Un día, decidió cambiar el sector inmobiliario noruego por el grado en Enfermería de la CEU UCH… ¡a eso llamamos un verdadero cambio de rumbo! Nos sentamos a compartir un momento con Martine, estudiante de primer curso procedente de Noruega, y con ella hablamos sobre ese cambio tan radical, su vida en la CEU UCH y sobre cómo tomó la decisión de vivir en Valencia.
Martine, lo primero que queremos preguntarte es por tu carrera aquí en el CEU de Valencia: ¿qué es lo que te atrajo de estos estudios?
Siempre me ha gustado trabajar con personas y la idea de estar en una oficina todo el día no me atraía nada. Antes de estudiar Enfermería hice la carrera inmobiliaria en mi país, hasta que un día decidí cambiar mi vida y dedicarme a algo totalmente diferente ayudando a otras personas.
Recuerdo que, durante mis años de instituto, pasé algunos veranos trabajando en una residencia de ancianos y es algo que siempre me gustó, pero imagino que en ese momento era más joven y tenía otros valores. Por eso me gradué y empecé a trabajar en el sector inmobiliario, cosa que hice durante dos años, pero nunca me gustó el trabajo de oficina.
Creo que la enfermería es una profesión más real, más cercana, y eso es lo que me lanzó al cambio; también implica trabajar con personas, pero de una forma totalmente diferente. Y también tengo la impresión de que te permite trabajar a nivel internacional: la enfermería se practica de igual forma en todo el mundo.
Y, hablando de internacionalización, ¡habrás comprobado que el mundo está representado aquí en nuestro campus! ¿En qué momento decidiste que la CEU UCH iba a ser tu universidad?
La verdad es que siempre quise vivir en otro país, sobre todo en uno que fuera cálido y en el que pudiera aprender español. Así que, como aquí ofrecen el primer año en inglés, creo que no me resultó muy complicado elegir Valencia y la CEU UCH.
Y de nuestra ciudad, ¿qué es lo que más te gusta?
A decir verdad, lo primero que me llamó la atención… ¡fue el calor! Y también por supuesto, lo bonita que es la ciudad y lo abierta que es la gente. También me sorprendió que mucha gente joven hablaba inglés, algo que no me esperaba. El hecho de que la ciudad sea muy llana también me gusta porque me anima a explorarla en bicicleta. Y la playa, claro, que está al lado de la ciudad.
Y comparando nuestro país con el tuyo, ¿hay algo que te haya sorprendido sobre los estudios en el área de salud?
Desde luego, la sorpresa ha sido positiva, sobre todo por las instalaciones y los equipos que hay aquí en la Facultad de Ciencias de la Salud; tienen una infraestructura que en Noruega no tenemos. Creo también que aquí se profundiza más en los temas que se estudian.
Lo cierto es que en Noruega hay una gran demanda para estudiar Enfermería, supongo que porque sabemos que, con el envejecimiento de la población, necesitaremos muchas enfermeras y enfermeros en el futuro.
Y sobre el futuro, ¿dónde te ves desarrollando tu trabajo?
Me gustaría mucho ejercer de enfermera escolar y poder trabajar con niños, pero todavía no estoy del todo segura. Espero poder mejorar mi español y, quién sabe, acabar trabajando aquí o en otro país hispanohablante. O quizás vuelva a casa, a Noruega.
¡Noruega está tan lejos! Cuando pensamos en Escandinavia, normalmente son Suecia y Estocolmo los primeros lugares que nos vienen a la mente. Por eso, seguro que puedes decirnos algo de tu país que nos haga enamorarnos de él…
La capital, Oslo, es una ciudad que lo aglutina todo: el océano, las montañas, una vida urbana… todo en el mismo lugar. También tenemos, claro está, la aurora boreal, que es algo muy único e identificativo de mi país. Eso sí, yo os recomendaría visitar Noruega en primavera, que es cuando más bonita es. Noruega es un país muy verde y hay flores por todas partes, por eso en primavera explotan todos los colores. También tenemos los famosos fiordos, innumerables posibilidades para hacer senderismo… ¡la verdad es que es un país precioso!
Y ahora estás en España. ¿Conocías nuestro país antes de instalarte aquí? ¿Qué imagen tenías de nosotros?
Sí, había estado un par de veces en España. Concretamente en Nerja (Málaga) y en Barcelona, pero por muy poco tiempo. Mi impresión siempre fue buena, claro que nunca había llegado a interactuar con españoles más allá de tiendas y restaurantes. Creo que aquí la gente es muy abierta y eso es algo que claramente os diferencia de los noruegos.
Cuando finalicé mis estudios inmobiliarios me fui de viaje a América y siento que la cultura española es muy similar a la latinoamericana; quizás sea el único país europeo en el que lo he podido percibir, y eso me gusta mucho.
Cuando estuve en Latinoamérica me entró el gusanillo del español. Ahora que lo estoy estudiando de forma más profunda veo que es algo diferente a como yo pensaba, a veces más complejo, pero me sigue gustando mucho. Tengo muchas ganas de continuar con mis estudios en español para conocer a más locales.
Así que, ¿te sientes ya preparada para afrontar tu segundo año aquí en la CEU UCH, ya en español?
A decir verdad, sé que me queda mucho trabajo por realizar de cara a mi segundo año; creo que los meses que me quedan por delante van a suponer un verdadero reto, pero sé que lo conseguiré. En este momento ya me veo capaz de entender mucho mejor el español, pero necesito salir de mi zona de confort y lanzarme a hablar un poquito más.
En ese caso, la próxima entrevista te la haremos directamente en español. Gracias por compartir estos momentos con nosotros, Martine… ¡y mucha suerte en tu camino!