Actualmente, todos estamos viviendo un período de auténtico desierto. La cuarentena nos limita muchas cosas: el ocio, las amistades… Aunque este tiempo se nos presenta con oportunidades que, de primeras, no conseguimos ver: más tiempo con la familia, hacer las cosas que nunca teníamos tiempo de hacer… Pero, ¿y Dios? ¿Dónde le tenemos esta cuarentena? A continuación, unos consejos para sacar el máximo partido a la cuarentena esta Cuaresma:

Reconocernos vulnerables

Hace algunos meses, nadie sospechaba que estaríamos en una situación como esta. Aterrorizados y confinados en nuestras casas. ¿Quién iba a decir que un virus iba a hacer temblar al mundo entero?

Nos sentíamos muy seguros y de repente, como dice Monseñor Munilla «parece que todos nuestros planes, construidos sobre un castillo de naipes, se han desbaratado». Y así, de repente experimentamos nuestra fragilidad: somos vulnerables. Saberse necesitado es una de las esencias del cristiano. Sin Dios no soy nada.

Concienciarnos de que es un tiempo de gracia

«Es importante en este momento reflexionar, ponernos en presencia de Dios y buscar una palabra de sentido. ‬Dios conduce el hilo de la historia a buen puerto y que no acontece nada sin que Él lo permita o tenga un designio de Salvación en cuanto acontece (Munilla, 2020)».

Al ser un tiempo de gracia, podemos ayudarnos de herramientas como las nuevas tecnologías, que nos brindan herramientas para enriquecernos en lo referente a la vida espiritual. En Instagram, por ejemplo, hay cuentas creadas por jóvenes para jóvenes, con sed de Jesús, que ayudan a sus seguidores a estar un poco más cerca de Él: @ssencasa, @_mirandoalcielo, @universitarios_catolicos… No hay escusa, Dios te pide que le busques en este tiempo, no importa el medio ni la circunstancia.

También nos sirven estos días para dedicar un rato del día a tener esa conversación entre Padre e hijo/a, para preparar un examen de conciencia para la confesión, para leer la Palabra, para desear más la comunión…

Dios conduce el hilo de la historia a buen puerto y que no acontece nada sin que Él lo permita o tenga un designio de Salvación en cuanto acontece  (obispo munilla)

Jesús está siempre con nosotros

Algo que no tenemos tan presente como deberíamos. Jesús está con nosotros en los momentos de alegría y en los de tristeza. El Evangelio del domingo pasado lo representaba a la perfección: «Jesús lloró (Juan 11, 35)». Jesús sufre con nosotros, encontramos en su amor nuestro consuelo.

También nos olvidamos de que Jesús hizo su propio desierto y nos invita a encontrarnos con Él en el nuestro. Este es un tiempo de gracia para que aprendas a orar, a estar con Él, a quedarte en silencio. Es ahora el momento cuando tenemos el tiempo que antes decíamos que no teníamos. Hoy Jesús te dice que le busques.

 

Desde el servicio de Pastoral te invitamos a aprovechar este tiempo para vivir en verdad. Vive este desierto de forma personal: reza, ora con la Palabra, alábale… Que lo que hagas sea para su gloria. Ánimo a todos en este período de cuarentena, nos veremos pronto.

 

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí