Investigadores de la Universidad Estatal de Ohio (Estados Unidos) acaban de publicar recientemente en la revista Psychological Science que el acetaminofeno (o paracetamol) tiene como efecto secundario reducir las emociones tanto positivas como negativas.
Como sabéis el paracetamol aumenta el umbral del dolor inhibiendo la síntesis de prostaglandinas, mediante el bloqueo de ciclooxigenasas en el Sistema Nervioso Central (específicamente la COX-3). Por lo que es un analgésico que, a diferencia de otros, es útil además de para tratar el dolor físico, también para el dolor psicológico.
Este estudio va un paso más allá, al demostrar que disminuye de forma considerable la capacidad para sentir emociones. El paracetamol afecta pues, tanto al procesamiento como a la evaluación emocional.
Por lo que, ¡no tengas en cuenta a tus amigos cuando se muestren indiferentes con tus comentarios, quizás es porque se hayan tomado un paracetamol!
