El modelo de aprendizaje basado en competencias es una gran herramienta para potenciar las habilidades de los estudiantes.
Se genera un escenario participativo en el que los estudiantes dejan de ser meros receptores de información para pasar a ser agentes activos.
Permite a los estudiantes tomar decisiones en base a lo que ya conocen y dominan, lo que fomenta un constante desarrollo y la adquisición de conocimientos y habilidades.
Modelos de aprendizaje tradicionales vs modelos de aprendizaje basados en competencias
En modelos de aprendizaje tradicionales un ingeniero (dependiendo de su especialidad) aprendía toda la teoría sobre electricidad, electrónica, mecánica, comunicaciones, sistemas, etcétera; pero, conocer la teoría no significa poder aplicarla en la práctica. Es decir, saber que una resistencia es un dispositivo que se opone al paso de la corriente no necesariamente le daba al recién egresado idea de en qué momentos o ante qué circunstancias debería usar una resistencia como solución a un problema.
Hay que considerar que cualquier empresa que contrate a una persona, está contratando a alguien que solucione problemas y dé resultados. Si el mismo ingeniero fuera muy bueno, hubiera estudiado en una excelente escuela y supiera con exactitud dónde usar la resistencia y cualquier otro dispositivo necesario, pero que no fuera capaz de expresarse con claridad, también resultaría una desventaja, en ese caso es posible que las personas con quienes trabaja no comprendan cuáles son los materiales que requiere ni les quede claro para cuándo los necesita, por lo que no existiría una colaboración efectiva, ya que su trabajo no se suma de forma adecuada al de los demás o, incluso, puede que sus subordinados no hagan lo que les pide. En este ejemplo se observan claras carencias de competencias blandas (soft skills) como trabajo en equipo, comunicación y liderazgo. Así pues, conocer la teoría no es suficiente para solucionar los problemas de la empresa y dar resultados adecuados. De ahí la importancia de los modelos de aprendizaje basados en competencias.
Las raíces del aprendizaje basado en competencias
El movimiento en pro del desarrollo de competencias en los estudiantes universitarios surgió a finales de la década de los 60 y principios de los 70. En esa época, un profesor de Psicología de Harvard, David McClelland, se percató que los exámenes o pruebas que se aplicaban en las universidades no podían predecir el futuro éxito o fracaso profesional del estudiante (Adams, 1996, citado por Brundrett, 2000). McClelland se empezó a preguntar el porqué ocurría esto y trató de encontrar las variables que le permitieran predecir el futuro profesional de los jóvenes universitarios. Fue en ese momento, que el psicólogo estadounidense fundó la firma consultora “McBer”, con el objetivo de encontrar lo que hacía competente a un trabajador, obteniendo resultados significativos en cuanto a las competencias que debía poseer un trabajador excelente. Fue el origen de las ahora tan conocidas Soft Skills.
Ahora bien, ¿por qué los resultados del trabajo realizado en la firma “McBer” generaron tantas implicaciones en el terreno educativo?
Porque estas investigaciones produjeron una “lista de oro” sobre lo que debía poseer una persona para ser considerada competente en su trabajo, y la pregunta sobre ¿por qué no enseñar a las personas esas competencias? empezó a rondar en las mentes de los educadores de distintas disciplinas.
¿Qué aportan las competencias al perfil profesional del estudiante?
Si la titulación es un requisito, las competencias diferencian y convierten en candidato/a ideal para una empresa. Por ello el aprendizaje basado en competencias es clave.
Como estudiante CEU, además de conseguir el Título de Grado, se adquieren una serie de competencias personales y profesionales muy demandadas por los futuros empleadores, que aportan un valor añadido en el competitivo y exigente mercado laboral.
Algunas definiciones de competencias:
«Conjunto de saberes, técnicas y aptitudes que son directamente útiles y aplicables en el contexto particular de una situación de trabajo. La competencia materializa una o varias capacidades del sujeto» (Le Boterf, 1998).
«Capacidad de generar aplicaciones o soluciones adaptadas a cada situación, movilizando los propios recursos y regulando el proceso hasta conseguir la meta pretendida». (rey, 1996)
«Un conjunto de comportamientos observables que están causalmente relacionados con un desempeño bueno o excelente en un trabajo concreto y en una organización concreta» (Pereda, 1999).
Por tanto…
- El estudiante que adquiere competencias, se encuentra envuelto en un proceso constante de aprendizaje y está más orientado a los resultados, y logrando un mayor rendimiento aplicado a los futuros puestos de trabajo.
- Este modelo representa un nuevo modelo en la educación y erradica el modelo tradicional basado en la memorización de datos e información, que muchas veces resulta irrelevantes para la vida real. Aprender competencias permite aplicarlas no solo en el ámbito académico, sino también en el laboral.
- Los estudiantes se convierten en los responsables de su propio aprendizaje, lo que genera una fuerte autonomía en ellos y alimenta su curiosidad.