El estudiante y delegado de la asignatura Integrated Medicine nos cuenta la experiencia vivida:
¡Hola! Soy Miguel García Roig, estudiante de 5º de Medicina en la Universidad CEU Cardenal Herrera y mentor de Invictus, un equipo de robótica formado por 6 alumnos del Colegio Pureza de María – Cid que participa en la First Lego League (FLL).
La FLL es una competición internacional que desafía a jóvenes de todo el mundo a pensar como científicos y tecnólogos. Los equipos diseñan, construyen y programan robots, así como desarrollan proyectos de innovación para resolver problemas del mundo real. Además, fomenta el desarrollo de habilidades como el trabajo en equipo, la resolución de problemas y la creatividad. Actualmente en la FLL participan más de 55.000 equipos de 92 países.
Mi comienzo en la competición fue como participante en el año 2015, cuando la Universidad CEU Cardenal Herrera era la encargada de organizar la FLL en Valencia, fase regional de la competición. ¿Quién me iba a decir que tantos años después estaría estudiando en esta universidad? Competí como miembro del equipo hasta 2018, año en el que por mi edad no pude seguir haciéndolo. A partir de ese momento pasé a ser mentor del equipo regional para enseñar a los nuevos miembros todo lo que había aprendido en los años anteriores.
Este año, tras salir vencedores en la fase regional de la competición, mi equipo, Invictus, tuvo la oportunidad de avanzar a la fase nacional (FLL Spain), en la cual consiguió una plaza para participar en la final internacional FIRST Championship en Houston, Texas (EE.UU) del 17 al 20 de abril.
En ella se citaron los 152 mejores equipos de todo el mundo, nominados por los países en sus torneos nacionales para competir, entre los cuales había 4 equipos españoles (3 de Navarra y 1 de la Comunidad Valenciana). A lo largo de 3 días de competición los equipos presentaron su diseño de robot y proyecto de innovación ante los jueces. Siguiendo la temática de esta temporada, la transmisión de hobbies a través del arte y la tecnología, Invictus aprovechó sus raíces valencianas para darle la vuelta a las Fallas, con una idea que utiliza los monumentos falleros como punto abierto de encuentro y transmisión de hobbies al mundo. La idea estuvo acompañada con una maqueta modelo que representaba los hobbies de los participantes del equipo y que innovaba en la fabricación de las esculturas empleando la impresión 3D con materiales reciclados orgánicos para sustituir los materiales poliméricos actuales.
Siguiendo al proyecto de innovación, defendieron ante los jueces el diseño de su robot, P.A.C.O., acrónimo de Puedo Averiguar Cómo Orientarme. De las 6 rondas de competición oficiales, 3 rondas de ensayo y 3 rondas oficiales, este consiguió completar todas las pruebas en 5 de ellas, obteniendo el 3º premio al comportamiento del robot en la competición.
Finalmente, el proyecto de innovación, el diseño y rendimiento del robot y la presentación de todo ello llevó al equipo a conseguir el «3rd World Champion´s Award», lo que equivale a una tercera posición a nivel mundial.