Vino español, vino de diseño

¿Sabías que España es uno de los mayores productores de vino del mundo? Sin duda, esto pone de manifiesto la gran importancia que la cultura del vino tiene en nuestro país. Y, si somos exigentes con el producto, definitivamente también lo somos con su «envoltorio»: ¿botellas aburridas en vidrio verde? ¡No, gracias!

Aquí os presentamos algunas de las botellas de vino, españoles e internacionales, que más nos gustan: con packaging innovadores, etiquetas coloridas, diseños rompedores, ¡y siempre con firma española!

Roberto Espartero, “Soneto”, Bodega Arbocala

Recordemos que un soneto es una construcción poética. Roberto Espartero explica que un soneto es «la composición poética más armoniosa (…), y también la más compleja de construir». En efecto, un soneto sigue un patrón rítmico y de rima bastante estricto. Siguiendo esta analogía, Roberto Espartero nos deja entrever que la atención por los pequeños detalles es algo que impregna toda su obra. Y, en este caso, su «elegante y distinguido diseño, que cuida hasta el más mínimo detalle», busca reflejar el espíritu de un vino «de la más alta calidad».

Las catorce líneas horizontales que aparecen en la etiqueta simbolizan los catorce versos que componen un soneto. En cuanto al color, llaman la atención los tonos pop en amarillo, rosa palo, blanco y negro. De alguna forma, colaboran también al dinamismo del diseño. La atención al detalle se percibe incluso en el corcho de la botella, un elemento al que tradicionalmente se le presta poca atención; en este caso, un mensaje de «¡Salud!» o «¡Chin-chin!» nos invita al brindis nada más abrir la botella.

Atipus, “Vins Rojalet”, Celler Masroig

El diseño de estas tres botellas fue galardonado con los premios Laus de bronce y The Dieline Outstanding Achievement en 2016. El color rojo de la tierra donde crece su uva fue lo que inspiró el diseño de estas botellas, firmadas por un estudio catalán. El terreno se representa en forma de líneas, una por cada uno de los pisos en los que se estructura la plantación.

Cada una de las botellas presenta, sin embargo, su propia personalidad y color. La botella de vino blanco tiene un diseño más ligero, mientras que la de vino rojo aparece con un diseño más contundente, sobre todo por el fuerte contraste entre los colores. El punteado del diseño que corresponde al vino «Selección» es el que más recuerda al terreno de la plantación, y el uso del color oro denota un vino de mayor calidad.

Eduardo del Fraile, “Pietra”, Menhir Salento Italy

El diseño de esta botella ganó el Bronze Pentaward en 2012. La elegancia y simplicidad de esta botella es, seguramente, lo que hizo que se alzara con el galardón. Pero el secreto está en los pequeños detalles porque, en realidad, es en el tapón en lo que debemos fijarnos.

El envoltorio del tapón es uno de los elementos a los que menos atención se le suele prestar en el diseño de una botella. Normalmente, se trata de una pieza monocroma y no está en consonancia con el diseño del resto del producto. Sin embargo, aquí se da el caso contrario. De hecho, toda la botella es de color negro y tan sólo aparece, en blanco, el nombre del vino y el número diez. El envoltorio del tapón llama la atención por su inusual color blanco hueso, que de hecho conecta con el nombre del propio vino («Pietra», que significa piedra en italiano).

Brandsession, “Vitis Vinifera”, Centro Temático del Vino Nestares Rincón

Brandsession ganó en 2012 el prestigioso premio Anuaria en la categoría de «Mejor Packaging» gracias al diseño de esta botella. Su inspiración bebe de dos referencias diferentes. La primera, el propio nombre «Vitis Vinifera», que es el nombre común que recibe el vino en latín; en segundo lugar, su relación con la familia de farmacéuticos dueña de la bodega productora del vino.

Es por esta razón que el packaging recuerda a los antiguos botes farmacéuticos. La botella aparece envuelta por una piel que la hace parecer un recipiente cerámico. Su color blanco y detalles en azul cobalto son, seguramente, lo que más destaca en su diseño.

Iván Bravo, “La Vinya del Vuit”

Otro diseño premiado en 2012 con el Laus de plata. Si uno se fija en sus detalles, verá claramente un número ocho en la esquina inferior izquierda de la botella. El resto es una «interpretación poética del paisaje del Priorat», la región donde nace este vino.

Según el autor, Iván Bravo, «la botella centra su imagen en la interpretación emocional y psicológica del paisaje del Priorat, que se genera a partir del número ocho. Un mundo simbólico expresado a través de un lenguaje y una selección cromática confrontados con los cánones tradicionales del género». Esta explosión de color, tan poco convencional como eficaz, es sin lugar a dudas lo que hace que esta botella destaque.

Javi Garduño “Strike wine”, Strike wine

«El cliente describió este vino como un pleno o strike, y desde ahí nos dio absoluta libertad para desarrollar el producto, tanto a nivel de nombre como de packaging».

Y así es como todo comenzó. Javi Garduño decidió que la botella tuviera la apariencia de un bolo, vestida con una sleeve que le da ese aspecto. Un diseño particular que le valió un premio Laus de bronce en 2018 y que, definitivamente, hace que esta botella llame poderosamente la atención.

Shumi Love Design, “Spain I Need You!”, Fortuna Wines

Un conjunto de botellas de vino español para el mercado internacional. Un concepto que, por tanto, buscaba vender de alguna forma la «marca España».

El color grana aparece en la envoltura del tapón, así como en el texto «Product of Spain», mientras que el resto del packaging reduce su gama cromática al blanco y negro. La frase «Spain, I need you» recuerda, según los propios diseñadores, «al reclamo apasionado de una persona que quiere estar allí en un instante preciso, y así sentir el carácter único del país, su cálido verano, y zambullirse en un remolino de emociones».

Calcco, Vinos Siete Pasos, Bodega Peñafiel

Esta saga de vinos destaca por su diseño único y algo descarado. Cada uno de los vinos de esta serie tiene su propia personalidad, que se refleja en un personaje diferente que se adhiere a la botella. Esta personificación de los vinos ayuda a captar a golpe de vista la identidad y el sabor de cada uno de ellos.

«Cada vino te cuenta una historia», según se lee en la página de Siete Pasos. Y, efectivamente, cada vino tiene su personalidad y cada degustación es casi como un viaje diferente. Este diseño gráfico y conceptual tan único viene con la firma de Calcco, un estudio de diseño especializado en packaging para bodegas y con sede en Logroño.

Eduardo del Fraile, “Extenso”, Bodegas Carchelo

Elegante y simple, así es el diseño en blanco y negro ideado por Eduardo del Fraile para este vino.

En él, prima la idea de «compartir». Algo que se alinea con el nombre del vino, Extenso, que hace referencia a algo que se prolonga. Pero también con el hecho de que se trate de una botella Magnum (1,5 litros), que colabora a la idea de consumo compartido. Lo que más destaca, sin lugar a dudas, es la elegancia y máxima simplicidad del concepto, que se hace extensiva a la caja que contiene la botella. Un elemento que, en este caso, se convierte también en un objeto de gran elegancia y valor añadido.

Enric Aguilera Asociados, Verano De España

«¿Cómo llegar a un diseño que refleje el carácter español, en el que destaque el buen humor y que tenga la apariencia de un souvenir?», parece que es lo que Enric Aguilera & Asociados pensó cuando se le encomendó la tarea de diseñar el packaging de Verano de España.

Estas botellas reflejan algunos elementos españoles claramente reconocibles (paella, chorizo, tortilla) con un etiquetado colorido y algo vintage pero, sobre todo, con mucho humor. Los colores, claros y brillantes, hacen referencia a las ideas de alegría, al verano y a la cercanía de los españoles… ¡todo lo que es y representa España!

Como veis, el vino en España combina una larga tradición con el diseño más vanguardista, un combo perfecto. Quizás por esta razón, ¡nuestro país se ha convertido en una auténtica referencia en el diseño gráfico y de packaging!