ORDEN CARMELITA (S.XVIII)
José María de Jaime Lorén (2010)
Orden Carmelita
Según la propia tradición de la orden, su fundación fue realizada por los profetas Elías y Eliseo en el s. IX a.C., en las inmediaciones del monte Carmelo o monte de San Elías en Palestina. Fue continuada por los Hijos de los Profetas, institución judaica aparecida en tiempos del profeta Samuel semejante a los institutos religiosos del cristianismo, y por otros grupos religiosos hasta llegar a los ermitaños y monjes cristianos, si bien tuvo que esperar hasta el siglo XIII para organizarse al modo de las órdenes monásticas occidentales.
Parece claro que por entonces había ya en el monte Carmelo un reducido eremitorio, y a su imagen se fueron fundando nuevos monasterios. El patriarca de Jerusalén Alberto de Vercelli compuso una regla para la orden, que fue más tarde confirmada por el papa. La vida de estos primeros monasterios carmelitas no es fácil, pues a veces son destruidos por los sarracenos y sus monjes mueren asesinados.
Desde los primeros años del siglo XIII los monjes del Carmelo, europeos en su mayor parte, enviaron representaciones a Europa para efectuar nuevas fundaciones que se establecieron en Chipre, Sicilia, Francia, España e Inglaterra. De esta forma la orden se difundió ampliamente por el este y el centro de Europa, promoviendo desde allí el culto a la Virgen María y la devoción al escapulario del Carmen.
Agua del Carmen o agua Carmelitana
También conocida como alcohol de melisa compuesto, se obtiene por destilación de hojas frescas de Melissa offinalis y de otros materiales aromáticos como canela, corteza de cidra, etc., con alcohol más o menos diluido. Se le atribuyen propiedades hipnóticas y anestésicas, y se usa a dosis de 5 a 20 gramos como estomacal, tónica, antineurálgica y vulneraria.
Dada su composición el Agua del Carmen recibe también los nombres de Agua de toronjil, de melisa o antihistérica.Tradicionalmente se usaba contra los ataques de nervioso o de histeria, que suelen cursar con violentos cambios de carácter, exageración de los sentimientos, que a su vez suelen asociarse a alteraciones físicas (problemas estomacales, palpitaciones) y síquicas (melancolía, mal humor).
Cuenta la tradición que desde 1611 la usaban los monjes de la comunidad de Carmelitas Descalzos. Hoy se sigue preparando con la siguiente fórmula:
- Alcohol 80º, un litro
- Agua, medio litro
- Hojas y flores de melisa, 20 cucharadas
- Raíz de angélica triturada, 1 cucharada
- Corteza de limón, 30 gramos
- Canela, 10 gramos
- Semillas de coriandro, 10 gramos
- Clavos de olor, nº 8
Se mezclan bien todos los ingredientes y se introducen en una botella de vidrio, dejando la mezcla que macere durante tres semanas. A continuación se filtra y se guarda el filtrado en una botella en lugar fresco y lejos de la luz. La dosis suele ser 5 cc. disueltos en una taza de agua.
En el “Diario Español” aparecía su publicidad a mediados del siglo XIX. Se vendía a 16 reales y el depositario era el Sr. Collantes de Madrid.
Agua de toronjil de los carmelitas
Útil contra la apoplejía, según la publicidad del periódico anterior era diferente al agua anterior y se vendía a seis reales en el bazar de la calle Alcalá de Madrid.
Bibliografía
ANÓNIMO: Visitar Web Botánica online. Consulta 22 de julio de 2010.
CUADRADO PÉREZ, M.P.; ALEGRE PÉREZ, M.E. (1986): Estudio de los anuncios de interés médicofarmacéutico, insertados en “El Diario Español”, desde el año 1852 a 1856. Boletín de la Sociedad Española de Historia de la Farmacia, 145-146, 93-115.
José María de Jaime Lorén
Universidad Cardenal Herrera-CEU (Moncada, Valencia)
(Agosto, 2010)