¿Qué es el bruxismo?
Conocemos el bruxismo como el apretamiento o rechinamiento dental. Aunque, en realidad, se refiere a una actividad muscular repetitiva de los músculos de la masticación, cuando no se está realizando ninguna función concreta, como comer. Esta actividad muscular produce una fuerza intensa o un golpeteo sobre los dientes, o un deslizamiento de la mandíbula.
El bruxismo, apretamiento rechinamiento dental, puede producirse mientras dormimos, bruxismo del sueño, o cuando estamos despiertos, bruxismo de vigilia.
¿El bruxismo es raro o afecta a muchas personas?
Los estudios científicos hablan de distintos porcentajes de afectados (4-40%). Estos porcentajes dependen de las características de la población estudiada. También varían si estudiamos el bruxismo cuando dormimos o al estar despiertos.
El Consejo General de Dentistas de España realiza periódicamente una encuesta poblacional. Este estudio estudia los hábitos de salud buco dental y la problemática percibida por la población. Tras la pandemia COVID-19 se ha detectado un incremento en la percepción de problemas dentales. En concreto, justo antes de la pandemia, solo un 6% de los encuestados manifestaron creer ser bruxistas. Sin embargo, tras la pandemia, este porcentaje creció hasta un 23%. La sensación de molestias de la articulación temporomandibular también se incrementaron en este periodo. Este aumento fue menor, de un 4 a un 6%
¿Soy bruxista?
El bruxismo puede manifestarse de muchas maneras, por ejemplo, con sensibilidad o desgaste de los dientes. También puede aparecer dolor muscular o de la articulación. A veces el dolor parece del oído, de las cervicales o de cabeza. Otras personas no son conscientes de que aprietan porque no tienen síntomas durante mucho tiempo. Son sus padres o sus compañeros de habitación los que detectan que hacen ruidos con los dientes mientras duermen.
Es importante acudir a un especialista para que nos confirmen el diagnóstico. Nos aconsejarán sobre el tratamiento adecuado en nuestro caso. En la clínica dental pueden realizarnos preguntas relevantes que aportan mucha información. Es fundamental una buena exploración bucodental. Además, existen pruebas concretas que confirman el diagnóstico como el estudio de los músculos (electromiografía) y del sueño (polisomnografía)
Apretamiento de los dientes o rechinamiento… ¿Qué va a pasar?
En ocasiones no tenemos síntomas durante mucho tiempo, depende de características individuales como la capacidad de adaptación personal. La sintomatología puede es muy variada y cada paciente la manifiesta de una manera personal. Entre otros, podemos encontrar:
- Desgaste de los dientes, en la zona en la que chocan o justo al lado de la encía
- Hipersensibilidad dental
- Fracturas de dientes o tratamientos dentales (obturaciones o coronas)
- Movilidad en un diente que choca antes, aunque no tengas enfermedad periodontal
- Cambio de color, e incluso, dolor dental por afectación del nervio al sobrecargar, por microtrauma reiterado o por desgaste
- Marcas de los dientes en el lateral de la lengua o en la mucosa interna de la mejilla
- Heridas por mordisquear la mucosa
- Cansancio en los músculos, como pérdida de fuerza para comer
- Dolor de la musculatura bucal o de la articulación
- Dificultad o limitación para abrir la boca
- Ruidos en la articulación al comer, bostezar o estornudar
- Sensación de que la articulación se nos queda encajada en algunos movimientos concretos
- Desarrollo de los músculos de la masticación
- Dolor muscular cervical
- Dolores de cabeza, sobre todo matutinos
¿Por qué aprieto los dientes?, ¿por qué rechino?
Existen muchas causas posibles en el bruxismo, ya sea apretamiento o rechinamiento dental. Los investigadores consideran que el bruxismo está condicionado por múltiples factores. Por ejemplo, psicológicos o vinculados al sistema nervioso.
Ansiedad o estrés. Está demostrado que un ritmo de vida ajetreado o entornos competitivos incrementa los índices de bruxismo.
Medicamentos, alcohol, tabaco y sustancias excitantes. Los fumadores duplican en el hábito de apretar a los no fumadores y con mayor frecuencia
Patologías asociadas. Se ha relacionado el reflujo gástrico con los episodios de apretamiento durante el sueño.
A rasgos generales, en el bruxismo de vigilia es más común rechinar y se vincula a estrés. Por otro lado, el bruxismo del sueño, se vincula más a los trastornos de movimiento durante el sueño, (microdespertares o apnea obstructiva del sueño, entre otros) y al apretamiento.
Creo que soy bruxista ¿Qué hago?
Si dudas, acude a tu médico. Médicos de familia, otorrinolaringólogos, maxilo-faciales y odontólogos trabajamos en equipo para detectar los pacientes con bruxismo. Un diagnóstico precoz disminuye la sintomatología y facilita el tratamiento. Este tratamiento es, en muchas ocasiones multidisciplinar. Fisioterapeutas y psicólogos pueden ser pilares fundamentales del equipo
Recuerda que en muchas ocasiones el bruxismo comienza en la infancia o la preadolescencia. Si dudas, consulta en pediatría. Odontopediatras y ortodoncistas sabrán indicarte si es necesario tratar y cuándo.
Apretamiento o rechinamiento dental: bruxismo/ 7 tips para mejorar
1. Conocer la causa y modificarla (estrés, ansiedad, ausencias o malposiciones dentales).
2. Corregir los hábitos perjudiciales y establecer hábitos saludables del sueño (Disminuir sustancias excitantes en las horas previas al sueño, minimizar empleo de pantallas antes de ir a dormir).
3. Biorretroalimentación. Ejercicios controlados que reeducan la musculatura mandibular a posiciones de relajación y función fisiológicas
4. Férulas bucales. No se trata solo de evitar el contacto dental sino de posicionar la mandíbula correctamente y disminuir el estímulo masticatorio. Si son necesarias, deben ser estudiadas y adaptadas para cada caso por un experto.
5. Oclusión estable. Restaurar los dientes que lo necesiten, sustituir los ausentes para repartir las fuerzas al masticar, ortodoncia, etc. Evitar que algunos dientes choquen antes o lo hagan en momentos en que no deben chocar (contactos prematuros o interferencias).
6. Fármacos. Qué solo deben ser recetados por el médico especialista indicado (relajantes musculares, ansiolíticos). En algunos casos, la toxina botulínica puede emplearse para disminuir la actividad muscular.
7. Ejercicio físico, técnicas de relajación y reeducación postural.
Cada persona es única, por eso, el diagnóstico y tratamiento deben ser siempre personalizados.
Consulta a tu odontólogo de confianza, te ayudará
“Una mente en calma trae fuerza interior y confianza en uno mismo, por eso es muy importante para la buena salud”.
Dalai Lama