, desde tu punto de vista, alguna diferencia importante entre los estudios de Fisioterapia en Francia y en España?
La base de los estudios de Fisioterapia son muy similares en ambos países, pero en España somos una referencia en ciertas ramas. Me refiero, por ejemplo, a la utilización de técnicas de imagen como la ecografía o la termografía. O a la fisioterapia invasiva, como la electrólisis o la neuromodulación percutánea. El CEU de Elche apuesta por estas técnicas que se incluyen en la formación, e incluso oferta una formación de postgrado en Neuromodulación Percutánea de la mano de los referentes en esta técnica.
En Francia, hace poco tiempo que el fisioterapeuta puede utilizar la ecografía, y empieza a hablarse de incluir algunas técnicas invasivas en sus competencias. En España, la formación y utilización de la ecografía en fisioterapia se remonta al año 2008. Además, algunas de las técnicas invasivas forman parte de nuestro arsenal terapéutico desde hace ya algunas décadas. Esta experiencia hace de nuestra universidad una oportunidad difícil de rechazar para el estudiante internacional que esté interesado en esta formación.
¿Darías algún consejo a esos estudiantes franceses que se están pensando venir al CEU de Elche a estudiar Kinésithérapie?
Si su vocación es la fisioterapia, si quieren vivir una experiencia en un país acogedor como España, apuestan por una formación de calidad con la insignia de la cercanía, donde conocer de la mano de unos docentes cercanos técnicas de fisioterapia consolidadas, pero todavía emergentes en Francia. Esta es su universidad y Elche su ciudad.