Emprender en comunicación
Roberto Gorraiz estudió Publicidad y Relaciones Públicas hace diez años. Durante su periodo de estudiante se involucró en muchos de los proyectos que se desarrollaban en la Universidad. Esta inquietud y ese afán por aprender y crecer también lo ha trasladado a su etapa profesional. Hace tres años decidió emprender y actualmente es CEO de una agencia especializada en posicionamiento SEO.
En la siguiente entrevista Roberto nos explica su faceta emprendedora.
¿Qué es lo que te llevó a emprender?
Soy una persona inquieta y mi cabeza no para. Soy una persona con un perfil muy creativo y, en muchos casos, orientado a crear ideas de negocio o que cubran necesidades.
En este caso, emprender fue mi fácil con mis dos socios Héctor Badal y Luis Picurelli. La propuesta estaba clara, el proyecto era muy motivador y casi 3 años después, lo que era una conversación de cafetería se ha convertido en un proyecto consolidado, con grandes clientes y grandes personas en el equipo a las que admiro, respeto y cuido.
¿El emprendedor nace o se hace?
Pienso que se hace. Emprender no es sencillo y no siempre te sale bien. Debes tener muchas cosas en mente y hay que prepararse para imprevistos casi a diario. Sí que es cierto que una vez empiezas, te pica el gusanillo para seguir creando nuevos proyectos.
¿Recomendarías emprender? ¿Por qué?
Es algo muy subjetivo. Mi respuesta sería un sí rotundo. Sin embargo, depende mucho de la personalidad, de la iniciativa, de la fortaleza mental de cada uno. Emprender es algo mágico y es como una parte de ti, tú hijito.
¿Qué consejos le darías a un futuro emprendedor?
Antes que nada, que se forme al máximo. Una vez leí una historia (en realidad creo que ya la he tergiversado bastante) en la que a un deportista que había ganado un torneo le preguntaban si pensaba que tenía mucha suerte. Su respuesta fue algo así como “tiene usted toda la razón, cuanto más entreno, más suerte tengo.
Y esa es la realidad para todo y, por supuesto, para emprender.
Otro consejo fundamental para mí es la importancia de ser valiente y tener capacidad de adaptación. No todo es como pone en los libros o como nos han enseñado. Hay que cambiar en función de cómo se presenta cada situación. Así que valentía, cabeza y dedicación. Mucha dedicación.
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