Tres patas y una historia

Noa llegó al Hospital Clínico Veterinario CEU  tras perderse al salir de casa. No sabemos muy bien que pasó, pero su historia comienza aquí, con nosotros, y gracias a las colaboradoras de la  Colonia Felina de Alboraya que la recogieron en la calle.

Había llegado con una herida sangrante en el codo y algo no iba bien con su extremidad delantera izquierda. Al principio, estaba muy asustada pero tras tranquilizarla y quitarle el dolor, descubrimos que tenía una fractura en esa extremidad. Con la colaboración de los compañeros de diferentes servicios del hospital (anestesia, diagnóstico por imagen, cirugía, etc.), pudimos estabilizar y diagnosticar a Noa.

Localizamos diferentes fracturas en el cuerpo de Noa, afectando a tres costillas, la cadera y el húmero de la extremidad anterior izquierda. El hueso de su pata se había roto en múltiples fragmentos, fragmentos que habían causado daño a los músculos y la piel. Había que tomar una decisión, y tras valorar el caso, decidimos amputarle la patita a Noa.

Durante la intervención quirúrgica, nos avisan que han encontrado a los propietarios de Noa. Su familia que había estado buscándola día y noche por los alrededores de casa, vieron en anuncio de las Colonias Felinas de Alboraya y acudieron corriendo al Hospital Clínico Veterinario CEU.

Nuestras veterinarias internas María Álamo y Cristina Rizkallal durante la cirugía de Noa

La recuperación no fue sencilla, Noa tuvo problemas para comenzar a respirar sola tras la intervención y le costaba recuperar la temperatura corporal. Pasó la noche en cuidados intensivos bajo la supervisión de nuestros veterinarios internos.

Noa en su recuperación tras la cirugía

Para su familia, fue una noticia impactante que Noa ahora tuviera 3 patas. Después de una amputación, cambia el aspecto físico de nuestra mascota, afeitamos bastante pelo y hay cicatrices grandes. Pero la estética no frenó a la familia de Noa, que tras despertarse, fueron a brindarle todo el amor y cariño que se merece un componente más de la familia.

Primer día post-operatorio, ya es capaz de mantenerse sentada

A los 3 días, Noa regresa a casa y tras varios días de adaptación a su nueva condición, vuelve a ser una gatita feliz y mantiene los mismos hábitos que antes.

 

Nosotros, el equipo humano, estamos muy contentos por su evolución, por la oportunidad y apoyo incondicional que le ha brindado su familia. También, queríamos agradecerle la labor a las Colonias Felinas de Alboraya.

GRACIAS

 

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