El pasado lunes 26 de mayo de 2025 se celebró en el Centro de Estudios Políticos y Constitucionales (Madrid) el V Seminario Gil Carlos Rodríguez Iglesias de la Revista de Derecho Comunitario Europeo, centrado en la temática “Valores y principios en el Derecho de la Unión Europea”. El evento reunió a destacados académicos y juristas para reflexionar sobre la protección y desarrollo de los valores fundamentales consagrados en el artículo 2 del Tratado de la Unión Europea.

Uno de los momentos más relevantes de la jornada fue la intervención del profesor Antonio Bar Cendón, catedrático de Derecho Constitucional de la Universitat de València y miembro del equipo de investigación Rule of Law Crisis in the EU. Su ponencia, titulada “Los Estados miembros ante los valores y principios de la Unión Europea: protección de la identidad constitucional nacional”, se enmarcó en la tercera mesa del seminario, dedicada a “Nuevas perspectivas sobre los principios y valores en el Derecho de la Unión Europea”.
Identidad constitucional y euroescepticismo: una cuestión existencial
El profesor Bar abordó, en primer lugar, la evolución del proceso de constitucionalización de la Unión Europea, señalando cómo el reconocimiento de la “identidad nacional” en el artículo 4.2 TUE responde en parte a concesiones realizadas al euroescepticismo, particularmente británico. En su opinión, la cuestión de la identidad nacional se ha convertido en una pregunta existencial para los Estados miembros: un dilema binario ante la integración europea.

¿Qué entendemos por “valores de la UE”?
El profesor Bar analizó el contenido y alcance de los valores recogidos en el artículo 2 TUE desde una doble perspectiva: iusnaturalista y iuspositivista. Subrayó que el texto europeo contiene una formulación política de los valores, cuya protección se articula a través del artículo 7 TUE, también de naturaleza predominantemente política. No obstante, la jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la UE (lista de las sentencias referidas al final de post) ha dotado a estos valores de cierta densidad jurídica, al vincularlos con principios como la primacía del Derecho de la Unión y la independencia judicial.
En este contexto, el Estado de Derecho, como valor esencial, se concreta —según explicó— en elementos como la tutela judicial efectiva (art. 19 TUE), la independencia del poder judicial frente a los otros poderes del Estado y la existencia de mecanismos de control judicial efectivos. El profesor destacó especialmente el papel de la cuestión prejudicial como piedra angular del sistema jurisdiccional europeo.
Una visión formalista que necesita repensarse
En sus reflexiones finales, Bar cuestionó el excesivo formalismo del enfoque del Tribunal de Justicia, que, en su opinión, centra la protección del Estado de Derecho en el acceso a un juez independiente y en los mecanismos jurisdiccionales, olvidando otros aspectos sustantivos de los valores del artículo 2 TUE. Denunció que estos valores siguen careciendo de un contenido material definido y que la protección de la identidad constitucional de los Estados miembros no puede depender únicamente de procedimientos judiciales.






Un debate crucial para el futuro de la integración
La intervención del profesor Antonio Bar subrayó las tensiones actuales entre la integración europea y la protección de las identidades constitucionales nacionales, en un momento en que los valores fundacionales de la UE se enfrentan a desafíos internos. Su análisis, crítico pero constructivo, invita a repensar los límites y posibilidades del Derecho de la Unión como garante de un espacio común de libertad, justicia y democracia.
