«Por supuesto que quiero colaborar pero, por favor, hagámoslo fuera al sol». Y es que es comprensible que, apenas llegada de una Austria cubierta de nieve y con muchos grados de diferencia en apenas unas horas, Sonja accediera a hablar con nosotros… al aire libre. De por qué se lanzó a la aventura Erasmus+ y de lo que espera aprender en nuestra Facultad de Ciencias de la Salud estuvimos charlando bajo un cielo azul mediterráneo que, por lo que parece, ya la tiene enamorada.
Se llama Sonja, tiene 22 años y viene de la Medizinische Universität de Innsbruck, una localidad austríaca situada en el corazón de los Alpes («la capital de los Alpes», la llaman): ¡aquí está lo que nos contó, recién llegada a la CEU UCH!
Hallo Sonja und herzlich Willkommen in Valencia. Dinos, en primer lugar, por qué te decantaste en su momento por estudiar el grado en Medicina…
La verdad es que, desde siempre, he querido ser médico. Siempre he sentido la necesidad de ayudar a los demás y hacer algo positivo por la gente, así que simplemente tenía sentido: ser médico es una manera perfecta de ayudar a los que te rodean y además, creo que puedo hacerlo bien… ¡o al menos eso espero!
¿Te veremos dentro de unos años ejerciendo como médico general o tienes ya en mente especializarte en algún área específica?
Quiero ser pediatra, ese ha sido mi sueño desde siempre. Desde que empecé mis estudios en Austria siempre he tenido claro que acabaría especializándome en pediatría. Y es algo que nunca ha cambiado, ¡no concibo otra alternativa!
Es decir que, en tu caso, podemos decir que lo de ser médico es pura vocación.
Sin lugar a dudas, para mí estudiar Medicina es algo totalmente vocacional. Y no me preocupa el esfuerzo o el tiempo que me lleve, es algo que me sale del corazón y que voy a conseguir cueste lo que cueste.
Y hablando de Valencia, ¿tuviste claro desde el principio que querías pasar aquí tu Erasmus+?
Si he de ser sincera, lo que quería era venir a España para aprender español, así que me informé sobre universidades que tuvieran convenio con mi universidad en Austria; y finalmente me quedaron dos opciones, Barcelona y Valencia. Lo que siempre tuve claro es que quería una ciudad costera porque me encanta el mar, así que en principio opté por Barcelona. Pero claro, yo no hablo catalán y me daba un poco de miedo no entender las clases, así que finalmente me decanté por Valencia.
Una decisión que nos alegra, por cierto. Y, cuando llegaste a nuestra ciudad, ¿cuál fue la primera impresión que te llevaste?
Llegué la semana pasada, el 13 de febrero, ya bien entrada la noche. Desde el momento en que pisé Valencia me gustó la ciudad, la sentí acogedora: ¡no me moría de frío como en Austria! Me gusta mucho la ciudad, el centro es muy agradable y se nota que está lleno de vida. También me llama la atención que las casas aquí son bastante grandes y bueno, la propia ciudad es mucho más grande que Innsbruck. Tengo la sensación de que aquí se pueden hacer muchas cosas y que la gente es muy amable y cercana.
Nosotros somos valencianos, así que nos encanta que nos digas eso. Y, respecto a tus expectativas, qué te vas a llevar en la mochila cuando tu experiencia Erasmus+ acabe?
Espero aprender sobre el funcionamiento de los hospitales aquí en España y sobre el trabajo de los médicos. Aparte de estos aspectos más académicos, lo que quiero es conocer a mucha gente. Eso, y aprender un nuevo idioma. Bueno, y llevarme un montón de recuerdos que me hagan sonreír. Pienso que la experiencia Erasmus+ es algo único para los estudiantes europeos y que todo el mundo debería aprovecharse de ello.
También me gustaría animar a los estudiantes del CEU de Valencia a venir de visita y descubrir mi ciudad. Estoy segura de que os gustaría mucho Innsbruck. Es una ciudad donde puedes hacer un montón de cosas diferentes: esquiar, hacer senderismo…además, como es relativamente pequeña, ¡es perfecta para moverse y tiene un ambiente estudiantil increíble!
Vielen Dank für deine Hilfe y continúa disfrutando del sol de Valencia. Te aseguramos que lo echarás de menos.
