Misión dental solidaria en Camboya

Estudiantes y antiguos alumnos del Grado en Odontología de la Universidad CEU Cardenal Herrera colaboran en una misión dental solidaria en Camboya cuidando de la salud bucodental de centenares de niños

Profesora CEU-UCH, Alba Jover CerveroAlba Jover es odontóloga y profesora de las asignaturas de Gerodontología y Practicum del adulto de 5º curso del Grado en Odontología en la Universidad CEU Cardenal Herrera. Hace algunos días me comentaba su experiencia sobre esta misión dental solidaria en Camboya, este verano pasado. Era su historia y la de Ning, Víctor, Vita, Elena, Derek y de todos los que convivieron esos días. Le pregunté si la compartiría con nosotros y éstas son sus palabras:

«Las oportunidades se presentan cuando menos lo esperas… Un día estás planeando unas tranquilas vacaciones en Londres y al siguiente recibes una llamada de la directora del Departamento de Odontología de la CEU UCH proponiéndote ir a Camboya en misión solidaria. Al principio te surgen dudas: irte sola tan lejos, qué me esperará allí, qué tal será el resto del grupo, me gustará la comida… pero, al final, en la vida te arrepientes de las cosas que no haces, así que yo hice mi maleta y puse rumbo a Camboya. Por delante, 10 días inolvidables y…

una experiencia que, sin duda, me ha marcado profundamente.

Voluntaria en misión solidaria de Odontología en Camboya

Recién aterrizada en Siem Reap, lo primero que me sorprende es cuan numeroso es el grupo de los que serán mis compañeros en los próximos días: estudiantes y alumni del CEU, padres y madres de éstos, hermanos… ¡Y aún me faltaba por conocer al equipo local que iba a facilitar nuestra labor y nuestra vida durante la estancia en Camboya!

Equipo de voluntarios en la misión solidaria de tratamiento odontoológico en camboya

Esa misma noche me informan de que a lo largo de la misión visitaremos distintos lugares y atenderemos a una media de 300 personas por día, en su mayoría niños procedentes de familias de bajos recursos. Nuestros objetivos principales: enseñarles hábitos de higiene oral y preservar su dentición permanente mediante obturaciones, sellados, flúor y limpiezas.

Voluntarios de la misión solidaria en camboya enseñando a un grupo de niños a cepillarse los dientes

Voluntarios de la misión dental en Camboya formando a un grupo de niños en un aula

Las jornadas de trabajo empiezan temprano, ya que hay que montar la clínica desde cero cada vez que cambiamos de localización. El ritmo de trabajo es elevado y el calor y la humedad no ayudan, pero ver la cara de esos niños, agradecidos y felices porque han aprendido a lavarse los dientes, hace que se te olvide todo y sólo quieres continuar, no parar.

¡Ayudar a los demás es adictivo!

Algo que valoro también mucho de esta experiencia es haber tenido la oportunidad de trabajar codo con codo con nuestros antiguos alumnos. Me he sentido verdaderamente orgullosa de verlos convertidos en grandes profesionales y de pensar que no sólo les hemos transmitido conocimientos, sino también valores. Aunque los madrugones eran importantes y las jornadas de trabajo largas, también hubo tiempo para mezclarse con la gente local en sus calles y sus mercados de comida, contemplar el amanecer en los templos de Angkor Wat y la puesta de sol en el antiguo aeropuerto de Battambang, montar en el tren de bambú o probar los reyes de la fruta (durian y mangostin).

Voluntarios compartiendo el tiempo libre durante la misión dental en Camboya

Tras la misión nos desplazamos a Ho Chi Minh City (Vietnam), donde pasamos tres días que sirvieron para seguir estrechando lazos. Finalmente, llegó el día de emprender el viaje de vuelta, sentimientos encontrados: feliz de regresar a casa con mi gente, con la maleta llena de historias que contar, pero triste por la despedida. Aún así, estoy segura de que nos reencontraremos pronto, repitiendo experiencia».

puesta de sol en el antiguo aeropuerto de Battambang

Esta misión en Camboya no ha sido la primera de la titulación. En anteriores ocasiones nuestros alumnos y profesores han colaborado en otros lugares como SenegalNepal

Todos coinciden en lo grato que es poder ayudar y lo enriquecedor que ha sido, a nivel personal, participar en esas experiencias.

Decía Eduardo Galeano: «…cada día tiene una historia y nosotros somos las historias que vivimos…». Sin duda, ha sido muy agradable leer esta historia. A menudo convivimos con personas sin saber muchas cosas de las que hacen. Desconocemos algunas de las facetas que las definen y poder descubrirlas es una grata alegría y un privilegio. Gracias Alba por compartir tu experiencia; gracias a todos los que habéis hecho posible esta historia #eresloquehaces

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