La orina es un líquido amarillo y transparente que es producido por los riñones y que se secreta al exterior del cuerpo por el aparato urinario (de los riñones pasa por los uréteres hasta la vejiga, y de ahí al exterior por la uretra).


La orina contiene principalmente agua, y en menor medida tiene sales minerales y productos de desecho como la urea. El color normal es amarillo, pero a veces este color se ve alterado por distintas situaciones o problemas que te contamos a continuación.
Si durante el día bebes poca agua, o si es verano y hace calor y estás sudando, tu cuerpo va a retener la máxima cantidad de líquido, por eso cuando orines, seguramente tu orina sea más oscura, ya que estará más concentrada. Por el contrario, si bebes más agua de lo normal, además de orinar más, la orina será de color amarillo muy muy clarito.
Otra situación anormal es si la orina tiene color rojizo. Esto podría indicar que hay sangre en la orina (se llama hematuria); para un diagnóstico certero, habría que realizar una prueba de laboratorio. Pero ¡ojo! que algunas personas cuando comen remolacha eliminan orina de color rojizo. Además, si eres mujer y estás con la menstruación, podría ser que los días de más sangrado menstrual, cuando orines, la orina también sea de color rojizo (en este caso porque se mezcla con la sangre que estás expulsando por la menstruación, pero esta sangre no proviene del aparato urinario, sino que proviene del aparato genital debido a “la regla”).



No obstante, si notas cualquier alteración en el color de la orina, siempre es bueno consultar con tu médico o enfermera de referencia para que hagan las valoraciones que consideren oportunas.