El pasado 13 de marzo Jaume Doménech, investigador de la Universidad de Valencia, nos explicó su investigación sobre el parlamento durante la pandemia de la COVID-19. Esta actividad se realizó en el marco del Observatorio de Gobernanza, Transparencia y RSC, concretamente la sublínea que está llevando a cabo la investigación sobre la información y comunicación en el Parlamento.
El estudio llevado a cabo por Jaume comenzó como parte de su Trabajo de Fin de Máster (TFM), donde se centró en investigar el uso de desinformación y sentimentalización en el discurso parlamentario, específicamente durante la pandemia de COVID-19. Doménech se interesó por estudiar los diarios de sesiones parlamentarias y descubrió que estas herramientas se utilizaban como armas políticas.
En relación con la desinformación, observó cómo los parlamentarios acusaban a sus oponentes de mentir, no tanto por el uso de información falsa, sino como una estrategia para desacreditarlos y minar su reputación. Por otro lado, la sentimentalización implicaba identificar elementos en el discurso que apelaban a las emociones de la población. Esta segunda investigación se recoge en el libro Desórdenes informativos: Periodismo, política y ciudadanía ante la desinformación.
El estudio se realizó durante la primera etapa de la pandemia, comenzando el 18 de marzo. Se analizaron las intervenciones parlamentarias de los grupos con mayor representación y se acotaron a temas relacionados con la salud y la economía. Los hallazgos revelaron asociaciones estadísticamente significativas entre el partido político y las estrategias discursivas empleadas. Además, se identificaron categorías de expresiones utilizadas por los políticos, como lemas partidistas, insultos o apelaciones emocionales.
De este modo, sus conclusiones proporcionaron una comprensión más profunda de cómo la desinformación y la sentimentalización se han utilizado en el discurso parlamentario durante la pandemia, destacando su papel como herramientas políticas para influir en la opinión pública y desacreditar a los oponentes políticos.