Probióticos y prebióticos: la solución al malestar digestivo

Últimamente estoy oyendo mucho la palabra probiótico y prebiótico en conversaciones donde las personas expresan su malestar digestivo y lo milagroso que son estos productos para dichas dolencias.

Parece ser que se ha encontrado la panacea para algunas enfermedades digestivas como las enfermedades intestinales inflamatorias.

Escucho, escucho, escucho y pregunto: pero ¿qué es eso de los probióticos y prebióticos?, ¿qué alimentos los contienen? ¿cuál es su uso clínico más frecuente o se utiliza para cualquier trastorno digestivo?, ¿se conoce alguna contraindicación o efectos secundarios?

A veces me responden “favorece la microbiota”.

Entonces sigo preguntando, pero ¿qué es la microbiota y qué función tiene?

Ante todas estas preguntas no suelo obtener respuestas fundamentadas.

Entonces me puse a buscar y encontré respuestas a mis preguntas.

1.¿Qué es el microbiota? Es el conjunto de microorganismos, baterías, hongos, virus y protistas que residen en nuestro organismo. Se han vinculado a múltiples funciones como endocrinas, señalización neurológica, modificación de la densidad mineral ósea, maduración del sistema inmunológico, inhibición de patógenos, síntesis de vitaminas (K, B12 y folato), metabolismo de sales biliares y modulación de algunos fármacos. También tiene la capacidad de modificar el entorno dónde se encuentra.

2. ¿Qué es un probiótico? Son microorganismos vivos, generalmente bacterias beneficiosas, que se consumen para promover un equilibrio saludable de la flora intestinal

3. ¿Qué es un prebiótico? Son sustancias derivadas de alimentos que no pueden ser digeridos, que contribuyen al crecimiento y/o actividad de un tipo de bacterias. Actúan como sustratos para los probióticos y otros microorganismos beneficiosos en el intestino. Estimulan selectivamente el crecimiento y la actividad de las bacterias beneficiosas, lo que a su vez mejora la salud intestinal.

4. Los probióticos y prebióticos se aportan al organismo por medio de alimentos o suplementos. Entre los alimentos probióticos encontramos el chocolate negro, chucrut y yogur; y entre los prebióticos el aceite de oliva y la cebolla

5. El uso clínico más conocido de los probióticos es para prevenir complicaciones generadas por los antibióticos.

6. Pueden tener efectos adversos en embarazadas, pacientes inmunosuprimidas, trasplantadas o con alteraciones vasculares.

Sea la panacea o no lo qué está claro es que el consumo de los suplementos probióticos y prebióticos está en alza, por lo que es una obligación ética y científica realizar estudios sobre su eficacia, bioequivalencia, seguridad y vías de administración para conseguir la mayor seguridad para los pacientes.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí